Los árboles figuran en la mayoría de leyendas, mitologías y creencias, desde la antigüedad, como elementos mágicos o prodigiosos. En Supercurioso os hablamos del árbol de la vida, su significado y su leyenda y de la relación entre el cielo y la tierra, entre lo material y lo espiritual, que suponen los árboles para muchas culturas. En esta ocasión nos hemos centrado en un árbol en concreto que forma parte de las creencias islámicas y que tiene nombre propio: Zaqum, el árbol del infierno del que comen los condenados.
Zaqum, el árbol del infierno
El Zaqum es un árbol terrorífico, muy alejado de otros árboles mitológicos. Es en el Corán dónde lo encontramos mencionado varias veces y las descripciones sobre él y sus efectos sobre los condenados son pavorosas.
El Corán dice que el Zaqum existe únicamente en el infierno. Los condenados necesitan comer y lo único que tienen a su disposición son los frutos de ese árbol. La fruta es amarga, espinosa y despide un olor nauseabundo, pero los que están sufriendo la pena del infierno sienten un hambre desmedida que los hace enloquecer y se ven impelidos a engullir sus frutos. Una vez los han comido sus rostros se desprenden y se les da a beber un brebaje hirviendo.
La mezcla hace que sus cuerpos se quemen por dentro, desde el estómago ardiente, como si hubieran bebido petróleo y se desintegren entre horribles sufrimientos. Primero salen los líquidos corporales y luego los cuerpos se desgarran hasta quedar convertidos en un montón de carne y huesos. El fuego infernal en el que se queman los restos invierte el proceso y el condenado queda en situación de volver a empezar, una y otra vez, en un suplicio eterno su macabra relación con el árbol de Zaqum.
El Corán explica en 37:62-68, que los frutos del Zaqum tienen forma de cabezas de demonio. Algunos eruditos apoyan la teoría de que las semillas que hacen crecer al Zaqum son los males hechos por los hombres pecadores y frutos del árbol no son otra cosa que el fruto de las malas acciones realizadas a lo largo de la vida.
Varias plantas existentes en países de religión tradicionalmente musulmana como Sudán Oriental o Jordania han nombrado árboles de su flora autóctona como «Zaqum» , ya sea por lo amargo de sus frutos o savia o por otros diferentes motivos.
El infierno que presenta el Islam, llamado Jahanam, es realmente terrorífico y el árbol del Zaqum contribuye a los sufrimientos de los condenados. ¿Habías oído hablar de este macabro árbol? Si te interesa conocer como es el infierno en las diferentes creencias, puedes leer el post:
-¿Cómo es el infierno? 6 culturas te lo describen
Imagen: