¿Alguna vez os habéis preguntado por qué los hombres suelen matar más que las mujeres? O poniéndolo de otra forma: ¿por qué hay más asesinos seriales que asesinas seriales? Los porcentajes son asombrosos: aproximadamente el 88.1% de los asesinos son hombres, quedándole a las mujeres un 11.9%, según el doctor Mike Aamodt, profesor emérito de la Universidad de Radford, Virginia, E.E.U.U.

En Supercurioso podréis acercaros a varias teorías que intentan explicar esta diferencia estadística.

Motivos biológicos

Sabemos que la biología nos define en parte. Es decir, las mujeres tienen la capacidad de gestar y los hombres no. Las féminas tienen prácticamente todos los meses cambios hormonales debidos a la menstruación, en cambio los hombres no. Los hombres tienen más testosterona y las mujeres menos.
Una posible causa de que haya más asesinos hombres que mujeres es ésta, precisamente, ya que la testosterona es la hormona que impulsa la agresividad. Evolutivamente la testosterona ayudó al género masculino a sobrevivir en entornos hostiles, protegiendo a la especie.
No obstante, esta misma hormona es también la causante de esa agresividad más achacada a lo masculino, de esa “fuerza” que acompaña a la figura del hombre a lo largo de la historia, aquello que lo hace más proclive a la violencia física. Además, la sociedad a lo largo de la historia ha favorecido y afianzado ese rasgo violento.

cuchillo

Otra teoría relacionada con lo biológico es que los hombres maduran más tarde que las mujeres. El lóbulo frontal, que es el responsable del control de los impulsos, de la reflexión y de la conciencia de las consecuencias se termina de desarrollar en los hombres al final de sus veinte años.

Otra posible razón: «la culpa»

Según la directora de la Escuela de Criminología y Justicia Criminal de la Universidad de Nebraska, Candice Batton, los hombres tienden más a exteriorizar la tensión, pudiendo traducirse en comportamientos hostiles, y además son más propensos a atribuir negativamente la culpa a razones externas a su naturaleza (“no es mi culpa, hay una fuerza externa a mí: mi madre, mi padre, la sociedad…”). Mientras que las mujeres tienden a desarrollar las atribuciones negativas de la culpa que son internas a su naturaleza (“no soy buena, he fallado, no hago lo suficiente”). Por lo que no sienten tanta agresividad hacia el otro y la dirigen más hacia sí mismas.

Diferencia de género en la forma de matar

Los asesinos en general, hombres y mujeres, son enfermos. Apartando a los asesinos a sueldo (que tampoco son muy sanos, puesto que matar a alguien por dinero y sin el más mínimo arrepentimiento es síntoma de que algo no va bien), se pueden dilucidar algunas razones que explican su comportamiento: trastornos de personalidad antisocial, humillacionesabusos durante la infancia y traumas diversos.
Lo que sí es distintivo del género es la manera en que matan hombres y mujeres. Si bien no siempre se puede generalizar, a grosso modo podemos indicar que los hombres son mucho más violentos: golpean, desuellan, violan, desmiembran… Mientras que las mujeres optan por métodos más íntimos: envenenan, sofocan, ahogan…

veneno

Viendo estos motivos podríamos decir que, según los estudios mencionados, existen tanto razones biológicas como psicológicas, muchas veces relacionadas con nuestra cultura y pasado, para que haya más asesinos que asesinas.

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