Los individuos con gran inteligencia emocional se diferencian del resto por cómo se enfrentan a situaciones complejas, la forma en la que se relacionan con otros, la manera en la que toman decisiones y por tantas otras bondades que los convierten en imanes para el éxito en distintas áreas de la vida. Para unos pareciera innato, pero la inteligencia emocional es una cualidad que se cosecha al adquirir poco a poco esa sabiduría personal, detectando en cada experiencia esas lecciones que hacen de nosotros seres más evolucionados a nivel interno. ¿Posees inteligencia emocional? ¡Descúbrelo!
11 cosas que suelen hacer las personas con una gran Inteligencia Emocional
-
Valoran lo que tienen
Las personas con gran inteligencia emocional tienden a contemplar lo que tienen y sentirse muy agradecidos por ello, más que agobiarse por las carencias de sus vidas, lo cual tiene un efecto interesante en el cerebro. Según una investigación liderada por la Universidad de California, quienes poseen esta actitud, mejoran su humor, energía y bienestar, por incrementar la hormona cortisol hasta un 23%.
-
No permiten que nada les arrebate el entusiasmo
Si una persona con gran inteligencia emocional se siente satisfecha por un logro personal, no deja que ningún agente externo le haga cambiar de ánimo. Los que comparten esta cualidad, no se comparan con otros, ni mucho menos se dejan influenciar por lo que piensan o dicen los demás sobre ellos. El valor propio va ante todo.
-
No buscan la perfección
La perfección es una utopía, y las personas con gran inteligencia emocional lo saben. Perseguirla es ver el fracaso en todo lugar, pues siempre se puede ejecutar una misma tarea de una manera un poco más “perfecta”. Esta postura debilita las ganas de seguir por esa sensación de insatisfacción permanente, que es precisamente lo que no se permiten estos individuos que prefieren ser consistentes, autocompasivos y se motivan por lo que les depara el futuro, aunque este les traiga algunos tropiezos.
-
Son difíciles de ofender
Los individuos con gran inteligencia emocional tienen confianza en sí mismos y son de mente abierta. Suelen reírse de su persona y no les disgusta que otros también hagan bromas sobre ellos, aunque trazan límites cuando el humor trasciende a la degradación.
-
Reconocen sus fortalezas y debilidades
Hay personas que son muy buenas en las artes culinarias mientras que otras no son capaces de servir ni un cereal. Unos son expertos matemáticos… y otros no pueden contar sin utilizar sus dedos. Quienes tienen gran inteligencia emocional entienden perfectamente sus fortalezas y debilidades, sin que el primero los conduzca al egocentrismo y sin que el segundo les quebrante las ganas de perseguir un sueño.
-
Están siempre abiertos al cambio
El éxito y la felicidad son dos elementos que la mayoría de los humanos ambicionamos. Para lograr ambos, es necesario reinventarnos según lo que se experimente en el camino. Las personas con gran inteligencia emocional se abren al cambio para transformar todo aquello que les pueda impedir que esto ocurra, ya sea desprenderse del miedo, las inseguridades o atreverse a dar un gran salto para cumplir sus objetivos.
-
Se rodean de personas positivas
Con su chispeante luz interior y por sus deseos de llevar una vida despreocupada, las personas con gran inteligencia emocional acostumbran a conectar con individuos que les hagan sentir más felices, relajados y cómodos, no al contrario.
-
Van tras experiencias que les aporten sabor a sus vidas
Viajar, conocer lo desconocido, a gente nueva, salir de la zona de confort para hallar satisfacción personal… las personas con gran inteligencia emocional no son estáticas, están en constante movimiento con el objetivo de ser felices y hacer felices a otros.
-
Sienten curiosidad por los demás y empáticos
Un individuo con gran inteligencia emocional es sensible a las emociones ajenas, tienen un alto nivel empático. Quienes cuentan con gran inteligencia emocional son tan observadores y perceptivos con otros, que pudiera sospecharse que son capaces de leer mentes, porque pueden ver más allá de la superficie.
-
Son equilibrados
Son amables con sus cuerpos y cautos con su vitalidad física. Si se someten a largas jornadas laborales, harán algo para recompensarse, como salir un rato para despejar la mente o relajarse. Una persona con gran inteligencia emocional sabe que para estar saludable, deben ser equilibrados, pues para todo hay tiempo.
-
Debilitan los pensamientos negativos
Escudriñar en lo negativo solo hará que las emociones más pesadas florezcan. Cuando una persona con gran inteligencia emocional es asediada por esta clase de pensamientos, los ahuyentan al reconocer que son solo pensamientos, no hechos. De esta manera, debilitan esas ideas destructivas hasta el punto de erradicarlas. ¿Te identificas con algunos puntos? Regular nuestras propias emociones es vital para no dejarnos derribar por los obstáculos con los que podamos toparnos en este viaje turbulento, que es a su vez apremiante, llamado vida. ¿Te interesa aprender más sobre el tema? Te invitamos a leer: – La inteligencia emocional se educa, ¿por qué no la potenciamos? – 10 films para que los niños desarrollen su inteligencia emocional – TEST: ¿Qué tipo de inteligencia destaca en ti?