Leemos para descubrir nuevos mundos, para disfrutar, aprender, para abrir nuevas puertas de conocimiento, leemos para saber que no estamos solos y para que, en cada página, nuestra imaginación siga nutriéndose. Hay miles, millones de razones que nos llevan a elegir un libro y devorarlo de principio a fin con nuestros ojos y nuestra mente. De hecho, hasta podríamos decir que no tiene por qué haber razón alguna para hacerlo… respiramos y leemos, nos alimentamos y leemos, caminamos y simplemente, leemos… ¿Por qué no? Sin embargo, hay una serie de cosas que solo los amantes de los libros entendemos. Explícanos si te sientes identificado y, por supuesto, no dejes de decirnos qué más cosas te ocurren a ti. ¿Empezamos?
Conoce estas 15 cosas que solo los amantes de los libros entendemos… ¿Te pasan a ti?
Antes de comenzar, nos gustaría dejarte estas frases de libros. Son ideales para recordar ese amor que encontramos entre sus páginas. Sin más que decir, comencemos con este nuevo artículo de Supercurioso.
1. ¡Es que siempre estás leyendo!
«¿Bajas a tomar un café?», «Mmm… No, estoy por el último capítulo y no puedo dejarlo ahora». No hay mucha gente que pueda entender que, en ocasiones, las lecturas tengan más prioridad que nuestras relaciones sociales.
No por ello somos criaturas asociales o antipáticas, en absoluto. Simplemente, es que hay días en que necesitamos estar sumergidos en los libros. ¡Es que siempre estás leyendo! Nos dicen a menudo, como si estar sentados en nuestra cama con un libro fuera sinónimo de vagancia. No pueden entender que en ese mismo instante, nos hallamos en otros mundos, ahí donde el mundo exterior, de pronto, no deja de molestarnos con su incesable ruido.
2. La pila de libros sin leer
Otra de las cosas que solo los amantes de los libros entendemos, es la acumulación de títulos sin leer. Si eres un real amante de los libros, te será muy difícil entrar en una librería o en una feria de libros sin querer llevarte al menos un par. Pero tu voluntad de compra no va de la mano con tu velocidad de lectura, así que siempre tienes varios pendientes por leer.
3. No sales sin tu libro del momento
Una de nuestras cosas que solo los amantes de los libros entendemos, y a la que todos hemos sucumbido más de una vez: Vas al trabajo, a una cita médica o de camino a una clase de inglés. Pero en tu bolso jamás falta el libro que estés leyendo. Y es que no sabes si te hacen esperar o si tienes que pasar veinte minutos en tránsito en el autobús, y esos sean momentos ideales para un próximo capítulo.
4. ¡Se ha terminado el libro! ¿Qué voy a hacer ahora con mi vida?
Esta es otra de las cosas que solo los amantes de los libros entendemos. Puede sonar un poco exagerado, pero hay determinados libros que nos dejan completamente huérfanos.
Al terminar la última página del libro dejamos escapar un suspiro de amargura que nada puede aliviar…¿Qué vamos a hacer ahora? Si tienes la suerte de que esa novela sea parte de una saga, no podrás más que esperar a que el escritor se apresure en la próxima entrega. Y si es una novela sin continuación, no te quedará otra opción que ojearla de vez en cuando con la mirada y guardarla en el arcón de tu memoria, ahí donde dejas tus cosas más preciadas.
5. Ese encuentro con alguien que ha leído tu libro favorito
Los universos chocan. Tú te acabas de leer el libro más extraño y desconocido del mundo, ese con el que tanto disfrutaste y que, al parecer, nadie más conoce. ¿Tan raros son tus gustos? De pronto, en una cafetería o en el aula de tu universidad, escuchas a alguien que comenta un momento de ese libro que aún tienes en mente. Te abalanzas sobre él y ambos dedican tres horas seguidas a comentar cada instante, cada frase. Acabas de ganar un amigo para toda la vida.
