Untersberg, es, por así decirlo, el triángulo de las Bermudas en tierra firme. Un portal que, según nos cuenta la leyenda urbana y las antiguas leyendas de la zona, es capaz de transportar a las personas a otros lugares sin que apenas se den cuenta. ¿Estar en los Alpes y de pronto situarse en pleno Egipto?
Cuesta de creer, sin duda, pero las desapariciones en este macizo rocoso son frecuentes. Y es tal el misterio albergado en este especie de espolón desafiante de los Alpes, que incluso el propio Hitler llegó a obsesionarse con Untersberg.
¿Quieres acompañarnos en este breve recorrido por el misterio?
Untersberg, la montaña durmiente
Untersberg es un macizo de los Alpes de Berchtesgaden, una prominente formación natural que se extiende en la frontera entre Berchtesgaden , Alemania y Salzburgo. ¿Su altura? 1.973 metros. Es bella e imponente, e interesante es también la vieja leyenda que se esconde en estos verdes parajes. Se habla de un rey en la montaña, del mismísimo emperador Federico Barbarroja. Está profundamente dormido, y durante este letargo, su barba no deja de crecer y crecer alrededor de Untersberg.
De momento su barba da dos vueltas a la montaña, pero cuando de una vuelta más, el rey despertará y se sucederá el fin del mundo. Aterrador ¿verdad? Otras leyendas dicen que es el propio Carlomagno quien se esconde dentro de Untersberg, cuidado a su vez por pequeñas criaturas, diminutos enanos invisibles.
Sea como sea, esta montaña parece tener «algo», una singular estela que envuelve de inquietud y magnetismo a todo aquel que la visita. De hecho, en 1992, el Dalai Lama quiso visitarla. Y tras estar unas horas paseando por sus parajes, dijo de ella que era un dragón durmiente. Y más aún, que es el chakra del corazón. Es decir, un paraje cargado de gran energía.
Desapariciones en la montaña Untersberg
Las desapariciones siempre han sido frecuentes en Untersberg. Se sabe, que hay muchas personas que se han adentrado en ellas y han estado desaparecidas durante meses. Cuando han vuelto a ser encontradas no recordaban nada de lo ocurrido. ¿Viajes en el tiempo y en el espacio? ¿Portales a otros mundos?
Extraño, sin duda. Pero el hecho más inquietante y a la vez más conocido, es el acaecido en 1987. Como verás esta historia tiene mucho de fantástico y demasiado de leyenda urbana. Desconocemos qué fue realmente lo que llegó a suceder, pero a falta de datos objetivos, no podemos más que ofrecerte el relato original que se publicó en la prensa sensacionalista de aquellos días.
Eran tres personas. Tres amigos que se adentraron a explorar las cavernas existentes en Untersberg. Era un día cualquiera de agosto, hacía buen tiempo, y no se intuía riesgo alguno, sin embargo… sucedió. Desaparecieron sin dejar pistas. Solo un coche aparcado en las inmediaciones con sus pertenencias. Las búsquedas duraron varias semanas, hasta que se dieron oficialmente por desaparecidos.
¿Sabes lo que ocurrió 3 meses después? Que los tres amigos aparecieron en un barco en el Mar rojo rumbo a Alejandria, Egipto. Llamaron a sus familiares aterrados, incapaces de entender qué les había ocurrido. Fueron al consulado y ahí, se inició la historia más increíble de finales de los 80. ¿Realidad? ¿Leyenda urbana? Lo desconocemos.
Untersber, la entrada a la Tierra
«La entrada a la Tierra». Fue así como la llamó Adolf Hitler, quien, como ya podemos esperar, llegó a obsesionarse con ella. Conocía desde siempre toda la rumorología y leyenda albergada alrededor de esta montaña: desapariciones, personas que volvían al cabo de los años con la misma ropa y sin recordar nada de lo que les había ocurrido, cavernas profundas que no se conocía hasta donde llegaban…
Hitler pensaba que en su interior, se concentraban fuerzas ocultas que podían ayudarle a ganar la guerra. Tal era el interés que el führer sentía por Untersberg, que llegó a mandar que le construyeran una casa en la cima de la montaña de enfrente para poder observarla. Para poder pasar sus días de vacaciones enfrente de Untersberg e intentar desentrañar su misterio.
¿Lo logró? En absoluto. Nadie sabe qué esconde en su interior. De hecho, en el 2008 se organizó una expedición para explorar una de sus cavernas. Pero al cabo de los días hubo de abandonarse el proyecto. Descendieron 1.056 metros, pasando un pasadizo tan estrecho como asfixiante. Tras salir de él, descubrieron que ante ellos, se abrían nada más y nada menos que cerca de 800 nuevos pasadizos. Increíble.
Según llegaron a informar estos exploradores, bajo la montaña Untersberg se abre un lago de 930 metros de profundidad. Ellos mismos lo cruzaron gracias a un bote de plástico. Realmente impresionante e inquietante. Solo queda que los años, y que más personas intrépidas se adentren con ímpetu y objetividad para ofrecernos más datos sobre este lugar tan especial.
¿Lo harías tú? Danos tu opinión. Y recuerda, si te ha gustado este artículo, siempre puedes conocer otros lugares singulares, como el bosque de Hoia Baciu, en Transilvania.