Peleas de perros; una de las más despreciables y horribles formas de maltrato a las que se enfrentan estos animales. Estos sangrientos espectáculos se hacen en beneficio de los propios dueños, y pese a que en la mayoría de países está prohibido por la ley, aún se practica. Conoce algunos datos sobre esta terrible industria.

¿Qué sabes de las peleas de perros? Descubre este horrible espectáculo

El origen de la peleas de perros se remonta al tiempo de la Antigua Roma. Los romanos forzaban a los perros a luchar entre sí, generalmente eran perros de raza y de gran tamaño. También los forzaban a luchar contra animales salvajes como leones, elefantes, osos y toros, ya puedes imaginar lo sangriento y cruel del espectáculo.

En los Estados Unidos, las peleas de perros declinaron sobre 1990, pero las organizaciones que luchan contra este problema advierten que en los años recientes se han disparado de nuevo, gracias a que a través de Internet es más fácil que los dueños de los perros organicen peleas y difundan la información rápidamente. Se estima que más de 100,000 personas en los Estados Unidos están involucradas en esta cruel industria.

Una pelea de perros puede durar pocos minutos o algunas horas. Los animales se lastiman terriblemente entre sí, mientras los espectadores apoyan a su favorito. Lo más desgarrador es que los animales no solo sufren durante la pelea, sino incluso desde mucho antes; durante su entrenamiento, donde los maltratan y los dejan sin comida durante días para que se desencadene su espíritu de supervivencia.

Durante el entrenamiento, los perros de peleas usan “cebos” para reforzar sus instintos de lucha, estos en general son mascotas robadas, cachorros, gatitos y conejos, los cuales son mordidos, torturados y generalmente asesinados en el proceso.

Los perros que no mueren durante la pelea,  tienen dos finales terribles: si no mueren horas o incluso días después por la pérdida de sangre, deshidratación, cansancio e infecciones, o son asesinados por sus propios dueños; a golpes, con un tiro o incluso después de ser torturados; el precio de no alcanzar la victoria es alto.

Tal vez uno de los datos más impactantes, es que las peleas de perros son muy frecuentadas por niños. Esos espectáculos promueven la insensibilidad hacia el sufrimiento animal, y anima a la violencia y a irrespetar las leyes.

A los perros de peleas, habitualmente se les inyectan drogas ilegales, incluyendo esteroides y drogas narcóticas para incrementar su nivel de agresividad y reacción, también para que durante la pelea no sientan tanto dolor y el espectáculo pueda ser más largo.

Algunos dueños ponen un poco de veneno en la comida de sus perros para que al luchar, el sabor de su carne sea molesto para los otros perros. También cortan las orejas y colas de los animales, así se limitan las áreas en las que el otro animal puede atacar.

Las peleas de perros son legales en Rusia, pero son un poco diferentes; siempre hay un veterinario y las peleas no llegan hasta la muerte de los animales, tampoco a heridas graves, aunque ello no quita que sean de una gran crudeza.

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