Un reciente proyecto demostró que quejarse constantemente de los problemas que agobian nuestra vida no sirve de nada. Por el contrario, dejar de quejarse y vivir sin resentimientos se traduce en una vida mucho más plena y feliz. ¿Te gustaría conocer más sobre este interesante estudio?

¿Quejarse constantemente sirve de algo?

Todos tenemos problemas y dificultades en nuestro día a día. Quejarse es una de las formas de desahogo más comunes que puede existir, y de alguna u otra forma todos lo hacemos constantemente. Sin embargo, esta forma de afrontar los problemas no resulta en nada positivo para nuestra felicidad. De hecho, la palabra queja es sinónimo de sufrimiento, quiebre y denota dolor.

quejarse

Basados en la connotación negativa de la palabra queja, los amigos Thierry Blancpain y Pieter Pelgrims, de Suiza, organizaron un proyecto titulado Complaint Restraint. El mismo insta a las personas a dejar de quejarse durante un solo mes, por lo que febrero fue el escogido por el hecho de ser el más corto del año.

Como era de esperarse, las personas que participaron en el proyecto reportaron ser mucho más felices en dicho mes. El funcionamiento del proyecto era muy sencillo, las personas interesadas debían registrarse en un sistema y asumir el compromiso de no quejarse durante los siguientes 28 días. Así mismo, el sitio les enviaba a los participantes un recordatorio del compromiso que asumieron con frases amigables.

quejarse2

Los responsables del proyecto explicaron que la idea era que los participantes dejaran de quejarse por aquellos sucesos que simplemente no podían cambiar. Dejar de quejarse por un día lluvioso, por el llanto de un bebé o por el tráfico son algunos de los ejemplos más esclarecedores. Blancpain y Pelgrims parten de la teoría de que estos pequeños detalles absorben nuestra energía y con el pasar del tiempo podemos perder el control de nuestra mente.

Blancpain explica que no es muy inteligente quejarse de esos pequeños detalles que no podemos cambiar. Si tenemos un hogar y no nos falta la comida, somos mucho más afortunados de lo que imaginamos. Este novedoso proyecto lleva tres años de convocatoria, cabe resaltar que cada vez son más los participantes. Los beneficios son extraordinarios, las personas que se proponen esta meta y la logran son mucho más felices y además aprenden poco a poco a controlar las emociones y la mente.

Y tú, ¿asumes el reto y te dejarás de quejar por al menos un mes?

Si te gustó este artículo, te invitamos a continuar leyendo más sobre: ¿Es posible el control de la mente sobre la materia?