La música ha sido una de las más antiguas artes en la historia de la humanidad, nos ha acompañado a lo largo de los siglos forjando las culturas que han definido al mundo. No es gratuito de hecho, que el primer instrumento musical de la historia haya sido nuestro cuerpo. Desde que nacemos aprendemos a bailar, reír, cantar e incluso pensar a través de la música, pero… ¿Te has preguntado cuáles son los efectos de la música en el cuerpo? Bueno, en Supercurioso sí lo hemos hecho, y hoy te contaremos algunos de los beneficios de la música que más nos han atrapado. ¡Acompáñanos! 🙂
Efectos de la música en el cuerpo
La música ha estado y está presente en todas las manifestaciones humanas, que la música amansa las fieras es un dicho popular que tiene un gran fondo de verdad. Cuando escuchamos música, especialmente si es clásica o melódica, en general se producen en nuestro organismo pequeñas alteraciones tanto cerebrales como emocionales. ¡Conozcamos algunas de ellas!
1. Efectos de la música en el cerebro
¿Por qué nos gusta la música? En la actualidad parece tan natural que no nos damos cuenta de que esta es el resultado de complejos procesos neuronales que terminan por comprometer a casi todo el cerebro para producirla, escucharla, sentirla e interpretarla.
De acuerdo con investigaciones científicas, se ha determinado que existen áreas cerebrales que controlan y ejecutan la forma en cómo nosotros escuchamos y sentimos la música. Básicamente los efectos de la música en el cuerpo nacen de las áreas de nuestro cerebro que las comprenden. A continuación, te contamos algunos efectos físicos que la música genera en el cuerpo a través del cerebro:
La música clásica baja la presión arterial
Según un estudio neuronal del que se hizo eco la publicación Journal of Health Psychology, hay diferentes formas de reducir el estrés con música. Un grupo de voluntarios participó en una investigación para comprobar si el escuchar música podía utilizarse como terapia alternativa en casos de estrés cardio-vascular. Se les sometió a una prueba matemática contrarreloj dificultosa y con muy poco tiempo para resolverla.
Se les tomó la presión al acabar la prueba y después el grupo de voluntarios se subdividió en tres, al primero se le puso música clásica, a otro jazz o pop y al último lo dejaron en silencio. El segundo y tercer grupo mantuvieron la presión igual. Sin embargo, en el primero, el que escuchaba música clásica, la presión disminuyó significativamente. ¡Este es uno de los efectos de la música en el cuerpo que beneficia tu salud!
Afecta la química del cerebro
Un análisis de la Universidad de Florida determinó que a nivel cerebral, los efectos de la música en el cuerpo pueden llegar a ser múltiples, en especial con las respuestas fisiológicas. La música es una de las formas por la que los seres humanos puede producir placer, condicionado por un circuito cerebral que gestiona estímulos emocionales a partir de la liberación de dopamina. Además de este efecto, la dopamina está implicada en los procesos de aprendizaje, tal ve por ello se habla tanto del efecto Mozart.
Mejora funciones deterioradas
Los efectos de la música en el cuerpo llegan a tal punto, que incluso, ayuda a estimular zonas cerebrales deterioradas. ¿Cómo funciona esto? La música, como te comentamos, actúa en diferentes áreas del cerebro de manera simultánea, por lo que el campo neuronal se ve comprometido en procesos fisiológicos y emocionales. De acuerdo con la psicóloga clínica Sandra Herrera; «Se han observado mejoras en personas con problemas de movimiento, dificultades para hablar, demencias y secuelas de enfermedades cardiovasculares, con el uso adecuado de música de manera terapéutica».
La música alivia el dolor
Ya conocemos todos los beneficios de bailar, pero ¿qué pasa con los beneficios de escuchar? Bueno, uno de los efectos de la música en el cuerpo es sin duda, el alivio de dolor. Sí, así como lo lees, el hecho de escuchar nuestra música favorita puede ayudarnos a aliviar el dolor. En una investigación se constató que en los pacientes a los que se les hacía oír una música que les resultara agradable, el nivel de dolor disminuía. En este estudio se aconsejó a las enfermeras enseñar a los pacientes a utilizar la música para aumentar el poder de los analgésicos.
El escuchar música mientras hacemos ejercicio también ayuda a que tardemos más en detener nuestra actividad, ya que, de alguna manera, consigue que las señales de cansancio que emite el cerebro sean confusas, en otras palabras, nos distrae de la fatiga. Esto ocurre especialmente en las actividades que requieren cierto ritmo como correr o remar.
Mejora la comunicación
Otro de los efectos de la música en el cuerpo es la capacidad de socialización, ya que en ambientes acogedores, la música es capaz de producir reacciones emocionales para que las personas creen relaciones entre ellas de una forma mucho más sencilla. Esta es la principal razón por la que la gente baila, va a conciertos y realiza ejercicios sincronizados. ¡Con la música hacer amigos es más fácil!
2. Efectos emocionales
Como ya te comentamos, los efectos de la música en el cuerpo pueden ser variados, generalmente los asociamos a efectos físicos, pero lo cierto es que también pueden verse en nuestras emociones.
Sincroniza los corazones
Si has cantado en grupo, ya sea con tus amigos o en un coro, seguramente habrás notado que se despierta una emoción conjunta, esa es la manera en cómo descubrimos la música. Literalmente es así. Se ha comprobado que los corazones de las personas que cantan o hacen música juntas se sincronizan. Se aceleran y desaceleran al unísono, lo que implica una conexión emocional entre las personas.
Es tranquilizante
Se ha demostrado que uno de los efectos de la música en el cuerpo es que esta actúa sobre el hipotálamo y otros centros responsables de estimular las áreas de recompensa y placer en el cerebro. Escuchar música eleva los niveles de óxido nítrico, encargado de abrir los vasos sanguíneos, esto permite reducir los niveles de cortisol, por lo que tendrás como resultado una disminución en los niveles de ansiedad, que emocionalmente nos permitirá relajarnos casi de inmediato.
Produce un sentimiento de alivio y desahogo
Otro estudio publicado también en Journal of Health Psychology, dio como resultado que la música triste produce una sensación agradable en el cuerpo. La investigación sostiene que, al escucharla, el cerebro libera prolactina, una hormona que se encarga de producir sentimientos de alivio. A su vez, el estudio aseguró que uno de los efectos de la música en el cuerpo, recae en la mejora de la calidad del sueño en estudiantes que sufrían trastornos. Increíble, ¿no te parece?
Además de estos efectos de la música en el cuerpo, existen muchísimos más que seguro has notado. Dicen que la música hace sonreír a personas que no lo hacen habitualmente ¿crees que es cierto? Si te ha interesado este artículo, quizá quieras conocer qué es el theremin, un instrumento de música intocable.