Leonora Carrington nació en Lancashire, Inglaterra, y fue una de las artistas más originales y alegres que han existido, aunque de corazón era más mexicana que cualquiera. Tanto es así, que ha pasado a la historia como la artista surrealista mexicana más representativa del siglo XX. Pintora, escultora, grabadora, escritora, dramaturga y escenógrafa, Carrington ha sido considerada también la última surrealista viva en México. Cabe destacar que en el tiempo que Leonora empezó a demostrar sus facultades artísticas, las mujeres no aparecían significativamente en el mundo del arte. Hoy, en Supercurioso, te proponemos que nos acompañes a conocer su apasionante vida.

Leonora Carrington, la artista mexicana del surrealismo

1. Biografia de Leonora Carrington

Leonora Carrington nació en abril de 1927 como parte de una familia aristócrata, gracias a lo cual tuvo la oportunidad de disfrutar de la lectura, la hípica y de escuchar historias celtas que posteriormente la ayudarían a expandir su mística imaginación. Destacó también por su rebeldía, lo que le provocó que asiduamente se viera inmersa en acaloradas discusiones. Sin embargo, no tardaría en decidir que la pintura sería su refugio particular, momento en que se inscribiría en la rigurosa Academia de Ozenfant, donde le enseñaron miles de técnicas.

Mantuvo un impetuoso romance con Max Ernst cuando ella tenía veinte años y él cuarenta y seis, quien la adentraría en el mundo surrealismo. Tras ser declarado su marido enemigo del régimen español, Leonora fue ingresada temporalmente en un hospital mental por la desestabilización psíquica que el acontecimiento le había causado. No obstante, escapó, llegando a Lisboa.

1943 sería el año en que Leonora cambiaría radicalmente su vida, decidiendo abandonar la turbulenta Europa para vivir en Ciudad de México, un lugar donde algunos de sus contemporáneos habían encontrado la paz. Moriría a los 94 años, víctima de una neumonía en su amado México, dejando unas obras que reflejarían a la perfección su mundo surrealista, el interés por la magia, la alquimia, el tarot y los cuentos de hadas.

2. Obras de Leonora Carrington

Autorretrato

No se conoce la fecha exacta de su creación, aunque se estima que se realizaría cuando ella tenía unos veinte años. Podemos observar a la artista sentada en medio de una habitación austera, prácticamente vacía, vestida con unos pantalones de montar y unos botines victorianos de tacón. Todos los elementos que la rodean reflejan su ansia de libertad, y la extraña butaca donde está sentada tiene brazos humanos y calza botines, tal como ella misma.

Se cree que Autorretrato hace alusión a la vida elegante, aburrida y burguesa que sus padres habían programado para ella. Detrás de la artista, podemos ver un caballo-balancín que vuela hacia la ventana, tratando de escapar del claustrofóbico ambiente doméstico para poder correr libre por el campo. Este caballo de juguete sería una representación de la propia Leonora, huyendo de sus padres.

2. Are You Really Serious? (1953)

Algo que siempre llamó mucho la atención de Leonora fue su exquisito sentido del humor y desparpajo, así como el carácter insólito de sus títulos. Este último aspecto es especialmente apreciable en la obra Are you really serious?, donde una figura hila un misterioso telar, mientras dos perros egipcios dialogan en el silencio de una noche estrellada.

3. Green Tea (La Dame Ovale) (1942)

Este cuadro es muy especial en la obra de Leonora, pues fue el primer cuadro que pintó desde su llagada a México. Green Tea (La Dame Ovale) (1942): en la confusión de llegar a un país del que no conocía la lengua, en el que no tenía familia y en el que nunca había estado antes. A pesar de las adversidades, muy pronto se estableció y se puso a pintar. Y quedó instalada para siempre en el corazón del mundo latinoamericano.

4. Y entonces vimos a la hija del minotauro (1953)

Los personajes de Leonora se caracterizan por ser un reflejo del inconsciente. Carrington es de las pocas artistas que logra crear composiciones complejas, en términos de que en sus cuadros viven distintas situaciones a la vez y en distintos niveles. Tal es el caso de Y entonces vimos a la hija del minotauro (1953)

5. El mundo mágico de los mayas

Antes de realizar este precioso mural que se conserva en el museo nacional de antropología de México,  Carrington pasó 6 meses en San Cristóbal de las Casas, estudiando las diversas prácticas religiosas y tradiciones, especialmente la relación entre el hombre y la naturaleza en la cosmogonía maya. Las obras de Carrington obedecen a ese gusto por el país mexicano que la artista siempre tuvo. La fascinación por los pueblos indígenas es común entre los extranjeros que asientan, aún hoy, en el país.

Con su muerte dejó un vacío en el corazón de  todo un país y  de los que vieron en su obra la maravillosa magia del arte surrealista. Leonora Carrington la artista surrealista mexicana  dejó tras de sí una herencia artística que difícilmente será olvidado. ¿Conocías a la gran Leonora Carrington? ¿Te sientes identificado con el surrealismo? ¡Déjanos tus comentarios!