Las tendencias de modas van y vienen, pero muchas de ellas lograron sobrevivir al paso de los años sin que conozcamos dónde y cómo surgieron. ¿Te has preguntado por qué los hombres usan corbatas y por qué nos pintamos las uñas? Sigue leyendo para descubrir historias curiosas detrás de las costumbres estéticas y tendencias de moda que conoces bastante bien (o eso era lo que creías), y no olvides echarle un vistazo a esta selección de frases de moda si te interesa esta temática. ¡Pronunciadas por los más míticos diseñadores!
5 curiosas historias detrás de tendencias de moda que conoces
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¿Por qué las mujeres nos rasuramos las piernas?
Depilarse o rasurarse los vellos corporales es una tendencia que la mayoría de las mujeres seguimos a cabalidad. Por supuesto que encontramos algunas excepciones durante fechas invernales, cuando el vestuario de la temporada funciona a la perfección para cubrir aquello que no queremos sea visto por otros.
Lo mismo ocurría con las mujeres victorianas, por ejemplo, que debajo de los espesos vestidos y de las medias de nailon podían ocultar sus piernas sin afeitar. Pero la Segunda Guerra Mundial acabaría con toda oportunidad de ir por el lado práctico en cuanto al vello corporal.
Estados Unidos sufrió una fuerte escasez de nailon. Esto obligó a destinar el material únicamente a la elaboración de paracaídas de guerra, paralizando por completo la producción de medias femeninas. La noticia preocupó a más de una, pues asomar el vello entre los vestidos no era una opción para las damas de la época, así que prefirieron deshacerse de ellos al ras de una hojilla. Desde ese momento, rasurarse las piernas se convirtió en algo tan cotidiano, a medida que el largo de los vestidos se reducía más y más con el paso del tiempo.
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…Y ¿por qué nos depilamos las axilas?
Esta es una de las tendencias de moda más engorrosa. Todo comenzó con una publicación en Harper’s Bazaar, en 1915. Anunciaban que los vestidos sin mangas serían el nuevo grito de la moda. ¡Una noticia fantástica! No obstante, para lucirlos de acuerdo con la tendencia, las mujeres debían olvidarse de los acostumbrados y naturales vellos de las axilas.
Para que esto quedara claro, el artículo venía acompañado con la fotografía de una modelo posando uno de estos trajes sin mangas. Llevaba ambos brazos arqueados sobre la cabeza, dejando ver las axilas completamente limpias. Un cambio drástico.
Más adelante, no faltaron los artículos que apoyaran la propuesta de Harper’s Bazaar, convirtiendo progresivamente lo que era socialmente aceptable en algo mal visto. Así que, ¡adiós vello!
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¿Desde cuándo nos pintamos las uñas?
En la actualidad vemos cómo pintarse las uñas se ha convertido en un arte, con la variedad de diseños y técnicas que encontramos en revistas y portales web. Pero, ¿qué si te contamos que los antiguos babilonios, hace 5 mil años atrás, adornaban sus uñas con oro sólido? Según se evidencia, amaban y cuidaban con especial atención las manos, tanto como para embellecerlas con el material más fino de sus tiempos.
Como ves, es una práctica más arcaica de los que muchos se habrán esperado.
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¿Y de dónde vienen las corbatas?
Hay quienes las aman y otros las sienten como una soga al cuello, pero las corbatas son un accesorio elegante que no suele faltar cuando se trata de engalanar los trajes, en ocasiones de rigurosa etiqueta.
Al igual que las otras tendencias de modas, las corbatas tienen una procedencia curiosa y, sí, inesperada. Comenzaron a ser usadas por mercenarios croatas contratados por el rey Luis XIII, en el marco de la Guerra de los Treinta Años en los 1600s.
El propósito inicial de estos trozos de tela colocados alrededor del cuello era el de sostener la parte superior de los chalecos, usados para el combate. Pero al rey Luis XIII le gustaron tanto, que demandó fueran usadas obligatoriamente durante las reuniones. ¿Imaginaría el monarca que cada 18 de octubre se festejaría en Croacia el Día de la Corbata? Le habría fascinado.
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¿Te has fijado que algunos botones de las mujeres van del lado izquierdo y los de los hombres al derecho?
Si no lo has hecho antes, ¿qué esperas para comprobarlo? Todo esto tiene una explicación que data en el siglo XIII. Cuando los botones fueron inventados, producirlos demandaba el uso de nuevas tecnologías y materiales costosos, de modo que solo eran fabricados para que las clases pudientes hicieran uso de ellos.
Y como toda doncella disponía de alguien que le ayudase a ponerse el vestido, los botones fueron colocados del lado izquierdo para facilitar el abotonado a quien se encontrara de frente, en caso de ser diestra.
En cuanto a los hombres, los botones eran fijados en el lado derecho por dos razones: la primera, para que pudieran abrocharse sin el auxilio de nadie. Y la segunda, que los botones se encontrasen del lado dominante permitía a los militares esconder el arma debajo de la camisa, con la facilidad de alcanzarla sin tanto estorbo, según explica la historiadora de moda Chloe Chapin.
Pese a que en la contemporaneidad los botones son producidos masivamente para todo público, ya ves, hay tendencias de moda que se niegan a morir.
Curioso, ¿verdad? ¿Qué te han parecido estas historias? ¡Cuéntanos!
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