Bien decía el mediático presentador norteamericano Fred Rogers, en una de las mejores frases sobre la traición, que «una sola traición basta para empezar a desconfiar hasta de los más leales». En efecto, para establecer vínculos sociales de cualquier tipo, a los seres humanos nos hace falta la confianza. La certeza de que podemos dejarnos caer de espaldas y ese otro, en el que depositamos nuestro afecto, estará para sostenernos. Pero la realidad es que no siempre es así. La historia está repleta de ejemplos en los que ese que se supone debía darnos su mano amiga, se volteó para dejarnos caer. Las traiciones políticas, las sociales, las románticas, las religiosas… todas tienen un resultado común: la fractura de un vínculo en el que ya nada volverá a ser como antes. Hoy en Supercurioso navegamos en las páginas del pasado, para contarte sobre los peores traidores de la historia. ¿Nos acompañas?
Los 10 peores traidores de la historia
1. Judas Iscariote
Judas es el traidor por antonomasia. Es el primero que nos viene a la cabeza cuando hablamos de los peores traidores de la historia. Se trataba de uno de los 12 apóstoles, quienes se suponían eran los más leales y cercanos a Jesús. Sin embargo, Judas vendió a Jesús por treinta monedas de plata. Además lo traicionó con un beso. Los soldados no sabían quién era Jesús y él les dijo que se lo indicaría besándolo. Jesús, sabedor de lo que estaba ocurriendo le dijo: «Judas, ¿con un beso me traicionas?» (Lucas 22:48) Judas, cuando se dio cuenta de la magnitud de lo que había hecho, intentó devolver las 30 monedas, pero los sacerdotes no las quisieron y él, incapaz de superar los remordimientos, acabó colgándose de un árbol.
2. Mata Hari
Entre los traidores de la historia se incluye también un nombre de mujer. El de una mujer seductora, hermosa y polémica, que supo grabar su nombre en las páginas de la historia. A Mata Hari se le considera la más bella espía de la historia. Actuó como agente doble para franceses y alemanes. Su nombre real era Margaretha Zelle y era de nacionalidad holandesa. Separada de su marido, vivía en París, bajo el nombre de Mata Hari, como bailarina exótica. La reclutó un político francés para que se hiciera amante de un oficial alemán y le sonsacara secretos de estado a cambio de dinero. Más adelante se interceptaron mensajes que indicaban que la espía había vendido secretos franceses a los alemanes, traicionándolos. Fue detenida, juzgada y condenada a muerte por traición. Antes de ser fusilada, negándose a que le taparan los ojos, lanzó besos a los soldados que iban a disparar contra ella.
3. Julius y Ethel Rosenberg
Sumamos a la lista de los peores traidores de la historia a un curioso matrimonio: Julius y Ethel Rosenberg. A pesar de su aspecto inofensivo, esta pareja fue responsable de que la Unión Soviética tuviera acceso a los planos de la bomba atómica norteamericana. Aquel filtro de información fue clave en que los soviéticos sumaran poder, y luego se generase el conflicto bélico posteriormente conocido como la Guerra Fría. El castigo para ellos fue severo. Tras ser sometidos a juicio por traición y espionaje contra los Estados Unidos, fueron condenados a muerte en la silla eléctrica, en 1953.
4. Robert Hanssen
Robert Hanssen, el perfecto padre de familia americano, devoto, amante de su familia y de profesión agente del FBI durante 25 años, resultó ser un traidor que trabajaba para la Unión Soviética. Su trabajo oficial consistía en hacer un seguimiento, desde el FBI, de las identidades de los espías rusos que colaboraban con los EE. UU. Pasó información a los soviéticos durante más de 20 años, poniendo en peligro la vida de muchas personas y llevando a la muerte a varios espías. Traicionó a su país vendiendo información. A pesar de que los rusos le pagaban generosamente por ella, parece que había una implicación psicológica, ya que disfrutaba con el riesgo que corría espiando. Los norteamericanos, que lo condenaron a cadena perpetua, lo consideran uno de los grandes traidores históricos.
