Las flores… esos regalos perfectos en los que la naturaleza condensa lo mejor de su hermosura. Formas, colores y aromas se conjugan para dar con uno de esos detalles que se ganan el corazón de quien los recibe. Los ramos de flores son uno de los presentes más clásicos, y aún así, se mantienen en total vigencia. El motivo es simple: evocan el romance, el amor, los sentimientos más puros y lo más tradicional del cortejo. Las flores son potentes agentes de comunicación, que le expresan a ese ser especial todo lo que nos inspira. Rosas, lirios, girasoles, claveles o gardenias, son perfectos para sorprender.

La costumbre de regalar flores es más antigua de lo que pensamos. Desde la exótica Afrodita, amante de las rosas rojas, hasta las cortes de la monarquía victoriana, las flores han sido sinónimo de belleza, sensualidad y agasajo. Y es justamente ese su principal valor en la era moderna. En un mundo repleto de tecnología, de medios digitales y dispositivos móviles, regalar una flor es un detalle que nos hace sentir la naturaleza viva y enciende las más lindas emociones. Incluso, cuando estamos lejos de nuestro ser amado, las flores son la mejor forma de enviarle una caricia a través de los kilómetros. Veamos los principales factores que hacen que regalar flores, siempre sea un acierto.

¿Por qué las flores son el mejor regalo?

Son clásicas y románticas

regalar flores

¿Quién no se ha emocionado ante la contemplación de un ramo repleto de rosas rojas? ¿O de un ramillete de alegres flores silvestres y multicolores? Las flores tienen toda la energía del romanticismo, y son uno de los regalos más clásicos para el amor.

Traspasan fronteras

Si estás en la actualidad físicamente lejos de tu ser amado, tendrás la necesidad de hacerte presente a través de las herramientas con las que cuenten. Pero no solo el mensaje de buenos días o la llamada antes de dormir son necesarios para mantener viva la llama del amor. Tener un detalle como enviar un ramo de flores inesperado, que le llegue a esa persona especial a su hogar o a su trabajo, será una de las más bellas formas de decirle cuánto la amas y extrañas. Si además complementas el detalle con un mensaje personalizado, habrás logrado tener uno de esos gestos inolvidables que son los que construyen el amor. Además, tienes la facilidad de programar tu pedido en dirección fecha, hora y detalles, con toda la antelación que desees.

Son un regalo vivo

Otro elemento que resulta particularmente encantador de regalar flores, es que estás dando un obsequio que implica vida. Las flores conectan a la persona que las da con la que las recibe, pues ésta debe involucrarse en su cuidado, regarlas y mantenerlas en esplendor el máximo tiempo posible. Además, su natural aroma impregna los ambientes de frescura.

Mejoran el estado de ánimo

No en vano las personas que acostumbran a mantener flores en su hogar, tienden a mantener un mejor ánimo. La ciencia comprueba que las sustancias que desprenden las flores actúan como estimulantes para el cerebro humano. Esto implica que recibir flores en tu hogar, y más si vienen como regalo de alguien especial, es una inyección de alegría y buenas energías.

Un regalo para todos

Si bien es en los romances en donde encontramos el terreno más fértil para regalar flores, la realidad es que es un obsequio perfecto para cualquier tipo de celebración. Un ramo de gardenias para el día de las madres, o uno de lirios para festejar una graduación. Quizás girasoles para un cumpleaños o aves del paraíso para sorprender sin mayor razón. Sin duda que, sea cual sea el vínculo que te une con esa persona querida, agasajarla con flores será una buena idea. Y otra ventaja: ¡Las flores no tienen sexo! Así que amigos, novios, esposos o papás también son destinatarios ideales de este regalo especial.

Son fácilmente combinables

ramos de flores

¿Te imaginas que en un ramillete de rosas se esconda un anillo de compromiso? ¿O que en un arreglo de girasoles venga escondido el peluche de tus sueños? Las flores son el regalo ideal para combinarlo con otras ideas. Peluches, joyas, cajas de bombones, tarjetas, botellas de vino, adornos… el único límite es el de tu creatividad.

Se adaptan a tu presupuesto

Y otra de las razones que hacen que regalar flores sea un total acierto, es que se adaptan a tu presupuesto. Puedes optar por un ramo grande y elaborado, repleto de rosas rojas o de colores variados. Pero también por un arreglo más sencillo con calas, girasoles, caléndulas, dalias, tulipanes o flores silvestres. Puedes regalar las flores solas o acompañarlas de tarjetas o bombones. En resumen, sea cual sea tu presupuesto, encontrarás una opción encantadora, que con la magia de la naturaleza le diga a esa persona especial, cuánto te importa.