Desde la atención de una simple pinchada de clavo, hasta los primeros auxilios vitales para cualquier accidente. Las enfermeras son quienes primero atienden a un paciente, quienes brindan ese primer soporte, con cálidas manos, que muchas veces no es tan tomado en cuenta como debería. Si nos preguntamos de dónde viene la enfermería y cuáles fueron sus inicios, pronto nos daremos cuenta de que estas cuestiones están inevitablemente ligadas a la pregunta sobre quién fue Florence Nightingale. Una pregunta a la cual hoy, en Supercurioso, nos proponemos dar respuesta; acompáñanos a conocer su historia.
Quién fue Florence Nightingale: la primera enfermera moderna
Hasta mediados del siglo XIX, los enfermos en los hospitales de campaña carecían de una buena atención, y las condiciones insalubres y de hacinamiento de estos centros eran en gran parte la principal causa de muerte. Por supuesto, todo esto parece un cuento lejano, pero no es una cuestión tan lejana en el tiempo; es cuestión de retroceder tan sólo unos 200 años, por difícil que parezca. La enfermería, entonces, sería solo un delirio lejano de algún palúdico agonizante.
Florence Nightingale, la dama de la lámpara (como después se la conocería), fue responsable de la profesionalización de la enfermería; la primera enfermera de la historia. De origen británico, Nightingale debería ser una mujer mucho más recordada de lo que es, no solo por la profesión que sacó adelante, tan fundamental para el hombre moderno, sino por sus esfuerzos humanos y sus investigaciones en otras áreas.
Empecemos por decir que fue la primera mujer admitida en la Royal Statistical Society, por destacar en las matemáticas y por su aplicación de la estadística a los estudios epidemiológicos. Sus trabajos le sirvieron de base a Henri Dunant, el fundador de la Cruz Roja, y alcanzaron fama mundial durante la guerra de Crimea por servir de piedra fundadora de los cuerpos de enfermería modernos.
1. Breve biografía de Florence Nightingale
Proveniente de una familia rica, a sus 24 años ya había abandonado las comodidades de su clase para dedicarse a su verdadera vocación: la atención a los más necesitados, lo que la llevó a pelear con su familia por romper con las convenciones sociales de la época. Para 1853, nueve años después, ya se había convertido en supervisora de enfermería de un hospital de caridad en Londres, en el que empezó a introducir técnicas eficientes y una mejor organización en el sistema de enfermería.
Luego vino Crimea, de 1854 a 1856, donde le tocó no solo enfrentarse con los precarios servicios técnicos o capacidad de acción, sino a los prejuicios de los médicos militares que la subestimaban. En el hospital de campaña de Usküdar o Escútari (Turquía), donde logró mejoras espectaculares, se le conoció tiempo después como la dama de la lámpara, puesto que Nightingale solía visitar a los pacientes durante la noche, con una linterna colgando del brazo. Fue entonces cuando su fama de mujer científica empezó a expandirse.
Para 1858, tras volver a Inglaterra, publicó su primer libro, basado en sus propias experiencias en Turquía: Notas sobre la sanidad, la eficacia y la administración hospitalaria en el ejército británico, lo que, aunado a un esfuerzo enorme y ganando incluso el apoyo de la reina Victoria I, conllevó una reforma del sistema sanitario militar británico, luego un cambio en el sistema de sanidad civil, reformas sanitarias en la india, en aquel entonces una colonia de la corona británica, y la creación de la primera escuela de enfermería, por allá en 1860. Luego de lo cual se distancio de su labor, a causa de problemas de salud.
Murió el 13 de agosto de 1910, a los 90 años, mientras dormía, en Londres, dejando tras de sí todo un legado que llega hasta nuestros tiempos, principalmente en el área de la enfermería, pero también en la estadística, la literatura, el feminismo y la teología, sin dejar de lado que sus contribuciones sirvieran de inspiración para la Cruz Roja, y su propia labor como la primera enfermera moderna.
2. La importancia de quién fue Florence Nightingale en la historia
Respondiendo a la pregunta sobre quién fue Florence Nightingale, podría afirmarse sin miedo a la equivocación que se trató de una gran mujer, precursora de técnicas y organización cuya influencia llega hasta hoy. La primera enfermera moderna, la dama de la lámpara, aquella muchacha que se despidió de sus beneficios de casta y se fue a la guerra, a curar a los suyos, y que cambió, para bien, la historia de la medicina.
Esta es la principal razón por la cual todo aquel que vaya a un consultorio, una sala de emergencias, algún hospital, debería recordar que eso no fue así siempre, que no había hace unos cuantos años quien velara por el bienestar de los pacientes, que los moribundos se lamentaban sin que nadie viniera a posar su mano amable sobre ellos, a echar un chiste, pasar algún antibiótico o simplemente velar la fiebre. Es por ello importante agradecer la gran labor de las enfermeras y los enfermeros, pero, sobre todo, aquella ardua labor de Florence Nightingale, que la ubica inevitablemente entre las más importantes mujeres de la historia, aunque por desgracia no haya recibido el reconocimiento merecido.
Esperamos que hayas disfrutado de nuestra aproximación a quién fue Florence Nightingale. Si te ha interesado esta historia, te sugerimos que no te pierdas nuestro artículo sobre Mujeres Científicas, donde descubrirás quiénes se esconden tras nombres como el de Marie Curie y otros desgraciadamente menos conocidos. Déjanos un comentario y cuéntanos todas tus impresiones acerca de la información brindada en el artículo. Nos encantará conocer tus opiniones. 🙂