En la historia de la humanidad existen numerosos ejemplos de engaños y falsedades. Algunos, como el de los Plomos del Sacromonte, solo pretendían salvar a un colectivo vulnerable, en este caso de la Inquisición y de la corona castellana. Otros, como el de estas 3 estafas médicas que se pagaron muy bien, buscaban el lucro y se aprovecharon del dolor humano. En esta ocasión, en Supercurioso, te presentamos otro polémico caso: el de las Figuras de Acámbaro.
Para ello, nos trasladamos al México de la década de los 40 del siglo XX. Aunque se demostró que era un engaño, los creacionistas siguen defendiéndolas para apoyar sus tesis. Acompáñanos a descubrir la historia que se esconde tras las Figuras de Acámbaro, sin duda, una de las curiosidades de México que merece la pena conocer.
Las figuras de Acámbaro, defendidas por los creacionistas
Para conocer la historia de las figuras de Acámbaro debemos remontarnos a 1945 y situarnos en los alrededores de la mexicana ciudad de Acámbaro, en Guanajuato. Un comerciante y arqueólogo alemán llamado Waldemar Julsrud encontró al pie de un cerro llamado «El Toro» una gran cantidad de figuritas de cerámica, muy similares a las de la cultura chupícuaro que se desarrolló entre el 800 a.C. y el 200 d.C. Waldemar contrató a algunos campesinos para que desenterrasen todas las figuras que pudieran y en poco más de 5 años, reunió una colección que superaba las 32.000 piezas.
La curiosidad de las figuras de Acámbaro es que incluyen representaciones de animales muy similares a dinosaurios que se extinguieron hace 65 millones de años. Basándose en ese hallazgo, parecería que los humanos que esculpieron las estatuillas convivieron con esos animales. Entre la figuras de Acámbaro habían no solo supuestos dinosaurios, sino también representaciones de hombres y mujeres de diferentes culturas como sumerios y egipcios, vasos de alfarería tarasca, máscaras, pipas e incluso diferentes figuras que en conjunto representan una escena de una leyenda o historia.
1. El Fraude de las Figuras de Acámbaro
Además de la imposibilidad de que convivieran grandes saurios y humanos y las evicencias científicas, se cree que las falsificaciones pudieron se alentadas por el propio Waldemar Julsrud sin proponérselo. El arqueólogo aficionado alemán pagaba un peso por cada figura que le traían los campesinos del lugar. En poco tiempo tuvo casi 33.000 piezas. Apoyando la tesis de la falsificación, el arqueólogo Charles DiPeso dijo que:
1. La superficie de las figuras no tenía trazos de estas hubieran permanecido enterradas durante miles de años.
2. No estaban rotas como la mayoría de restos arqueológicos, sino sorprendentemente intactas.
3. El análisis estratigráfico indicaba que la tierra que las cubría pertenecía a diversas etapas arqueológicas, lo que denotaba que se habían cavado hoyos y enterrado las figuras posteriormente.
4. Una familia local, confesó haber fabricado figurillas durante años en los largos períodos invernales en que no tenían que cultivar sus terrenos. Se habían inspirado en cómics y películas de cine.
2. Los creacionistas de la Tierra Joven y las figuras de Acámbaro
Los creacionistas de la Tierra Joven son un grupo de creacionistas cuya tesis principal sostiene, en contra por ejemplo de la Teoría de la Evolución de Darwin, que la Tierra y todas las formas de vida que hay en ella fueron creadas en su forma actual por un acto divino. Para ellos, esta supuesta creación, ocurrió hace entre 6.000 y 10.000 años.
Este grupo creacionista encontró en las Figuras de Acámbaro una base en la que sustentar sus tesis más allá de algunos pasajes del Génesis que parecen apoyar esta idea. Creen que las últimas dataciones que se hicieron de las figuras son erróneas y que si no hay ninguna rota o maltrecha es debido a que Waldemar Julsrud únicamente pagaba por las que estaban enteras.
3. Por qué se creyeron auténticas las figuras de Acámbaro
La confusión sobre la posible autenticidad de las figuras de Acámbaro se produjo cuando en 1969 el Museum’s Applied Science Center for Arqueology de la Universidad de Pennsylvania utilizó la incipiente tecnología de la termoluminiscencia y esta arrojó un resultado aproximado de una antigüedad de 2.500 años. En las pruebas se cometió un error relacionado con la quimioluminiscencia y, cuando en 1972, con esta técnica más avanzada, se repitieron las pruebas, los resultados fueron totalmente diferentes. Las figuras no tenían más de 30 años de antigüedad.
Si te ha interesado conocer las Figuras de Acámbaro, no te pierdas…
Como habréis visto, todo parece indicar que las figuras de Acámbaro son un fraude del que nadie se benefició realmente. No son los únicos objetos anacrónicos que se han hallado y que se conoce como Ooparts. Si quieres conocer algunos más, te proponemos que conozcas estos 3 Alucinantes Ooparts que eran falsificaciones o Los 5 objetos arqueológicos más extraños del mundo. Pero si lo que te interesa es visitar México, sus importantes restos arqueológicos y sus magníficos paisajes, no dejes de leer: 10 Lugares de México que no debes perderte.
Una de las razones que esgrimen los creacionistas es que nadie ganó nada con las Figuras de Acámbaro. El precio que Waldemar pagó por cada una de ellas era ridículo y no compensaba el trabajo de hacerlas y él no ganó nada con su colección. El Gobierno Mexicano no quiso saber nada tras la última datación y prohibió las excavaciones en la zona. ¿Qué opinas de las Figuras de Acámbaro? ¿Crees que entre ellas puede haber alguna que no sea falsa? ¿Has tenido ocasión de verlas? ¡Comparte con nosotros tu opinión! Estaremos encantados de leerla.