¿Te imaginas poder ver una fotografía que te mostrara cómo eran los dinosaurios reales? O incluso conocer algunas de las personalidades destacadas de la historia de la talla de Enrique VIII de Inglaterra o de Napoleón Bonaparte. ¿Y si pudieras ver cómo fue Jesús de Nazaret? ¿Te parece poco probable? Pues debes saber que hubo un visionario que intentó demostrar que era posible observar imágenes del pasado e incluso momentos importantes de la historia. No obstante, lo esencial es discernir si su afirmación es parte de una farsa muy bien entramada o una verdad que podría develar muchísimos de los misterios de la antigüedad.
El invento del Padre Ernetti
El padre Marcello Pellegrino Ernetti, miembro del Vaticano, era considerado un hombre sencillo, respetable y honesto ante toda la comunidad católica. Nacido en el año 1925 y muerto en 1994, este hombre dedicó la mayor parte de su vida a comprobar la existencia y efectividad de una máquina capaz de reflejar imágenes e incluso sonidos del pasado, asegurando que había podido atestiguar hechos históricos tales como la caída de Sodoma y Gomorra, la crucifixión de Jesucristo y hasta un discurso de Mussolini.
Esta máquina consistía en una cámara de seguridad que se conectaba a una grabadora de vídeo que era capaz de transmitir imágenes del pasado. Según muchos de los investigadores que han estudiado la capacidad de que este fenómeno pudiera ocurrir, afirman que posiblemente en el interior de la cámara se encontraba un espejo que en lugar de reflejarnos en tiempo real proyectaba imágenes que transcurrían instantes antes. En un intento de explicar la técnica utilizada, el padre Ernetti se remontaba a la filosofía aristotélica afirmando que este proceso podía llevarse a cabo gracias a una especie de desintegración del sonido y la luz, las cuales consideraba eran como la materia, capaces de transformarse y mantenerse en el lugar donde existieron, para posteriormente poder ser recuperadas en un periodo indefinido de tiempo.
En sus propias palabras:
“El principio sobre el que se asentaba aquella máquina es muy sencillo y cualquiera podría reproducirlo con intenciones perversas. Sin embargo, le diré que demostramos que las ondas visibles y sonoras del pasado no se destruyen. Y no lo hacen porque son energía. La grandeza de aquel invento fue que podía recuperar esa energía y recomponer escenas perdidas hace siglos.”
Ernetti explicaba que los grandes telescopios trabajaban de la misma forma que el cronovisor, dado que no proyectaban imágenes en tiempo real, años luz de distancia les separaban. Por lo tanto, lo visto por estos artefactos estaba desfasado en tiempo. Ernetti llegó a mencionar en algunas ocasiones la existencia de un ente que no era aceptado por la física, el éter, un medio que servía de soporte para la luz y que viajaba a través del vacío. Supuestamente esto era lo que mantenía en un estado latente todas aquellas ondas de luz y sonido.
Trabajo científico real
Uno puede preguntarse: ¿cómo es que un simple sacerdote puede desarrollar una teoría y un invento tan innovador y adelantado a su tiempo? El padre Ernetti contaba con un equipo de científicos que fue reclutando con el fin de organizar un proyecto que pudiera constatar lass ideas que, junto con el padre Gemelli, había comenzado a elaborar, mientras desarrollaban un equipo de grabación que, según se afirma, había registrado una conversación del padre de Gemelli antes de que éste falleciera.
Azuzados por la idea de capturar fragmentos del pasado, Gemelli y Ernetti contactaron a Enrico Fermi (físico reconocido por su trabajo con la teoría cuántica y la física nuclear) y Wernher von Braun (ingeniero aeroespacial), construyendo juntos el cronovisor, el cual según la propia declaración de Ernetti, fue destruido por las mismas manos que lo crearon, alegando que era capaz de crear la “dictadura más temible que el mundo haya visto”.
La evidencia del curioso artefacto
Pronto, una vez dada a conocer la historia sobre el fabuloso invento, ciertas fotografías comenzaron a circular, las cuales intentaban demostrar la efectividad del cronovisor. En una de ellas se proyectaba el rostro de Jesucristo en la crucifixión, sin embargo el mismo Ernetti aclaró que esta evidencia era falsa. Posteriormente una segunda imagen revelaba que el cronovisor había podido reflejar a Jesús caminando entre sus discípulos, sin embargo esto también fue desmentido, ya que se trataba de una pintura arreglada de Jesús ante el río Jordán.
Algunos otros testimonios del padre Ernetti aseguraban que había podido completar y dar forma a tratados, obras musicales y algunos otros documentos importantes de la historia que, debido al paso de los años, no se habían podido recuperar del todo, no obstante estas afirmaciones nunca pudieron ser comprobadas.
¿Cuál era el propósito de una historia tan fantástica?
Los diversos testigos, científicos y demás gente cercana a Ernetti, declaraban que no existía razón alguna por la cual el padre, académico y autor de varios éxitos literarios, pudiera inventar tal acontecimiento, darlo a conocer de una forma tan segura y convincente, con tantos argumentos y evidencias. Sin embargo, hoy en día esta teoría y la existencia del cronovisor ha sido cuestionada y defendida a su vez por cientos de personas. En las palabras de Ernetti a quienes dudaban de la índole científica y objetiva de sus explicaciones y teorías:
“…esto no tiene nada que ver con la parapsicología o la metafísica, ¡es ciencia pura! (…) cada ser humano, desde el momento de su nacimiento hasta el de su muerte crea una grabación en el ambiente formada por un doble surco de luz y sonido. Esto constituye su marca individual de identidad. Este mismo principio se aplica a la música y al movimiento. Por medio de las antenas que utilizamos en nuestro laboratorio, podemos sintonizar con esos surcos y recuperar la luz y el sonido del pasado.”
Sin duda, nos invita a la reflexión. No obstante, también nos recuerda a algunas de las teorías de las ciencias ocultistas. ¿Tú que dices? ¿Posible o imposible? Comenta tu opinión de manera constructiva. (Si algún lector es experto en física se agradecerá su contribución.)
Si te ha gustado este artículo, no te pierdas la afirmación de muchos físicos: lo viajes en el tiempo son posibles.