Los antiguos griegos creaban mitos para explicar todo aquello que los rodeaba y para lo que no tenían explicación. En Supercurioso hemos visto como se asignó al eco una historia relacionada con una ninfa para explicar la reverberación del sonido o la de Iris, la mensajera, que dibuja un arco con sus alas cuando los dioses hacen las paces con los humanos tras las tormentas. En esta ocasión hemos querido acercarnos a un fenómeno que interesó especialmente a los griegos de la antigüedad: la aparición al caer la tarde de una estrella en el firmamento. Como solían hacer le asignaron un dios y un mito. Acompáñanos a conocer a Hésperos, el dios griego de «la estrella vespertina».

Los fenómenos y cuerpos celestes inspiraron muchos de los mitos sobre los dioses griegos. Además del arco iris ya mencionado, se asignaron dioses o figuras semi divinas a la aurora, los 5 planetas que se ven a simple vista y al Sol o la Luna, entre otros. La estrella de la tarde recibe el nombre de Hésperos, Héspero o Éspero indistintamente. El equivalente romano de Hésperos es Vésper.

Hésperos, el dios griego de «la estrella vespertina»

Para la mitología griega habían dos hermanos, hijos de Aurora, la diosa de la mañana y de Astreo, el dios del atardecer que se llamaban Fósforo y Hésperos. Fósforo, del que ya os hablamos en el post Fósforo, el dios que dio nombre a las cerillas, ¿conoces el mito? personifica la estrella matutina y su hermano, Hésperos, la estrella vespertina. Suelen representarse como dos jóvenes con una antorcha en la mano y que tienen dos cometidos cuando preceden a los carros de sus padres: anunciar la presencia de los dioses olímpicos y alternándose, anticipar la llegada del amanecer y el atardecer que traen sus progenitores. Hésperos y Fósforo tenían otros hermanos que eran los cuatro vientos: Boreos, Euros, Zephyros y Notos.

Hésperos, el dios griego de "la estrella vespertina" | Descubre su mito
“Fósforo y Héspero” de Evelyn de Morgan (1881)

 

Los habitantes de la antigua Grecia en un primer momento pensaron que Hésperos y Fósforo eran dos estrellas diferentes y por eso les dieron y asignaron dos nombres de dioses uno para cuando la veían por la mañana y otro para la de la tarde. Siglos después y posiblemente por influencia de la cultura mesopotámica, descubrieron que eran una sola y que correspondía a lo que ellos creían que era una estrella errante o planeta y al que hoy conocemos como Venus, sin embargo, los mitos siguieron vigentes.

 

Hésperos, el dios griego de "la estrella vespertina" | Descubre su mito
Detalle de «Héspero» de Anton Raphael Mengs, 1765

Existe un mito muy antiguo que habla de Hésperos y de por qué la estrella vespertina lleva ese nombre y que se aleja de los mitos clásicos. Cuenta que Hésperos era hijo o hermano de Atlas, un titán, y que era un buscador de estrellas. Un atardecer, se situó en las montañas del Atlas, en el norte de África, que llevaban el nombre de su padre o hermano, y empezó a observar como salían los astros en el firmamento buscando nuevas estrellas. En ese momento se desató una furiosa tormenta que lo hizo caer desde lo alto de las cumbres del Atlas y, misteriosamente, desapareció sin dejar rastro. Los hombres que lo acompañaban y que conocían su bondad, pensaron que no podía haber muerto y creyeron que se había convertido en una estrella, en concreto en la que trae el benefactor reposo de la noche. A esa estrella le dieron el nombre del joven: Hésperos.

Otro mito sobre Hèsperos lo relaciona con Himeneo, el dios protector de los casamientos del que os hablamos en el post: El mito de Himeneo | El dios del que proceden las palabras himno e himen. Hésperos, se enamoró del joven y bello Himeneo y cuando éste último estaba cantando en la boda de Dionisio y Ariana perdió la voz. Como tributo a su enamorado y en recuerdo de este hecho, en todas las ceremonias nupciales se entonaba un «Canto a Himeneo».

Hésperos, el dios griego de "la estrella vespertina" | Descubre su mito
«El jardín de las Hespérides», Frederic Leighton (1892).

El último de los mitos relacionados con Hésperos que queremos relataros es el que lo hace padre o abuelo de las Hespérides. Éstas eran ninfas de los árboles que vivían y cuidaban un maravilloso jardín lleno de árboles frutales que se situaba cerca de la cordillera del Atlas.  Eran tres hermanas y también se las conocía como las «ninfas del atardecer» ya que se consideraba que su jardín estaba situado en el oeste, donde el sol se pone. De este mítico jardín, Hércules robó las tres manzanas de oro engañando a Atlas, emparentado con las hespérides y con Hésperos, que era el que sostenía el mundo.

Es interesante conocer los principales mitos griegos ya que han llegado hasta nuestros días reflejados en numerosas obras de arte y han sido fuente de inspiración también para la literatura. ¿Conocías estos mitos sobre la estrella vespertina o Hésperos? ¿Conoces alguno más? ¡Compártelo con nosotros! Si quieres saber más sobre mitología griega, te invitamos a leer: