Lidiar con la ansiedad puede ser sumamente complicado, desde hacer yoga hasta la medicación, muchas son las estrategias que tienen los especialistas para aliviar este padecimiento, pero desde casa también puedes hacer algo contra ello.

¿Qué hacer y qué no deberías cuando sufres de ansiedad?

No todas las personas con trastorno de ansiedad generalizada tienen los mismos síntomas, pero la mayoría de las personas experimentan una combinación de síntomas emocionales, conductuales y físicos que a menudo fluctúan, empeorando en momentos de estrés. Mira estos tips para mejorar:

Conéctate con otros

El apoyo de otras personas es vital para superar la ansiedad. La interacción social con alguien que se preocupa por ti es la manera más efectiva de calmar tu sistema nervioso y de disminuir la ansiedad, por lo que es importante encontrar a alguien con quien puedas conectarte cara a cara de forma regular.

Qué hacer y que no cuando sufres de ansiedad

Esta persona debe ser alguien con quien puedas hablar durante un período de tiempo ininterrumpido, alguien que escuche sin juzgar, criticar o distraerse continuamente por el teléfono u otras personas. Puede ser tu pareja, un familiar o un amigo. Evita la soledad a toda costa, esto te hará más tenso y estresado.

Aprende a calmarte rápidamente

Si bien la interacción social con otra persona cara a cara es la forma más rápida de calmar tu sistema nervioso, no siempre es realista tener un amigo cerca para apoyarse. En estas situaciones, puedes auto-calmarte y aliviar rápidamente los síntomas de ansiedad haciendo uso de uno o más de tus sentidos físicos.

Mira, huele, escucha, toca cualquier cosa que te haga sentir relajación, ve a pasear para despejar la mente.

Come más sano

Sentirte ansioso puede hacer que desees comer por el estrés, pero esto puede ser contraproducente. Hay alimentos que pueden ayudarte con la ansiedad, especialmente las proteínas y los granos integrales.

También hay alimentos que evitar si padeces ansiedad. Los azúcares pueden tener un efecto rápido inicial que al principio se siente bien pero desaparece rápidamente, lo que a menudo provoca fatiga o dolores de cabeza. Por ejemplo, la cafeína puede hacerte sentir irritable y dificultar el sueño.

No a los pensamientos negativos

Los pensamientos negativos pueden ser la raíz de la ansiedad. No siempre es fácil cambiar eso, pero existen tratamientos efectivos para contrarrestar el pensamiento negativo, como la terapia cognitivo-conductual (TCC) y la Terapia de aceptación y compromiso (TCA), que se basan en cambiar y trabajar a través del pensamiento negativo para convertirlo en otra realidad.

LLevar un diario

También podría ser útil comenzar un diario de pensamiento para rastrear tus pensamientos negativos o considerar unirte a un grupo de apoyo, ya sea en línea o en persona.

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Imágenes: Pixabay, Pixabay