Si de algo estamos seguros hoy sobre qué es normalidad y qué no en la sexualidad es que no podemos estar seguros de nada. En los últimos 50 años del milenio pasado hubo una verdadera revolución sexual, que modificó profundamente nuestra percepción de este espacio de intimidad en el que nos relacionamos estrechamente con el prójimo.
Desde entonces abundan las encuestas y estadísticas en torno al sexo y a lo que se considera una actividad sexual normal, como las que a continuación te comentamos.
¿Qué se considera una actividad sexual normal?
¿Hay una actividad sexual normal? Seguramente no, la misma está influenciada por las distintas culturas que conforman la humanidad, varía de acuerdo con la edad y con las preferencias sexuales. Sin embargo, hay algunas constantes, como la de no considerar el impulso sexual tan absolutamente dominante y presente en la vida de todas las personas. Hoy en día se calcula que en todas las sociedades hay un pequeño porcentaje, entre un 0,4% y un 1% en el que el deseo sexual no existe. En años recientes esta porción de la población ha decidido organizarse y hacerse notar en las redes sociales.
Hablemos ahora del 99,6% restante y de con quién lo hacen. Un estudio realizado en Estados Unidos en 2009 dio como resultado que un 53% de la población desarrolla su sexualidad con una pareja estable, y un 24% opta por el sexo casual. Un 12% practica aquello de los amigos con beneficios y sólo un 2% reconoció hacerlo con prostitutas. Alguien está mintiendo, porque la prostitución sigue siendo un negocio próspero. Y un 9% indicó que buscaba deliberadamente el sexo con desconocidos, un número bastante alto en la era del VIH.
Otra encuesta realizada en los Estados Unidos, en la que participaron 50.000 personas y en la que se tocó el tema de la regularidad en la práctica sexual, dio un promedio de 3 a 4 veces por semana en un 40% de los entrevistados. Sin embargo, las cifras varían con la edad: entre los mayores de 70 años el promedio fue de una o dos veces al mes, aunque un 11% de ellos afirmó hacerlo al menos una vez por semana…
¿Y existe un modo preferido de hacerlo? No realmente, aunque un estudio –adivina dónde– realizado entre unas 2.000 personas, dio a la relación vaginal una preferencia superior al 80%, al sexo oral 67% entre las mujeres y 80% en hombres, y en el sexo anal fue donde se mostraron las mayores diferencias: apenas un 3,5% entre las mujeres y un 9% de los hombres…
Otra encuesta, esta vez de Canadá, versó sobre la duración promedio del acto sexual, dando como ganadoras a las lesbianas, cuyas relaciones duran unos 45 minutos, mientras el promedio entre homosexuales masculinos y parejas heterosexuales es de 30 minutos. Sin embargo esta encuesta, publicada en el Canadian Journal of Human Sexuality, también reveló que las lesbianas tienen sexo con menor frecuencia que los hombres gays.
Y podríamos concluir este sondeo de la actividad sexual hablando de su simulación: aunque un 50% de las mujeres reconocieron haber simulado orgasmos al menos una vez, sólo un 20% de los hombres creen que su pareja lo ha hecho (hay un 30% que sigue engañado). Un dato sorprendente en este estudio fue que uno de cada cuatro hombres reconoció haber simulado un orgasmo en alguna ocasión.
¿Coinciden estos datos con tu actividad sexual normal? Seguramente hay mucho por explorar en torno a la actividad sexual en la cultura hispanoamericana, por ejemplo, que en apariencia es más apasionada e intensa, ¿cierto…? Con seguridad nos sorprenderíamos.
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