Ella Grisby se hizo famosa en el siglo XIX bajo su nombre artístico Madame Abomah, por ser la mujer más alta del mundo y viajó por todas partes presentándose como «la mujer africana gigante», la «giganta africana» o la «giganta amazona». Se decía que medía 2,31 metros, aunque realmente alcanzaba unos 2,09 metros. Conoce a este fascinante personaje.
La mujer africana gigante que viajó por el mundo
Nacida en octubre de 1865 en Lawrence County, Carolina del Sur (Estados unidos), Ella Grisby -más tarde Williams- nació como una mujer libre al escapar la esclavitud impuesta en esa época por tan solo unos meses.
A pesar de tener unos padres de estatura dentro de la media, creció de forma normal hasta los 14 años. Alcanzada esa edad, contrajo malaria y se decía que fue entonces, durante las 6 semanas que duraron las fiebres, que creció día a día hasta llegar a esa altura. Imagina la sorpresa de su familia cuando se levantó de la cama y reveló hasta qué punto había aumentado su tamaño.
Los años pasaron y mientras trabajaba como cocinera en su natal Carolina del Sur, fue descubierta por Frank C. Bostock, un promotor que la contrató para un recorrido por las islas británicas, en 1896. Cabe destacar que su impresionante altura iba acompañada, como verás, de unas proporciones casi perfectas, que la convertían en un ser humano estéticamente asombroso.
Bostock era conocido como «El rey de los animales». Se especializaba en la presentación de zoológicos de la fauna africana y, aunque Ella decidió viajar con él, no fue el único que le ofreció empleo. Muchos mánagers de circo y hombres de espectáculo le propusieron que trabajara con ellos. Sin embargo, Ella se conformaba con trabajar como cocinera y niñera para una prominente y rica familia.
Bostock decidió llevarla en un tour fuera de Estados Unidos, ya que el racismo no era tan exacerbado como en ese país.
Así fue como Ella partió de su natal Carolina del Sur hacia Nueva York, donde se embarcó hacia Inglaterra para presentarse en los teatros del Reino Unido. Bostock decidió cambiarle el nombre a la naciente estrella, convirtiéndola en Madame Abomah (Abomey es la entonces capital de Dahomey, ahora conocida como Benin) y creándole un alter ego como una princesa guerrera de África (conoce algunas curiosidades de este continente).
Ella fue catalogada como una amazona Dahomey, una casta que existe realmente y que servían como las guardaespaldas femeninas a cargo de la protección del jefe tribal.
A lo largo de sus 30 años de carrera, viajó no sólo por Gran Bretaña, sino también la mayor parte de Europa continental, Australia y Nueva Zelanda, América del Sur, Cuba y por supuesto los Estados Unidos, donde trabajó en Coney Island y con Ringling Brothers Barnum y el Bailey Circus.
Se dijo mucho sobre ella, pero no todo puede ser tomado como un hecho, ya que muchos de los rumores se difundieron para crear mayor interés hacia su persona y aunque su carrera artística continuó hasta los años 1920, desapareció de los récords históricos.
Actualmente, existe en la famosa Coney Island un mural creado por la artista Marie Roberts, donde aparece Madame Abomah junto a otros famosos personajes de circo.
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Te aseguramos que te impresionarán. Muchos de ellos, además, lograron a pesar de cómo les señaló la sociedad, vivir plenamente y felices.