Mientras nosotros nos divertimos con los últimos virales de moda y compartimos fotos personales, Internet se ha convertido en el escenario de la Guerra Cibernética.
Virus espías
Todos los países desarrollados han implementado estrategias de ciberespionaje, que se evidencian con ataques como el que sufrió Estados Unidos el pasado mes de junio, en el que la información privada de cuatro millones de empleados federales se convirtió en pública.
Aunque ellos no se quedan atrás, empresas como Kaspersky y Symantec afirmaron que EE.UU., junto con la colaboración de Israel, había desarrollado el virus Stuxnet, capaz de afectar a sistemas industriales y con el que lograron infiltrarse en los ordenadores de una planta nuclear iraní. También crearon otro, llamado Regin, con el objetivo de espiar los dispositivos de Angela Merkel, la cancillería alemana, y de la Comisión Europea.
Por otra parte, se sospecha que España elaboró un troyano, ‘Careto’, que espiaba a Marruecos, mientras que Francia hacia lo mismo con un ‘spyware’ denominado Babar vigilar a España.
Además, existe la Red October, una amplia red de ‘ciberespionaje’ casi global, de origen ruso y chino.
Ejércitos cibernéticos
Son muchas las voces que apuntan a que la ciberguerra podría ser la causa de la Tercera Guerra Mundial, por lo que todos los estados quieren preparase creando ejércitos cibernéticos mediante profesionales capaces de elaborar todo tipo de virus, programas espías y software intrusivo.
De hecho, Snowden dio a conocer el proyecto de «La Alianza de los 5 Ojos», de acuerdo con una información del semanario alemán Der Spiegel, con el que Estados Unidos busca gobernar Internet junto con Reino Unido, Canadá, Nueva Zelanda y Australia.
Se trata de un programa secreto ‘Politerein’, que lleva ocho en funcionamiento, compuesto por guerrilleros informáticos que operan con la más avanzada tecnología de Internet y que realizan los ataques TAO (Tailored Acces Operations), en los que se infiltran, manipulan y controlan factores claves como el agua potable, la electricidad y los aeropuertos de enemigos. Incluso, pueden destruir ordenadores ajenos.
No hay que olvidar que hoy en día, los ordenadores tienen información esencial sobre las estrategias militares de cada país. Los sistemas de seguridad y los software especializados podrían ser atacados descubriéndose numeroso secretos y provocando repercusiones en el mundo físico.
Las empresas especializadas
Empresas como Hacking Team y FinFisher se dedican a venden software de espionaje a gobiernos y fuerzas de seguridad sin ocultarse.
La más conocida es Hacking Team que ofrece un software que permite infectar ordenadores y móviles para controlarlos de forma remota, así como robar datos, capturar e-mails, memorizar las pulsaciones del teclado, hacer fotos y grabar conversaciones.
Este producto ha sido muy solicitado por países represivos que buscan espiar a sus propios ciudadanos y no a otros países, como es el caso de Marruecos, Rusia, Egipto o Arabia Saudí entre otros
Esto supone una violación del régimen de sanciones de las Naciones Unidas establecido por el Consejo de Seguridad y el incumplimiento de decisiones del Consejo respecto a algunos conflictos.
Aunque Hacking Team niega las acusaciones, lo cierto es que estamos ante una ciberguerra, en la que casi todo está permitido y estas prácticas son legales porque los gobiernos europeos han permitido la creación de este tipo de empresas. ¿Por qué? Puede ser que sea porque ellos son sus principales clientes.
Así quedó reflejado cuando un ataque de hackers, que pone de manifiesto que ni siquiera estas empresas están a salvo en la Guerra Cibernética, desveló los numerosos clientes de Hacking Team, entre los que, por ejemplo, figuraba el gobierno español.
Cabe mencionar, que durante el año pasado, España sufrió 70.000 ataques cibernéticos, siendo el tercer país que más ataques recibe, sólo por detrás de Estados Unidos y Reino Unido. La pregunta es: ¿estamos preparados para la Guerra Cibernética?
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