¿Ya has abrazado hoy a tu perro? En ocasiones, los actos más sencillos encierran las felicidades más placenteras, y aquellas que nos ofrecen nuestra otra familia «peluda», resulta tan beneficioso como relajante.
Sabemos que el acto de abrazar es un gesto humano, que ellos no pueden ejercer ese movimiento envolvente con sus patas, sin embargo, el lenguaje de las emociones no entiende de especies ni de razas, y es algo de lo que todos podemos beneficiarnos.
No hace mucho te hablamos en Supecurioso del lado positivo de esos besos -o lametazos- que nos propinan los perros y que según un estudio, podría cuidar de nuestra salud. En esta ocasión, queremos hablarte de los abrazos, de esos que damos a nuestros perros a lo largo del día…
¿Lo haces tú también?
Cuando todo vaya mal… Abraza a tu perro
Grandes o pequeños, todos los perros tienen el tamaño ideal para que los envolvamos con nuestros brazos y descansemos unos segundos de esta manera sintiendo sus corazones. Nos encanta hacerlo, pero…¿te habías preguntado alguna vez todo lo que puede hacer por ti un acto tan sencillo?
Te lo explicamos.
– Expresas tus emociones de forma más libre
En ocasiones, suele ocurrir lo siguiente: somos de ese tipo de personas poco dadas a la expresividad emocional. No es que seamos algo hoscos o esquivos, sencillamente, no nos gusta evidenciar demasiado nuestra afectividad.
Sin embargo, cuando llegamos a casa nos «deshacemos» en halagos con nuestras mascotas. El ejercicio de abrazar a nuestro perro no nos causa ningún problema, al contrario, lejos de abrazar a amigos o a nuestras parejas, casi nos complace más propinar un buen «achuchón» a ese cachorro o a ese perro ya más mayor que se pasa el día dormitando de sofá en sofá. ¿Es tu caso?
– Nos relaja
Todo lo que suponga acariciar, tocar y abrazar a alguien a quien tenemos en gran estima, es procesado por nuestro cerebro como algo positivo y saludable, por ello, nos gratifica con un buen aporte de endorfinas.
Lo creamos o no abrazar a un perro puede resultar tan positivo como abrazar a una persona, es reconfortante, regula la tensión, el estrés, reduce el nivel de cortisol en sangre y ejerce un efecto muy enriquecedor. Tanto es así, que a día de hoy las terapias con perros se alzan como algo muy saludable para niños con autismo e incluso en ancianos. Todo lo que encienda nuestras emociones es por tanto algo positivo que merece la pena practicar cada día.
– Refuerza nuestra autoestima
Puede que a alguien le parezca irónico...¿Puede un perro reforzar nuestra autoestima? Desde luego. Para nuestros perros somos miembros importantes, somos parte de su manada y nos quieren como a parte de sí mismos. No se trata solo de que seamos sus «proveedores» de alimento, los animales tienen emociones y necesitan también de estas muestras espontáneas de cariño.
El sentir cómo se relajan y disfrutan del abrazo tanto como nosotros nos hace sentir bien, nos emociona, nos reconforta y eleva nuestro bienestar y nuestra autoestima. Pocas cosas son tan agradables como lanzarnos sobre ellos y abrazarlos al llegar a casa, o cuando estamos en la cama y nos despiertan por la mañana…. Así que ahora dinos, ¿sueles abrazar a menudo a tus perros o eres quizá de los que prefieren mantener las distancias con ellos? ¡Vamos, abraza a tu perro!
No dudes en dejarnos tus comentarios y recordar nuestro artículo sobre lo que puede ocurrir si te atreves a dormir con tu perro.
Imagen: Mindfull