Son una molestia durante la noche, hasta el punto de quitarte el sueño, y uno de los insectos chupasangre, o por decirlo de un modo más elegante, hematófagos más exitosos en un entorno humano, pues puedes encontrarlos en habitaciones de todo el mundo sin importar el aseo o la higiene, ya que están en casas desaseadas y también en habitaciones de hoteles cinco estrellas. Hablamos de las chinches, o chinches de camas (Cimex sp.), del que conocíamos sus gustos, y ahora también cuáles son sus colores favoritos.
¿De qué color son tus sábanas? Podrías estar atrayendo a las chinches
Un experimento realizado por investigadores de la Universidad de Florida y publicado recientemente en el Journal of Medical Entomology, reveló que las chinches sienten preferencia por determinados colores en las sabanas y cubrecamas, y también que sienten rechazo por otros.
El experimento consistió en colocar varios de estos animalitos, de 1 a 2 mm en placas de Petri (platos de vidrio de 10 cm de diámetro), al descubierto, y darle diez minutos para esconderse en varios refugios con distintos colores ubicados en las placas.
Corraine McNeill, una de las autoras del estudio, comentó:
“Se pensaba que las chinches irían a cualquier lugar para buscar refugio, pero los experimentos que hemos hecho muestran que prefirieron esconderse en ciertos lugares en función del color que tienen”.
Los colores elegidos resultaron ser el rojo y el negro, y los rechazados el verde y el amarillo. Primero se pensó que la elección del rojo fue por la sangre, pero luego llegaron a la conclusión de que buscan el rojo porque las chinches son de ese color y creen poder confundirse en un sitio así, o reunirse con otras chinches; y el gusto por el negro porque lo identifican con la oscuridad y como un sitio donde pueden esconderse.
El verde y el amarillo son colores brillantes y tal vez lo rechazan porque se sienten expuestas a la luz.
Y habría que mencionar que los hábitos alimenticios de las chinches son principalmente nocturnos, y tal vez por eso su gusto por los colores oscuros.
¿Cuáles beneficios podrían desprenderse de esta investigación aparte del conocimiento de los gustos cromáticos de las chinches? Por un lado, serviría para el diseño de trampas que podrían complementarse con feromonas o dióxido de carbono (las trampas con dióxido de carbono también se utilizan para atraer otros insectos hematófagos, como mosquitos y zancudos); y por otro, ahora puedes saber qué lugares de la cama o la habitación escogen las chinches para esconderse durante el día, y qué colores elegir para tu ropa de cama, que podrían mantener alejados a estos molestos animalitos.
Esta noche, antes de acostarte, observa los colores de tu habitación, y presta atención a los lugares donde estén presentes el negro y el rojo, porque allí podría estar tu colonia personal de chinches.
Si te interesó el artículo, tal vez quieras saber de dónde vienen estos insectos.
Imágenes: Wikipedia