En Supercurioso hemos ahondando en la personalidad introvertida a lo largo de varios artículos. Te hemos definido sus rasgos, sus intereses e incluso te hemos explicado cómo es la mejor forma de interaccionar con una persona introvertida.
Ahora bien, si hay algo que nos faltaba por abordar es «el porqué». ¿Qué hace que, por ejemplo, tú seas introvertido, que tu mejor amigo sea tímido y que. a la vez, tu pareja sea más bien extrovertida?
La ciencia y la psicología siempre intentan definir los orígenes de cada comportamiento buscando no sólo causas psicológicas, sino también las «raíces» bioquímicas e incluso genéticas.
Hemos de dejar claro que son simples estudios. El que los aceptes o no es elección de cada uno, puesto que en relación a estos temas hay expertos que buscan bases genéticas, otros ambientales y otros, como es el caso de este trabajo, causas puramente bioquímicas.
Te lo explicamos.
¿Eres introvertido? La ciencia sabe por qué
El estudio apareció publicado en la revista «Quiet Revolution». Como ya sabes, en los últimos años y gracias sobre todo a los trabajos de Susan Cain («El poder del del introvertido»), este tipo personalidad es objeto de múltiples intereses. De hecho, hay estudios que dicen que los introvertidos serían, por ejemplo, grandes líderes por las siguientes capacidades:
- Son observadores.
- Son sensibles e intuitivos.
- Son reflexivos
Ahora bien, si bien es cierto que gracias a estos trabajos el gran público sabe que un introvertido no es tímido y que no por preferir en ocasiones la soledad, rechaza relacionarse ni disfrutar como cualquier otra persona de los eventos sociales; lo que faltaba por entender es qué hay en el cerebro de un introvertido para ver y sentir el mundo de este modo.
- Jennifer Granneman, responsable de este trabajo, nos explica que la causa básica es la dopamina. Este neurotransmisor está siempre muy activo en los extrovertidos, les hace buscar refuerzos como relaciones, diversión, contacto físico, excitación, dinero, bienestar, movimiento, reconocimiento social, atención de quienes les rodean…
- Seguro que también tú tienes el típico amigo que nunca se cansa de llamar la atención, de ser el alma de las reuniones, de hablar… Para ellos, estar en un entorno en calma y sin demasiados estímulos es poco más que caer en una depresión: es perder el tiempo, es desesperarse.
- En cambio, los introvertidos disponen de un nivel de dopamina algo diferente. No es que no dispongan de este neurotransmisor, en realidad, el circuito cerebral que lo activa está en un nivel más bajo. Ello hace que busquemos más los instantes de calma, que de vez en cuando nos apatezcan las fiestas, pero que al cabo del tiempo necesitemos irnos para recuperar la calma.
- Nuestro nivel de atención decae con los largos discursos de los demás, nuestra mente cae en la introspección y volvemos a nuestro mundo interior.
Los expertos nos explican que la dopamina es el neurotransmisor que nos hace buscar objetivos y eso nos caracteriza a todos, no hay duda, pero a otro nivel. Hay quien busca caer bien a todo el mundo, quien está siempre pendiente de su teléfono para ver cuándo quedar, cuando salir, qué dicen de ellos, quien lo busca y quien le da un like en una foto.
A los introvertidos, este tipo de cosas también les interesa, pero muy de vez en cuando y, desde luego, no es su prioridad. A su vez, la otra cara de la dopamina sería en este caso la acetilcolina. Este neurotransmisor nos facilita el poder tener durante un instante determinado, una concentración profunda, dejando a un lado todo estímulo. No buscamos refuerzos, sólo pensar, observar, dejarnos llevar por la introspección: algo común en el introspectivo.
Así que ahora dinos… ¿eres introspectivo? ¿Te sientes identificado con estos rasgos? Si te ha gustado este artículo, conoce también a las personas altamente sensibles.