Seguro que conoces a alguien que sufre dislexia. Esta anomalía en el aprendizaje de la lecto-escritura seguro que ha supuesto para él/ella una dificultad para su integración escolar y social. Las causas no resultan claras, pero ha surgido una nueva linea de investigación que asocia la dislexia con un problema fisiológico en el ojo. Acompáñanos a conocer esta nueva hipótesis que, de ser cierta, puede encontrar un remedio fácil a esta alteración.

 La dislexia puede originarse por un problema fisiológico en el ojo

La dislexia es la alteración que más discapacita para el aprendizaje y se da en todas las partes del mundo por igual. Ocurre en personas con una inteligencia absolutamente normal, sin dificultades motrices o visuales y con deseos de aprender. Se evidencia por una dificultad específica y persistente en el área relacionada con la lecto-escritura y representa un obstáculo para deletrear, escribir palabras, leer rápido o en voz alta y también para entender aquello que se está leyendo.

Una investigación asocia la dislexia con un problema fisiológico en el ojo

Las causas de la dislexia son desconocidas hasta el momento, pero los científicos abogaban, además de su predisposición genética, por la posibilidad de que haya otros factores implicados como pueden ser problemas durante el embarazo o el parto, algún tipo de lesión cerebral, dificultades en la orientación espacio-temporal o secuencial, alteraciones emocionales o de adaptación al entorno escolar o incluso en la percepción visual.

Los neurólogos, en sus investigaciones, creen haber encontrado diferencias en una estructura del hemisferio cerebral izquierdo entre disléxicos y no disléxicos. Otros científicos, en cambio, piensan que la dislexia se debe a una velocidad inferior del hemisferio derecho, que es el que procesa la información visual, mientras que el izquierdo que procesa el lenguaje tiene una velocidad mayor. Sin embargo, las últimas investigaciones llevadas a cabo por científicos franceses creen haber hallado otra respuesta: la causa de la dislexia estaría en un problema fisiológico en el ojo.

Una investigación asocia la dislexia con un problema fisiológico en el ojo

Los doctores Guy Ropars y Albert Le Floch de la Universidad de Rennes iniciaron un estudio en el que participaron 60 voluntarios, 30 de ellos eran disléxicos y 30 no. Centraron su investigación en la «fóvea» una pequeña fosa que hay en la retina y que enfoca los rayos luminosos siendo el punto de mayor agudeza visual y el que se utiliza cuando la persona se concentra en mirar algo concreto. Los ojos tienen dos tipos de células fotorrecetoras, los bastones y los conos. Dentro de la fóvea están la mayoría de conos, que nos permiten distinguir los colores. En el estudio Ropars y Le Floch descubrieron que había diferencia en la disposición de los conos en las fóveas de disléxicos y no disléxicos.

Una investigación asocia la dislexia con un problema fisiológico en el ojo

En las personas que sufren dislexia los conos forman patrones que coinciden en ambos ojos y produce una imagen espejo que confunde al cerebro, los disléxicos, por este motivo, no tienen un ojo dominante. En las personas que no padecen dislexia, los conos se organizan de manera asimétrica y esto permite que las señales que envía un ojo sean anuladas por el otro, por lo que en el cerebro se crea una sola imagen. Para los autores del estudio, «la falta de asimetría podría ser la base biológica y anatómica de las discapacidades de lectura y ortografía».

De momento están ensayando un método a base de una lámpara de luces led emitidas a gran velocidad, pero invisibles, que consigue anular una de las imágenes que se forman en el cerebro de los disléxicos cuando leen. Resulta tan efectivo que las personas con dislexia que lo han probado la llaman «la lámpara mágica». Ropars y Le Floch  han dicho que van a seguir haciendo pruebas hasta que se confirme realmente su efectividad.

¿Padeces dislexia o conoces a alguien que la sufra? ¿Qué te ha parecido esta investigación?

Si quieres saber más sobre nuestros ojos te invitamos a leer el post:

– ¿Tienes los ojos azules? En realidad, son marrones. Tus iris no son sinceros