Las maravillas del mundo son incontables, eso lo tenemos claro. Pero de vez en cuando, uno que otro siglo, vamos encontrando los lugares más extraordinarios del mundo; sitios que parecen irreales, como si existieran tan solo en libros de ciencia ficción. Aun así, existen. Tal es el caso de las majestuosas Cataratas de Sangre en la Antártida, que emanan desde el imponente glaciar Taylor en forma de chorros de sangre. Pero, ¿a qué se debe?, ¿es un fenómeno natural?, o ¿qué explicación puede tener? En Supercurioso te lo contamos, no te lo pierdas.
Las Cataratas de Sangre en la Antártida
Hay que decirlo, pocos espectáculos son más sobrecogedores que el de las Cataratas de Sangre en la Antártida. En medio de su blanca y prístina soledad, acontece un hecho tan extraño como impactante para todo aquel que se encuentre en esta latitud: chorros de sangre brotan de un glaciar. De hecho, fue hasta el año 1911, que se supo de su existencia, cuando el geólogo australiano Griffith Taylor exploró un territorio antes desconocido para cualquier ser humano. Pero, vamos paso a paso:
1. ¿Por qué se le llaman Cataratas de Sangre?
Por si no es obvio y las fotos no son lo suficientemente disientes, las Cataratas de Sangre en la Antártida son un fenómeno natural único en el mundo, donde el agua que fluye por entre el glaciar Taylor tiene extrañamente una tonalidad rojiza, simulando el color de la sangre.
Durante años se ha especulado mucho la causa de ese extraño color que le da el nombre a tan extraordinario paisaje, pero no fue sino hasta el 2017 que un grupo de investigadores de la Universidad de Alaska Fairbanks y del Colorado Collage consiguieron establecer una hipótesis mucho más fuerte que las anteriores…
2. ¿A qué se debe su color?
En el mundo existe naturaleza rosada, azul, amarilla y también roja. Lo curioso es que el agua muy rara vez tenga tonalidades diferentes a la de su perpetua claridad trasparente. Pero, como dicen por ahí, siempre hay una excepción a la regla. Las Cataratas de Sangre en la Antártida han causado tanto revuelo, que no han sido pocos los interesados en estudiar el fenómeno, y con ello, se han establecido múltiples teorías sobre su color.
Siempre se ha dicho que, esta llamativa tonalidad proviene básicamente de una acumulación de óxido de hierro de las sales del agua del glaciar Taylor. Pero ¿De dónde viene este hierro? Los científicos no lo saben, ya que no se conoce ningún otro escenario en nuestro planeta donde el agua salada produzca algo parecido.
Antes de continuar con la explicación, queremos contarte algunas de las teorías que han tenido los investigadores para definir el extraño fenómeno de las Cataratas de Sangre en la Antártida. Algunas mantienen que el glaciar Taylor estaba cubierto por el llamado Mar de Ross. Con el cambio climático que sucedió hace miles de años, este se secó, dejando en el lecho marino un gran lago de agua salada bajo él.
Después de la formación del glaciar Taylor, los depósitos de agua salada quedaron en el borde, acumulándose y creando una presión sobre esa masa de agua que hace que la sal salga, mezclándose con el hielo y creando las cataratas.
Pero una de las curiosidades de la Antártida seguía sin respuesta. Claro, ya conocemos el por qué se forman las cataratas, no obstante… ¿Qué sabemos de su color? Antes a la investigación del 2017, se creía que bajo el glaciar, había unas algas que producían el impactante color rojo de las Cataratas de Sangre en la Antártida. Sin embargo, mediante el uso de avanzados aparatos tecnológicos, pudieron confirmar que, a diferencia de lo que se creía, bajo el glaciar Taylor se encuentran capas y capas de agua salada.
¡La sal es la respuesta! Cuando el agua salada rica en hierro se filtra por las fisuras del glaciar y sale al exterior, entra en contacto con el aire, lo que permite que el hierro se oxide inmediatamente y, por tanto, adopte ese tono rojizo tan característico.
La presencia del hierro en el agua salada es la que permite que las Cataratas de Sangre en la Antártida sean tan únicas y muy, muy especiales. Otro dato curioso sobre esta maravilla es que la sal no permite que el agua se congele, a pesar de las bajas temperaturas que afloran en este territorio.
3. Un ecosistema singular
Tras conocer el fenómeno que ocurre en las Cataratas de Sangre en la Antártida, es preciso mencionar que, con todo el trabajo científico que se ha realizado en este lugar, se encontraron múltiples animales que viven en condiciones extremas. Así como lees, en ese líquido rojo existen microorganismos tan singulares que trastocan la idea que tenemos de las condiciones necesarias para la vida.
En el glaciar Taylor existen al menos 17 tipos de microbios capaces de sobrevivir millones de años sin oxígeno y sin la luz del sol. ¡Organismos extremófilos en todo el sentido de la palabra! Pero, ahora te preguntarás: ¿De dónde vienen esos microorganismos? La verdad es que la respuesta no está clara, pero como sucede con las mismas Cataratas de Sangre, existen algunas teorías…
La más fuerte especula que fueron organismos que proceden de un meteorito, concretamente del ALH84001. No olvidemos que una de las curiosidades del mundo es que este, ha recibido numerosos seres vivos a través de cuerpos espaciales. Asimismo, te sorprenderá saber, y como conclusión, que, el fenómeno de las Cataratas de Sangre en la Antártida no solo ocurre allí. También sucede en Marte y en una de las lunas de Júpiter; Europa. ¿Curioso, verdad?
4. Un lugar de difícil acceso
Lo sabemos, quieres verlas en vivo y en directo, son una rareza maravillosa que valdría la pena comprar un billete de avión tan solo para ver tal espectáculo. Sin embargo, lamentamos decirte que las Cataratas de Sangre en la Antártida son de muy difícil acceso; solamente unos pocos han tenido la fortuna de verlas, tocarlas y fotografiarlas.
Digamos que es uno de los pocos lugares que ha quedado libre de cualquier impacto humano. Por lo tanto, fuera de los pocos científicos que tienen permiso para acceder, las cataratas pueden ser observadas desde un helicóptero, o abordo de un buque. Ambas opciones las ofrecen exclusivas agencias para el turismo de lujo.
Sea como sea, las Cataratas de Sangre en la Antártida, junto con el glaciar Taylor, dan la oportunidad a los científicos de investigar comportamientos marinos y microorganismos en condiciones muy peculiares, sin tener que perforar las profundidades de la Antártida. Algo sin duda tan espectacular cómo único.
Si te ha gustado este artículo, te invitamos a que descubras algunas de las más asombrosas curiosidades del océano que seguramente no conocías, algunas de ellas te dejarán con la boca abierta. 😉