Las curiosidades sobre los gemelos son realmente especiales, pero hay una que es extraordinaria: uno de cada 200.000 nacimientos vienen al mundo como gemelos unidos por alguna parte de su cuerpo. A esta patología se le conoce comúnmente como siameses. Pero ¿sabes por qué se le dio ese nombre a esta condición? Fue precisamente por los hermanos siameses Chang y Eng Bunker. En Supercurioso te contáremos quiénes son estos famosos siameses y cuál es su historia. ¡Acompáñanos!
Los siameses Chang y Eng
El problema de los gemelos unidos se plantea por fortuna pocas veces, pero esta condición está llena de aspectos interesantes y poco conocidos, como es el caso de Daisy y Violeta Hilton. No obstante, la historia de los siameses Chang y Eng resulta un poco diferente… El 11 de mayo de 1811, vinieron al mundo, cerca de Bangkok, Tailandia, en el reino de Siam.
Su particularidad es que nacieron unidos por el tronco. De hecho, estos hermanos tenían sus esternones pegados por un pequeño cartílago de 13 cm de longitud. Y, de igual manera, los hígados de ambos estaban fusionados, aunque funcionaban de manera independiente. Al ser un caso tan singular y poco conocido, los hermanos prontamente se volvieron los siameses más famosos.
Su niñez fue particular, pues en su barrio los llamaban «los gemelos chinos» y, tristemente, sus padres no sintieron gran apego por ellos. Para el año de 1829, un comerciante escocés, llamado Robert Hunter, y que vivía en Bangkok, vio a los gemelos nadando y quedó maravillado con su apariencia. Absorto, les pidió permiso a sus padres para exhibirlos en una gira mundial, quienes aceptaron la solicitud de aquel hombre. Se cuenta que los siameses Chang y Eng Bunker firmaron un contrato a cinco años con el comerciante. Sin embargo, hay otras versiones que dicen que fue su madre quien los vendió para los shows en América.
Cuando llegaron a Estados Unidos, los siameses se hicieron famosos bajo el nombre de: gemelos siameses. Este apelativo fue adoptado por su lugar de procedencia (Siam). Sin saberlo, Chang y Eng Bunker estaban creando con su gentilicio «siamés» el origen del nombre que se utiliza para designar a los gemelos unidos. Fue a partir de la gira y la fama que adquirieron, donde empieza su increíble historia.
1. El espectáculo de los siameses
Según Yunte Huang, autor del libro Inseparables; los gemelos siameses originales y su encuentro con la historia estadounidense, el país al que llegaron los siameses Chang y Eng Bunker era un país del siglo XIX, propio del puritanismo y lo convencional. Los espectáculos de Robert Hunter fueron un medio para cambiar la vida, uno de los mejores shows de entretenimiento en aquella época. Cuando acabó el contrato con Hunter, ellos mismos llevaron el negocio de sus exhibiciones, eran sumamente inteligentes y talentosos. Participaron en el circo Barnum con un show en el que hacían trucos de magia y acrobacias, consiguiendo una buena cantidad de dinero. Su idea era retirarse y llevar una vida tranquila, igual que hicieron, décadas más tarde, otros hermanos como ellos, el conocido caso de Millie y Christine McKoy.
En este punto, Chang y Eng ya eran siameses famosos, habían logrado el tan anhelado sueño americano. Para 1839, compraron una granja en Wilkesboro, en Carolina del Norte, pues se habían retirado del espectáculo con el dinero suficiente para llevar una vida digna. En Carolina del Norte, las personas los consideraban parte de la gente prestante, pues ambos habían obtenido la nacionalidad estadounidense. El autor Huang explica: «En 1832 no había mucha inmigración asiática, así que, en cierta medida, se mezclaron con la población blanca. Los sureños les veían como ‘blancos honorarios’, ya que eran siameses famosos y tenían una buena cantidad de dinero«.
2. La fortuna de Chang y Eng
Con su residencia estable y el dinero suficiente para incursionar en nuevos negocios, los siameses Chang y Eng se convirtieron en propietarios de esclavos con los que iniciaron a comercializar. Un tiempo después contrajeron matrimonio, los dos. Se casaron con dos hermanas llamadas Adelaida y Sarah Anne Yates. Vivían en la misma casa y se sabe que compartían una cama de matrimonio para cuatro. Chang y Adelaida tuvieron 12 hijos y Eng y Sarah Anne 10. Los hermanos siameses compraron varios esclavos para que los ayudaran en las tareas de la granja que ellos no podían hacer. Pasados unos años, las hermanas fueron distanciándose y la convivencia se volvió imposible, por lo que los siameses decidieron que lo mejor era separar a las familias. Cada una vivía en una casa diferente en las dos orillas de un mismo riachuelo y los gemelos pasaban 3 días en cada casa.
Llegada la Guerra Civil americana, apoyaron al bando confederado, en el que incluso luchó un hijo de cada uno de estos siameses famosos. Acabada la contienda, con la derrota del ejército de la Confederación, perdieron casi todo su dinero y los hermanos siameses se vieron obligados a exhibirse de nuevo para subsistir ellos y sus numerosas proles. No consiguieron el éxito de antaño, pero siempre fueron muy respetados por su honestidad e integridad.
3. El fin de los hermanos
En 1870, con 59 años de edad, Chang sufrió un derrame cerebral que deterioró mucho su salud y, además, empezó a beber en exceso. Por su parte, Eng no se vio afectado. Sin embargo, ya en 1874, Chang cogió una fuerte bronquitis y murió mientras los hermanos dormían. Ese fue el final de los siameses Chang y Eng, pues este último se despertó y encontró a su hermano muerto y entendió que su hora también había llegado.
En un intento desesperado por sobrevivir, Eng buscó a un médico para intentar una separación de emergencia, pero llegó demasiado tarde, los siameses Chang y Eng habían fallecido. El último no tenía ninguna patología, pero al parecer la muerte de su hermano y los cambios fisiológicos que devinieron acabaron con su vida.
Sobre la vida de estos interesantes hermanos siameses famosos se han escrito libros, filmado películas e incluso se produjo un musical en Singapur. Sin duda, su conexión debía ser impresionante. Si te ha gustado el artículo y quieres conocer más sobre personas extrañas, te recomendamos descubrir algunas de las familias más raras del mundo.