6. La pasión por los libros usados
Otra de las más simbólicas entre las cosas que solo los amantes de los libros entendemos, es esa inexplicable y simbólica pasión por los libros usados. Hay algunos que los prefieren nuevos, pero la realidad es que el aroma de los libros viejos, la vida de sus páginas, los dedos y los ojos que las habrán recorrido… todo ello es un proceso cargado de magia.
7. ¡La alergia a prestar tus libros!
Este es uno de los mandamientos de los amantes de los libros más universales. Y es que quienes damos valor y cuidado a nuestra biblioteca, realmente detestamos tener que prestar un libro. ¿El motivo? Nadie los cuida y los aprecia como nosotros, y en el peor de los casos, aunque bastante común, ¡No los devuelven!
8. No tienes un libro favorito
Para quienes no leen mucho, es fácil determinar una o dos lecturas que hayan sido las más trascendentales. Pero para los lectores avezados, esto se convierte en una tarea titánica. Leer a Hemingway, a García Márquez, a Poe o a Cortázar, entre otros cientos de escritores geniales, y elegir una sola obra, es una tarea casi imposible.
9. ¡Amamos el papel!
Otra de las cosas que solo los amantes de los libros entendemos, es nuestro amor por el papel. Sí, los e-books están bien, y seguramente serán el futuro de la industria. Pero nada como tener el libro entre las manos, sentir sus páginas y marcarlas con nuestro marcalibros favorito.
10. La película nunca es como el libro
Seguro que te ha ocurrido alguna vez. Vas al cine para ver el estreno de esa película basada en uno de tus libros favoritos, ves a un montón de gente admirada, fascinada por los personajes, por los momentos que aparecen en la pantalla… Mientras, tú, te preguntas por qué se emocionan ¡Si lo que ves no tiene nada que ver con el libro! Luego, seguramente te critiquen porque eres demasiado exigente, demasiado intelectual quizá, incapaz de disfrutar de una buena película. Sin embargo, en tu interior sabes que no hay nada comparable a lo que se vive leyendo en un libro.
11. Enamorarse de un personaje literario
Esta es una de las cosas que solo los amantes de los libros entendemos, y que son tan reales… ¿Es posible enamorarse de un personaje que no existe, que no es real? Muchos dirán que desde luego, porque pocos personajes describen esos valores que tanto adoras, pocas personas son capaces de decir esas frases que tanto te conmueven. En ocasiones, son seres a medio camino entre la fantasía, lo imposible y lo sobrenatural, pero no por ello puedes evitar amarlos.
12. ¿Admites tu pasión?
Otra de las cosas a las que nos enfrentamos los amantes de los libros, es a la dificultad de admitir cuánto tiempo podemos ser capaces de invertir en la lectura. Una hora por día, cinco horas del sábado, seis del domingo… Para el común de las personas, te convertirás de inmediato en un raro ratón de biblioteca.
13. Tu amigo el librero
Otra de las cosas que solo los amantes de los libros entendemos es que siempre tenemos un amigo librero y una librería favorita. Esa a la que vamos a buscar novedades, ejemplares raros o esa historia que nos recomendaron en un taller, pero que es poco comercial.
14. Llorar o reír en público
Seguro te habrá pasado alguna vez, si vas, por ejemplo, leyendo en el transporte público, que una escena te conmueve hasta las lágrimas. O que quizás te genera una espontánea carcajada. Pues, los amantes de los libros no reprimimos estas emociones. ¡Al contrario! Las disfrutamos.
15. ¡Siempre queremos más!
Y cerramos nuestro recorrido de las cosas que solo los amantes de los libros entendemos, con la voracidad de más y más. Es simple: No nos conformamos. Podremos haber leído decenas de libros, pero nuestra pasión lectora siempre estará esperando el siguiente.
Y tú, ¿Te identificas con alguno de estos aspectos? Cuéntanos ahora qué es para ti leer, cuáles son esos escritores que nunca faltan en tu mesilla o en tu dispositivo electrónico. Háblanos de qué es para ti coger un libro y qué cosas te ocurren que nadie más entiende. Mientras, te invitamos a descubrir cuáles son los mejores libros de ciencia-ficción.