El alma para la mayoría de tradiciones religiosas y filosóficas es la esencia incorpórea de un ser vivo. El alma o psique engloba aquellas capacidades que son consideradas mentales como la conciencia, la razón, los sentimientos, el carácter, la percepción, etc. Algunos la consideran mortal y otros inmortal. La concepción de lo espiritual de los antiguos egipcios era muy diferente a la actual. Acompáñanos a descubrir cómo entendían el Alma en el antiguo Egipto. ¡Fascinante!
El Alma en el antiguo Egipto
Para los egipcios el ser humano estaba compuesto por una parte tangible y otra o mejor dicho «otras» intangibles. La parte física era un soporte material y recibía el nombre de Dyet o Jat si estaba momificado. La parte espiritual estaba compuesta por varios elementos que encuadraban perfectamente en la concepción que ellos tenían de la vida y de la muerte, pero que hoy nos resulta casi incomprensible. Los principales elementos que componían el Alma para los antiguos egipcios eran:
El Ib, Ab o Hati
Simbolizado por el corazón, en él residen pensamientos, emociones, voluntad e intención. Es la llave de la vida futura y es pesado por Anubis para decidir el futuro de la persona que ha muerto.
Ka
El Ka es la fuerza vital. Cuando el Ka abandona el cuerpo llega la muerte. Se mantiene a través de la comida y la bebida, por eso en las tumbas egipcias se dejaban alimentos. Heqet o Meskhenet respiraban en la boca de los niños en el momento que nacían y les insuflaban el Ka o el espíritu vital, la parte de su alma que los hacía estar vivos.
Ba
El Ba podría traducirse como la «personalidad»: diferente y única para cada individuo. Los egipcios creían que sobrevivía a la muerte de la persona y que volaba al más allá para unirse al Ka. Se representa como un ave con cabeza humana para representar que puede salir de la tumba volando. Es lo más parecido al concepto occidental de Alma.
Sheut
Es la sombra o silueta de una persona y los egipcios creían que tenía una parte de la esencia de ésta. Se representa como una sombra humana completamente negra. Los faraones tenían una «caja de Sombras» en la que guardaban una parte de su Sheut.
Ren
El Ren es el nombre que la persona recibe al nacer, y aunque éste puede cambiar si la persona evoluciona, tiene una especie de existencia independiente. Los egipcios creían que permanecería vivo mientras fuera pronunciado, por eso escribían profusamente el nombre de los faraones. La cartela o cartucho que rodea los nombres en el antiguo Egipto tenía la función de protegerlos para que sobrevivieran.
Sahu
El Sahu sería el «cuerpo espiritual» que puede volverse duradero e incorruptible en determinadas circunstancias y ascender al Cielo para estar con el Sahu de los dioses o de otros hombres justos.
Aj
Es un concepto ligado a la resurrección y la inmortalidad. Es la unión del Ka y el Ba, pero sólo los faraones o las personas iniciadas llegarán al Aj y estarán entre las estrellas. El Aj sólo se mantiene con los funerales apropiados y las ofrendas constantes. Al Aj de los antepasados es posible solicitarles favores, mediaciones o castigos para los vivos.
La concepción del Alma en el Antiguo Egipto es fascinante y en muchos aspectos diferente del que se tiene en el cristianismo. Si quieres conocer más sobre el Antiguo Egipto, quizá quieras leer el post:
–15 fascinantes datos sobre la religión del Antiguo Egipto y sus dioses