El cuidado de los alimentos es muy importante para proteger nuestra salud. Debemos estar muy atentos a la preservación de la comida, la manipulación y el estado de la misma.

Debemos revisar muy bien los alimentos que compramos para detectar irregularidades como los gusanos en el arroz. Es una parte fundamental del cuidado de los alimentos y la manipulación de alimentos.

Cuidado de los alimentos

La forma en que organizas los alimentos en la nevera es muy importante para preservar en perfecto estado sus propiedades y evitar la incubación de bacterias.

En el área inferior de la heladera se recomienda colocar los vegetales usados y productos crudos. Mientras que el lugar ideal para los alimentos cocidos o procesados es la parte superior de la nevera.

En el freezer coloca las carnes en bolsas individuales. Divide las porciones de carne en pequeñas cantidades, así no tendrás que descongelar muchas porciones cuando solo vayas a consumir una parte.

Al proteger los alimentos en bolsas estarás previniendo la formación de bacterias y que se mezclen los olores. También evitas que el hielo se adhiera en la carne, lo que afecta su sabor y textura.

Antes de consumir las carnes que retiras del freezer, verifica que se encuentren en buen estado. Observa el color y prueba el olor para que no ingieras un alimento vencido.

Procura limpiar la nevera de forma semanal, para que de esa forma elimines los posibles focos infecciosos y la comida se mantenga limpia en todo momento.

La adecuada manipulacion de la comida

La adecuada manipulación de la comida

Existen una serie de consejos para la manipulación de los alimentos que debes implementar a diario y así evitar ensuciar la comida cruda o cocida. Puedes prevenir muchas enfermedades siguiendo estos sencillos tips.

Antes y después de manipular los alimentos debes lavarte las manos durante 20 segundos. Jamás llegues a casa y directamente tomes un alimento sin antes haberte aseado.

Nunca dejes los alimentos perecederos y las carnes más de dos horas fuera de la nevera. Lo recomendable es colocarlos dentro de la heladera apenas llegues a casa.

Cuando quieras consumir un alimento que tienes en el congelador, realiza el proceso de descongelamiento dentro de la nevera. Nunca lo hagas fuera de la misma. Después de usar los instrumentos de cocina, debes lavarlos con mucho detenimiento con agua y jabón.

Las mesas y tablas de cortar límpialas con una solución con cloro, que puedes preparar con agua y cloro, para después agregar a un atomizador. De esta forma no habrá bacteria que sobreviva.

Lava los paños de cocina que usas para secar los cubiertos y platos. Algunas personas se esmeran en lavar muy bien la vajilla, pero después realizan el secado con un trapo sucio que puede transmitir infecciones.

En la misma tabla en la que cortaste las carnes y verduras no coloques otro tipo de alimentos. Es importante que cada producto preserve su sabor y textura hasta que debas mezclarlos en la estufa.

El peligro de los gusanos del arroz

El peligro de los gusanos del arroz

Los gusanos del arroz se cuelan con frecuencia en los empaques de distintas marcas, sea convencional o premium. Estos pequeños gusanos son muy difíciles de detectar debido a que adoptan un tamaño similar a los granos de arroz y también su sabor.

El peligro de estos gusanos es que cuando llegan al estómago humano, se podría desatar el proceso de puesta de larvas. Los jugos gástricos en el proceso de descomposición de los alimentos despiertan el proceso en los gusanos, que se alojan en nuestro organismo y podrían generar diversas enfermedades.

Por ello es de suma importancia revisar con detenimiento las porciones de arroz que vas a consumir y retirar los granos que se puedan asemejar a un gusano. Estos animalillos tienen un color entre marrón claro y amarillo, y por eso son más fáciles de distinguir entre los arroces blancos.

El perfecto estado de los alimentos no es cosa de juego. Varias de las enfermedades más comunes que sufre el ser humano surgen a causa de la alimentación, y muchas veces nosotros tenemos la culpa por no ser tan cuidadosos como deberíamos.
Si sigues estos simples consejos para preservar, manipular y limpiar los alimentos, estarás protegiendo tu salud y la de tu familia. Recuerda: un estómago sano es un cuerpo sano.