¿Por qué un nombre tan particular para una joya? ¿Por qué es tan importante? ¿Conocías esta obra? Pues, aunque hay muchos que no la conocen, es una pieza cumbre de la orfebrería hispanoamericana del barroco. ¡Descubre una auténtica joya de Colombia!

La accidentada historia de la «lechuga»

La lechuga es una custodia. Las custodias, también llamadas ostensorios, son piezas donde se coloca la Hostia después de consagrarla para que la adoren los fieles. Está, en concreto, es simplemente espectacular por la maravillosa talla y por la auténtica riqueza de joyas que la forman.

Representa un sol decorado con 22 rayos que terminan en pequeños soles adornados con esmeraldas y 20 rayos menores que terminan en perlas. En la parte superior tiene una cruz y el sol está rodado por una vid y racimos de uvas, símbolos de la Eucaristía. El Sol es sostenido por un ángel con las alas desplegadas.

Es realmente curioso que la custodia esté intacta después de 3 siglos de convulsiones políticas, en las que muchas veces las piezas religiosas se decomisaban y se fundían para conseguir dinero para la lucha.

Colombia sufrió 3 expulsiones de jesuitas: en 1767 con Carlos III, en 1858 y en 1861. Durante este tiempo cuenta la leyenda que, a pesar de ello, la pieza no salió del país. No se sabe ni cómo fue custodiada ni cómo apareció de nuevo a finales del S. XIX. Eso sí, cuando los bienes fueron devueltos a los jesuitas, apareció de nuevo en la Iglesia de San Ignacio de Santa Fé de Bogotá. A partir  de 1985 pasó al Museo de Arte del Banco de la República.

¡La lechuga! Una importantísima joya hispanoamericana

1. Su nombre se debe al color verde predominante de la pieza. Color de las esmeraldas.

2. Está considerada una de las piezas más ricas de la cultura hispanoamericana.

3. Es una de las piezas más valiosas de la colección de Arte de Banco de la República de Colombia.

4. Fue realizada entre 1700 y 1707 por el orfebre de origen español José Galaz.

5. Contiene 1485 esmeraldas, 62 perlas barrocas de Taboga (Panamá), 28 diamantes de Sudáfrica, 168 amatistas sin tallar de la India y 4 talladas, 13 rubíes del antiguo Ceilán, 1 zafiro de Brasil. la pieza está realizada en oro de 18 kilates.

6. La talla está tasada en la actualidad entre 3 y 4 millones de dólares.

7. Representa el sol, la vid y los ángeles.

8. La primera vez que la obra salió de Colombia fue en el 2015. Estuvo expuesta durante 3 meses en el Museo del Prado con motivo de la presencia de Colombia en la Exposición Arco.

Era la primera vez que el Prado incluía una pieza de orfebrería en su programa de exposiciones, lo que resultó todo un gran acontecimiento.

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