Gracias a los avances de tecnología tenemos en el mercado automóviles sin conductor, aviones sin piloto y parece ser que pronto podríamos tener barcos sin tripulación, gracias a una idea de Rolls-Royce en un esfuerzo de luchar contra la piratería moderna. Entérate de qué se trata.
Esta es la idea de Rolls-Royce para fabricar barcos que logren hacerle frente a los piratas
Los transportistas y los constructores navales están explorando cómo hacer que los buques autónomos sean una realidad. Los beneficios podrían ser abundantes. En teoría, estos buques podrían ayudar a reducir el uso de combustible y los costos laborales.
Alrededor del 90% del comercio mundial se transporta vía marítima, lo que significa que los costes de envío de nuestro café, televisores y zapatillas deportivas podrían disminuir si la carga se envía en buques de autoasistencia. Sin camarotes para la tripulación, más carga podría ser cargada en cada barco. La inteligencia artificial que los dirigiría probablemente también haría que estos buques de carga fueran más seguros, pues según un informe de la aseguradora Allianz en 2012, entre el 75% y el 96% de las bajas en el mar se deben a errores humanos.
Pero los buques autónomos también significarían que las compañías navieras tendrían que asegurarse de que sus buques están a prueba de piratas, o lo más cerca posible de ello. En la actualidad, las compañías navieras y sus tripulaciones tienen que recurrir a otras medidas de baja tecnología para proteger a los buques y a sí mismos de piratas, incluyendo alambre de púas, cercas eléctricas y cañones de agua. Sin una tripulación, el buque autónomo, que es probable que sea más caro que un buque convencional, junto con su carga, se convertiría en moneda de cambio para los piratas.
Rolls-Royce, que además de los motores de aviones, fabrica motores de barcos y otros equipos ligados al océano, está trabajando en el objetivo de construir buques autónomos, la compañía espera que los buques autónomos lleven carga en alta mar en unos 15 años.
Y han pensado en todos los retos, pues Rolls-Royce tiene una solución al problema de los piratas que es decididamente más bien de baja tecnología: diseñar un barco que sea más difícil de abordar. Los buques podrían ser diseñados sin escaleras y con bordes curvos, según la compañía.
Quizás a consecuencia de otros métodos de prevención de la piratería de baja tecnología, como el alambre de púas, que han estado en uso desde hace algunos años, y las patrullas intensificadas, la piratería va en declive.
El gran desafío para los constructores navales que buscan navegar en barcos controlados remotamente serán los piratas más modernos: los piratas informáticos. ¿Qué tan bien pueden defenderse estos navíos contra un ciberataque? Todavía no hay respuestas firmes para ello. Oscar Levander, presidente de innovación y tecnología de Rolls-Royce en la unidad marina de la compañía, sugiere que un buque podría ser pre programado para responder a un hack por medio de un «círculo de vapor», lo que hace relativamente fácil que las autoridades navales lo alcancen.
¿Qué te parece? ¿Crees que llegaremos a ver este nuevo tipo de navío, idea de Rolls-Royce, surcar nuestros mares?
Imágenes: US Navy/ Rolls-Royce