Seguro que muchos de vosotros habréis visto la famosa película «Poltergeist» del año 1982 y sus secuelas y quizá os hayáis preguntado cuándo se empezó a dejar constancia escrita de fenómenos de este tipo. En Supercurioso hemos investigado y encontrado que el que se considera el primer poltergeist en sentido moderno tuvo lugar en Inglaterra en la ciudad de Tidworth, en Wiltshire, el año 1661. Fue recogido en el libro de Joseph Glanvill «Saducismus Triumphatus» de 1670 y es una interesante y escalofriante historia. Acompáñanos a conocer El Diablo y el Tambor, el que se considera el primer poltergeist moderno.
El Diablo y el Tambor; la historia del primer poltergeist
Un poltergeist es según la definición «un fenómeno paranormal que engloba cualquier hecho perceptible, de naturaleza violenta y diferente a las leyes físicas, producido por una entidad o energía imperceptible». Engloban objetos que se mueven, levitan o se rompen, ruidos fuertes y en el caso de los espíritus poltergeist se considera que pueden morder, dar golpes, tropezar o morder a las personas a su alcance. También se llama poltergeist al fantasma o espíritu que es el responsable de esas perturbaciones.
La historia del «demonio de Tedworth» forma parte del folclore inglés y se convirtió en una leyenda tan popular que puede encontrarse en baladas y poemas. Explica la historia de los extraños fenómenos que acosaron durante dos años a la familia del magistrado de la ciudad de Tedworth (ahora Tidworth), John Mompesson, entre 1661 y 1663.
La leyenda cuenta que el magistrado John Mompesson juzgó a un antiguo soldado llamado William Drury, que había sido tambor en el regimiento de Cromwell, por haber falsificado los papeles de identificación que llevaba y recaudar dinero con falsos pretextos. Ante las quejas del acusado, el magistrado accedió a dejarlo libre, pero mientras se resolvía la veracidad de los papeles, retuvo el instrumento musical del ex-soldado en su casa. A partir de ese momento, cada noche y durante 2 años, cuando la familia se acostaba, se oía el redoble del tambor por toda la casa, especialmente en el cuarto de los niños. Únicamente durante dos semanas, tras el nacimiento del nuevo hijo de los señores Mompesson, cesaron los sonidos poltergeist.
Se sospechó que fuera el propio William Drury el que perturbaba a la familia, pero desapareció de Tedworth y se cree que fue juzgado y encarcelado en otra población por el robo de un cerdo. Se pensó también que podía ser una broma de los hijos mayores de la familia, pero se comprobó que no eran ellos. Un mes después de iniciarse el fenómeno, éste fue acompañado de movimiento de objetos y de olor a azufre, lo que hizo creer a la familia que en la casa había una presencia diabólica. Se convocó a un sacerdote para que rezara unas oraciones, pero no sirvió de nada. Según explicaron algunos testigos las sillas se movían por la habitación, los zapatos volaban por los aires e incluso un bastón se levantaba y golpeaba a los presentes. Dos años después los supuestos fenómenos diabólicos cesaron.
El clérigo inglés Joseph Glanvill dejó constancia de estos poltergeist en su obra «Saducismus Triumphatus» y se considera que junto al caso del «Diablo de Glenluce», descrito por el matemático Georges Sinclair, son las primeras descripciones de fenómenos poltergeist modernas.
Esperamos que la leyenda del Diablo y el Tambor, que muchos ya en su momento consideraron un fraude, te haya entretenido. ¿Habías oído hablar de este primer poltergeist? ¿Qué te ha parecido? ¿Conoces otros casos similares? ¡Compártelos con nosotros! Si quieres conocer otros supuestos fenómenos paranormales curiosos te proponemos las entradas de Supercurioso: El escalofriante Poltergeist que sacudió a Escocia o Los fenómenos paranormales de «El Baúl del Monje».