El descubrimiento del sarcófago de Tutankamón supuso uno de los grandes hitos de la historia moderna. Howard Carter fue su descubridor en el año 1923 y seguro que en esos instantes no fue consciente de lo que su descubrimiento significaría para la humanidad. Para que te hagas una idea del sentimiento que embargó al arqueólogo inglés, hemos recopilado esta serie de datos y curiosidades del sarcófago de Tutankamón que seguro te sorprenderán.

Los restos de Tutankamón descansaban en un gran sarcófago de cuarcita, que contenía tres ataúdes hasta llegar a la momia del joven faraón. El primero de ellos, de madera de pino laminado de oro; el segundo, similar; mientras que el último, y más pequeño de todos, es de oro macizo. Este último ataúd es el más icónico de todos y su belleza es de un valor incalculable. Si quieres saber las curiosidades que alberga el sarcófago de Tutankamón e imaginar lo que sintió Howard Carter al abrir la tumba, este artículo está hecho para ti.

El Sarcófago de Tutankamón | Todos sus secretos al descubierto

1. La daga del espacio

Sarcófago de Tutankamón

Todo lo relacionado con este joven faraón ha despertado mucho misterio y expectación desde que fuera descubierto su sarcófago. Entre los muchos tesoros que se encontraron dentro del sarcófago de Tutankamón, hay uno que destaca entre el resto. Es una daga ceremonial de unos 35 centímetros con pomo de cristal de roca, aunque lo más impresionante se encuentra en su hoja. Tras estudiarla al detalle, se descubrió que era de hierro, metal que todavía no trabajaban los egipcios. El dato que sin duda nadie esperaba, es el que revelaron los últimos estudios, la hoja de la daga estaba hecha con los restos de un meteorito. Los expertos creen conocer de que meteorito sacaron el hierro en concreto, según ellos proviene de uno que se halló a unos 200 kilómetros de Alejandría. Esta daga ha servido para elucubrar todo tipo de teorías sobre el faraón y toda su familia, aunque ya se tenían indicios de otros artefactos de hierro en alguna dinastía anterior.

2. 110 kilos de oro macizo

Sarcófago de Tutankamón

Sin duda alguna, el más llamativo y cuyo valor es incalculable es el tercero y último de los ataúdes que guarda la momia del faraón Tutankamón. Además de su peso, 110 kilos, mide 187 centímetros. Este ataúd estaba recubierto al principio con una espesa capa de betún que se había endurecido con el tiempo, tras retirarla apareció la cara del faraón que estaba en la misma posición que en los anteriores ataúdes, es decir con los brazos cruzados sobre el pecho. La delicadeza con la que está trabajado el oro, hacen de este ataúd una de las piezas de orfebrería más importantes de la historia antigua.

3. Sarcófago de piedra

Sarcófago Tutankamón

El sarcófago que contiene los tres ataúdes uno dentro de otro, como si de una matrioska rusa se tratará, fue lo primero que llamó la atención de Howard Carter cuándo se introdujo en la cámara mortuoria de Tutankamón. Este impresionante sarcófago está hecho de arenisca silicata pintada y tiene una superficie de 275 centímetros de largo por 147 centímetros de alto. Las esquinas de este gran sarcófago están protegidas por cuatro diosas aladas y la parte superior la remata una cornisa de media caña.

4. Máscara funeraria

Sarcófago de Tutankamón

Posiblemente, esta máscara sea uno de los objetos más icónicos de todo Egipto. Cuando Howard Carter abrió el último de los ataúdes, ésta se encontraba incrustada en la cabeza del joven faraón a modo de protección. Hecha de oro principalmente y de otros materiales preciosos, entre los que destacan el lapislázuli, la turquesa, la coralina, el cuarzo o la obsidiana. La expresión de esta máscara es de infinita paz y Howard Carter la describió en su diario como «la máscara de oro batido, una bella y única muestra de la retratística antigua, tiene una expresión triste pero tranquila, evocando la juventud truncada prematuramente por la muerte». Su peso es de 11 kilos y la vivacidad que transmiten sus ojos es casi sobrenatural. Simbólicamente, esta máscara representa mucho más que la cara de un joven, al estar hecha en oro alcanza un grado de divinidad, ya que este material representaba al sol algo muy sagrado para los egipcios.

El descubrimiento de la tumba de Tutankamón es un hallazgo que difícilmente se pueda igualar en toda la historia de la humanidad. Cada estudio que se hace tanto al sarcófago como a la propia momia del faraón revela algo nuevo e interesante sobre la vida de Tutankamón y la de toda su estirpe. Infinidad de libros, películas y obras se han inspirado en la vida del joven faraón egipcio. Ahora nos gustaría conocer tu opinión acerca de este interesante artículo. ¿Crees posible que el arma de Tutankamón tenga origen extraterrestre? ¿Has podido presenciar en directo su impresionante máscara funeraria? ¿Qué es lo que más te llama la atención del sarcófago de Tutankamón? ¡Déjanos tus comentarios, estamos deseando leernos!