Al este del estado de Washington, en los Estados Unidos, existe un lugar que escapó de la comprensión de los científicos y geólogos que durante años estudiaron las extrañas formas de relieve que se hallan en esta área, hasta que por fin la respuesta vino del lugar menos esperado. Un profesor de secundaria se atrevió a cuestionar los dogmas científicos aceptados e hizo un descubrimiento que sorprendió a los expertos. Descubre de qué se trata.

El lugar formado por mega inundaciones que fue un enigma para los científicos durante décadas

En medio de un desierto, ubicado al este del estado norteamericano de Washington, que recibe menos de ocho pulgadas de lluvia al año, se encuentra lo que alguna vez fuera una de las cataratas más grandes del mundo.

Se trata de una catarata de tres millas de ancho y cuatrocientos pies de altura. Para comprender la gran magnitud de la misma, podemos decir que allí fácilmente caben diez Cataratas del Niágara. Las piscinas de inmersión que se encuentran en su base sugieren que el enorme flujo de agua tenía un gran poder de erosión, sin embargo, en la actualidad no corre ni una gota de agua por esta zona.

En lo que los científicos llaman la Meseta de Columbia, Dry Falls no es la única anomalía que llama la atención. Existen cientos de cascadas secas extendidas sobre 41.500 kilómetros cuadrados, así como cañones sin ríos cercanos que podrían haberlos tallado, montones de grava tan altos como rascacielos, agujeros profundos en el lecho de roca que tragarían bloques enteros de la ciudad, y rocas en extrañas posiciones.

El lugar formado por mega inundaciones que engano a los cientificos durante decadas

Los primeros granjeros de esta zona llamaron las áreas rocosas «scablands» (terrenos pelados/erosionados) y las descartaron prontamente al considerarlas inútiles, puesto que allí no podían sembrar sus cosechas. No obstante, los geólogos no perdieron el interés. La formación de las misteriosas Scablands resultaba un enigma para ellos y tras décadas de debate, por fin surgió una respuesta.

Un profesor de secundaria llamado Harley Bretz fue quien dio con la informacion que resolvería este enigma. En 1909, el profesor oriundo de Seattle visitó la Universidad de Washington para ver el nuevo mapa topográfico de la Cuenca Quincy, una gran área en el lado oeste de la meseta de Columbia.

A pesar de sus cortos 27 años y su carencia de formación formal en geología, cuando Bretz miró el mapa, notó una característica sorprendente: una enorme catarata (al igual que Dry Falls) en el borde occidental de la cuenca, un lugar donde el agua parecía derramarse de la cuenca y hacia el río Columbia, tallando un cañón de varios cientos de pies de profundidad. Las cataratas hubieran sido más grandes que el Niágara, pero no había ninguna fuente aparente de agua para ellas, ninguna señal de un río que condujera a la catarata.

Bretz se dirigió a la universidad para preguntarles sobre el tema, pero no recibió respuesta alguna. Según cuentan, ese fue el momento en que decidió convertirse en geólogo y obtuvo su Ph.D de la Universidad de Chicago cuatro años más tarde, cambió su nombre profesional de Harley a «J Harlen» para sonar más respetable, y en 1922 regresó al este de Washington para echar un vistazo más de cerca a la meseta.

Fue entonces que, luego de dos temporadas de campo, el profesor llegó a una dramática conclusión: la única explicación posible para las características de toda la región fue una inundación masiva, quizás la más grande de la historia de la Tierra -un desastre que barrió la meseta de Columbia Rock, tallando cañones y cataratas en cuestión de días. «Todas las demás hipótesis responden a objeciones fatales», escribió en un artículo de 1923.

¿Qué te parece? ¿Esta mega inundación también te ha hecho pensar en el Diluvio Universal?

Imágenes: Wikimedia Commons