Si alguna vez has visto algún reportaje sobre animales curiosos que habitan en las profundidades de los océanos, quizá te hayas dado cuenta de que, casi en su totalidad, son animales aterradores. Son extrañas criaturas que parecen sacadas de una película de terror y que habitan en el lecho marino, donde la luz nunca llega. Entre esta dantesca fauna, podemos encontrar al pez caracol de las Marianas, cuyo aspecto seguro que no te deja indiferente…
La primera impresión, al menos al pronunciar su nombre, es que estamos frente a un animal adorable. Sin embargo, esta criatura oceánica no tiene un aspecto precisamente adorable. En Supercurioso queremos contarte más acerca de este animal realmente particular. El pez caracol de las Marianas o Pseudoliparis swirei se parece más bien a una pechuga de pollo cruda. ¿Quieres conocer más sobre él? ¡Acompáñanos!
Pez caracol de las Marianas
Así como lo lees, este pez pequeño y traslúcido, supera los 8.000 metros de profundidad en el océano. Para que te hagas una idea, la presión que el pez caracol de las Marianas soporta es similar al peso de un elefante apoyado en tu pulgar. Es considerado uno de los animales que viven en condiciones extremas. Como dato bastante excepcional, sus huevos son inusualmente grandes, miden casi 1 centímetro de ancho y son de color negro.
No hace mucho que conocemos la existencia del pez caracol de las Marianas, de hecho, la primera vez que se capturó un ejemplar fue en 2014 y de nuevo en 2017. El lugar en el que pudo capturarse el pez caracol de las Marianas fue a casi 8 kilómetros de profundidad en el océano Pacífico occidental. Es una de las criaturas de la Fosa de las Marianas más increíble jamás vistas, cerca de Guam. Para poder hacernos una idea de la profundidad, su localización es tan profunda como el Monte Everest de alto.
Como te comentábamos anteriormente, es una especie recientemente descubierta, de hecho, no fue sino hasta 2017 cuando los investigadores finalmente hicieron una exhaustiva descripción del animal en una revista científica. Tampoco hay que pensar que este pez caracol de las Marianas es el pez más feo del lugar.
En realidad, «Cuando uno llega a estas profundidades, los peces toman una forma realmente diferente a otras especies más cercanas a la superficie. No poseen escamas, ni dientes grandes y no son bioluminiscentes, que nosotros sepamos» comentó Mackenzie Gerringer, investigadora de la Universidad de Washington.
1. Descubrimiento del pez que vive a mayor profundidad en el océano
«Este es el pez que vive a mayor profundidad en el océano, y estamos muy contentos de encontrarlo. No parece muy fuerte para vivir en un entorno tan extremo, pero tiene un gran éxito» Explicó la autora principal de la investigación. Existe una gran extensión de territorio inexplorable en las profundidades de los océanos. Realmente se cree que es la zona más desconocida de nuestro planeta y que seguramente aún tenemos muchas especies por descubrir, tanto de fauna como de flora.
El pez caracol de las Marianas es uno de los animales marinos raros y particulares de nuestro planeta; aún no se ubica sobre lo que llamamos lecho marino, de hecho, el océano aún se extiende otros 3 kilómetros más abajo de donde se encuentra este animal. No obstante, los científicos creen que es muy poco probable que podamos encontrar algún otro pez habitando en aguas más profundas. El motivo es que la presión va aumentando a medida que se va descendiendo y ningún pez podría soportarla.
Como lo explica Mackenzie Gerringer, el pez caracol de las Marianas se encuentra en diversas partes del mundo y a diferentes profundidades marinas. En aguas marinas, se agrupan y alimentan de diminutos crustáceos y camarones utilizando la succión de su boca para atraparlos.
Tal y como explica NatGeo, «los peces pueden ser químicamente incapaces de resistir los efectos desestabilizadores de la presión sobre las proteínas por debajo de los 8.200 metros». Así que este pez caracol de las Marianas puede ser un animal algo especial al fin y al cabo.
2. Los estudios del pez caracol de las Marianas
Asimismo, Thomas Linley de la Universidad de Newcastle, coautor de la investigación, expresó en un comunicado: «Los peces caracol de las Marianas se han adaptado para llegar a más profundidad que otros peces y poder sobrevivir en las profundidades. En esa zona están más a salvo de depredadores y, por lo tanto, también tienen mucha más comida a su alcance. Hay gran cantidad de presas invertebradas y estos peces caracol son los principales depredadores. Son muy activos y parecen estar muy bien alimentados».
El estudio sostiene que este pequeño pez caracol es capaz de soportar presiones equivalentes al peso de 1600 elefantes. A su vez, el análisis de ADN y el escaneo tridimensional ayudó a analizar cómo sus esqueletos podían ser tan resistentes. Desde entonces, se han unido diversos grupos de investigación para analizar el pez caracol de las Marianas. Estos peces han sido captados hasta una profundidad máxima de 8.134 metros. Para conocer la forma del pez caracol de las Marianas, ha sido necesario el uso de trampas con cámaras, estas trampas hacen un recorrido de 4 horas en bajada para llegar a tal profundidad.
Tal como reza una de las frases sobre el mar: «las criaturas que habitan el océano son incontables y conforman las mayores y más notables comunidades biológicas de todo el planeta», sus millones de quilómetros y sus profundidades hacen que sea -por el momento- completamente imposible acabar de descubrir todos los misterios del océano ocultos bajo el agua. No en vano, se cree que únicamente se ha llegado a explorar el 5% de todos los océanos y que, por lo tanto, el 95% del fondo marino es un territorio aun sin explorar. Si nos damos cuenta de que el 71% de la superficie de la Tierra está cubierta por océanos, ¡Qué poca información tenemos de nuestro propio planeta!
No te vayas sin dejarnos tu opinión, cuéntanos, ¿tú qué opinas del pez caracol de las Marianas? Es increíble ¿verdad? ¡Te leemos! Y por si quieres seguir leyendo sobre los misterios del océano y los animales, no dudes en visitar nuestro artículo sobre el Serranus Tortugarum, el pez que cambia de género cada día.