5. Agustín de Iturbide
El próximo de los traidores de la historia lo encontramos en territorio latinoamericano. Se trata de Agustín de Iturbide, quien fue el primer emperador de México. Aún a pesar del reconocimiento, Iturbide traicionó al Rey de España, al Virrey de la Nueva España y al ejército Realista, del que formaba parte. Entonces, al mando de Vicente Guerrero, empezó a formar parte de las filas de ejército Insurgente, con el que se luchaba por la causa libertaria mexicana.
6. La Malinche
Otra mujer se suma a las filas de los peores traidores de la historia. Se le conoce como La Malinche, y sus acciones determinaron en buena parte el destino del Imperio Azteca. Esta astuta dama entró en alianza con el conquistador Hernán Cortés, a quien le facilitó información vital sobre los puntos débiles del Emperador Moctezuma. También sirvió de traductora, lo que le permitió a los españoles materializar las alianzas que les llevarían a la victoria definitiva en la conquista. Para muchos pasó a la historia como una gran traidora, que entregó al poder extranjero la posibilidad del dominio de sus territorios.
7. Robert Ford
Varias son las películas que nos hablan de Jesse James, uno de los forajidos más famosos del Oeste Americano. Llevó una vida fuera de la ley: robó bancos, trenes… hasta que el gobernador de Missouri puso precio a su cabeza. Finalmente parece que abandonó su vida de delincuencia y se estableció en un pueblo. Pero la traición llegaría para cobrarle las deudas. Uno de los miembros de su desintegrada banda, Robert Ford, lo mató disparándole por la espalda. Lo traicionó por la recompensa que ofrecía el Gobernador y por la promesa de ver conmutadas su pena y la de su hermano. A pesar de haber matado a un delincuente, la población lo tomó como una traición y lo consideró una cobardía. Robert Ford fue a su vez asesinado por otro delincuente que buscaba la fama por haber matado a un cobarde.
8. Antonio López de Santa Anna
Volvemos a México para hablarte de Antonio López de Santa Anna, quien desde el año 1833 fue presidente de este país en nada menos que ¡once ocasiones! Sin embargo, en sus gobiernos el país azteca perdió gran parte de sus territorios. En 1835, luego de una rebelión en Texas, viajó al norte a tratar de aplacar a los rebeldes. El resultado fue la firma de un acuerdo en el que el presidente se comprometió a no tener injerencia en Texas. El siguiente evento dramático ocurrió en 1848, con la invasión de Estados Unidos a México. El resultado fue la firma del tratado de Guadalupe-Hidalgo, en el que el país perdería casi la mitad de su territorio, contando estados como California, Arizona, Nuevo México, Nevada, Colorado y Utah.
9. Marco Junio Brutus
Y avanzamos en este recorrido por los peores traidores de la historia con Marco Junio Brutus. El Emperador romano Julio César, luego de estar encumbrado en el poder, se vio sometido por una emboscada en la que los senadores, armados de cuchillos, se disponían a quitarle la vida. Pero la peor de las sorpresas fue encontrar, entre el iracundo grupo, a su propio hijo. Sin duda es una de las traiciones más bajas de las que la historia tiene cuenta.
10. Napoleón Bonaparte
Pocas figuras tienen el peso y la relevancia histórica de Napoleón Bonaparte. El conquistador más grande de todos los tiempos fue conocido por sus hazañas militares y su visión estratégica. Pero, si nos vamos a los hechos, también habremos de contarlo entre los más notables traidores de la historia. Y es que Bonaparte contó con la ayuda de la corona española para que su ejército atravesara España y así lograra combatir contra Portugal, país aliado de Inglaterra. Una vez conquistados los territorios portugueses, Bonaparte traicionó a España. Entonces, ya posicionado en su territorio, depuso a la corona y nombró en su lugar como gobernante a su hermano, José Bonaparte.
Así que, como podrás ver, las traiciones han ocurrido desde los orígenes mismos de la humanidad, Bien viene siendo hora de reflexionar al respecto. ¡Cuéntanos qué opinas sobre estos traidores y si conocías su historia! Recuerda que te leemos.