Al menos en Suecia se hicieron esa pregunta. Asesinos y asesinas suelen tener motivaciones y, mucho más importante, métodos distintos para cometer sus crímenes.

En un artículo anterior te hablamos de por qué suele haber más hombres que matan, y aquí nos explayamos algo más, a propósito de un estudio realizado en el país nórdico para desentrañar 1.570 homicidios cometidos en Suecia entre 1990 y 2010. Los resultados fueron muy interesantes.

Asesinos y asesinas: ¿sabes en qué se diferencian?

Una de las primeras conclusiones que saltaron a la vista fue que, a todas luces, eran más los hombres los que cometían asesinato que mujeres, un 90% de las veces; incluso, aunque el promedio de asesinatos bajó a lo largo de las dos décadas estudiadas, la proporción siguió siendo la misma: por cada 9 homicidios cometidos por hombres, uno era de una mujer.

Asesinos y asesinas: ¿sabes en qué se diferencian?

Por ello se tienen más datos acerca de los hábitos masculinos, e investigadores de la Academia Salhgrenska, del Instituto Karolinska, de la Universidad de Estocolmo, de la Junta Nacional de Medicina Forense y del Consejo Nacional para la Prevención del Delito unieron fuerzas para analizar los motivos, circunstancias, métodos y víctimas de delincuentes mujeres, y en qué se diferencian asesinos y asesinas.

Hay una marcada diferencia en la naturaleza de los crímenes homicidas hechos por hombres y mujeres contra adultos. Y esto fue más o menos lo que los investigadores sacaron en claro:

  • Los asesinos se caracterizan por ser más agresivos y antisociales, al contrario de las mujeres;
  • Los hombres suelen utilizar a menudo objetos contundentes o armas de fuego para matar a sus víctimas, mientras que las mujeres tienden a usar cuchillos (tal vez por la cercanía de la cocina…);
  • Las mujeres son más reactivas que los hombres en sus actos violentos. Por lo general, cuando no se trata de asesinas seriales, sus víctimas suelen ser personas que previamente abusaron de ellas. Es así que los asesinados son, casi siempre, hombres –parejas, familiares o conocidos–, y el lugar es su casa o la de su víctima;

Asesinos y asesinas: ¿sabes en qué se diferencian?

  • En muchos de estos casos, la víctima estuvo intoxicada, y la asesina bajo los efectos de drogas o alcohol;
  • Mientras que para la mujer los motivos parecen ser una cuestión trágica, de relaciones de pareja o familiares, para los hombres es más un asunto de uso de la violencia, forma parte de un estilo de vida y un medio para resolver problemas.

Asesinos y asesinas: ¿sabes en qué se diferencian?

Sin embargo, a pesar de estas diferencias, cuando asesinos y asesinas matan a niños, tienden a ser más “sobrios” (si tal palabra cabe) que cuando matan a adultos. Al respecto, Thomas Nilsson, investigador de la Academia Sahlgrenska de la Universidad de Gotemburgo, apunta:

“Cuando se asesina a un niño casi siempre es un miembro de la familia, y parece ser un acto de desesperación, y ésta es una reacción a una situación intolerable. Alrededor de un tercio de los casos de niños asesinados forman parte de homicidios-suicidios, tanto de madres como de padres”.

Es preciso insistir en el hecho de que NO hablamos de asesinos seriales, sino de asesinos y asesinas “normales”, hombres y mujeres que se han visto impelidos a cometer homicidios en circunstancias que no han sabido manejar.

Y si te parece alta la cifra de 1.570 asesinatos en 20 años, piensa que solamente en EE.UU. hubo 12.996 en el 2010; y aunque la población de este país es 33 veces mayor que la de Suecia, la tasa de homicidios en el país americano es significativa y proporcionalmente mucho mayor.

¿En tu país hay muchos asesinatos? ¿O, por el contrario, vives en uno de los felices, donde los delitos son pocos? Te recomendamos la lectura del síndrome que crea asesinos en serie.