Un hallazgo casual ha puesto de nuevo en el punto de mira a uno de los piratas más legendarios y literarios de la Historia, el pirata de origen escocés llamado William Kidd o Capitán Kidd, nacido en el año 1645 y ahorcado en Londres en 1701. El suceso ha tenido lugar en las aguas de Madagascar, lugar en el que explorador estadounidense Barry Clifford ha encontrado una barra de plata que piensa procede del tesoro y el pecio de este conocido pirata.
El pirata Capitán Kidd, un personaje de leyenda
Ya en 2010 Barry Clifford buscaba los restos del Adventure, el buque del Capitán Kidd, sin que fuesen concluyentes los restos que entonces se hallaron. William Kidd es uno de los piratas más misteriosos y carismáticos de la Historia. Su figura está envuelta en la polémica, siendo considerado por unos como un pirata cruel y por otros como un marino con patente de corso al servicio del rey Guillermo de Inglaterra y de un poderoso grupo de mercaderes y comerciantes.
Su trágico final en el patíbulo es considerado por muchos como una forma de deshacerse de él, culpándole de todo en el momento en el que ya no era necesario. Sea como fuere, Kidd se convirtió desde su muerte en un personaje de leyenda. Las historias sobre el tesoro le han convertido en protagonista de relatos, como el cuento El escarabajo de oro, de Edgar Allan Poe; películas e incluso canciones.
Uno de los tesoros más misteriosos de la Historia
Kidd consiguió hacer grandes ganancias durante su época como corsario a servicio del rey consiguiendo una enorme fortuna. Según recogen los historiadores, Kidd llegó a ser el dueño de casi todo el distrito del actual Wall Street. Allí construyó una lujosa casa cuyas chimeneas servían de referente para entrar en el puerto de Nueva York. En su interior la casa se adornaba con muebles caros y exóticos, alfombras turcas y las más finas telas. Kidd cayó en desgracia al ir perdiendo liderazgo entre su propia tripulación y ser acusado por la British East Company de haber atacado también a sus barcos pese a tener que defenderlos.
Fue acusado de haberse convertido en un cruel pirata poniéndose como prueba los cofres de joyas y oro que atesoraba. Pese a considerarse inocente, Kidd terminó admitiendo todas las acusaciones que se le atribuían. Su leyenda se forjó cuando también admitió que los cofres que se habían presentado como prueba no le pertenecían y que su tesoro, mucho mayor que lo que allí se había visto, permanecía oculto. Fue ajusticiado el 23 de mayo de 1701 en Londres quedando su cuerpo colgado y expuesto durante años para escarnio público y aviso a otros piratas.
La UNESCO investiga el caso del Capitán Kidd
Ante la magnitud del hallazgo, la UNESCO ha declarado que procederá a evaluar este descubrimiento a fin de proteger el pecio ya que estiman que éste puede haber sido dañado el lugar al realizar Clifford sus actividades sin un plan de actuación con el visto bueno de las autoridades de la zona, ni contar con un arqueólogo cualificado que supervisase la recogida de la barra y la exploración, algo que el precitado Clifford niega.
La UNESCO quiere investigar a fondo el pecio del Capitán Kidd, pues Clifford ya fue protagonista el año pasado de un caso de falsa identificación al creer haber encontrado los restos del naufragio de la Santa María, la nao perdida durante el primer viaje de Cristóbal Colón. Posteriores investigaciones de la UNESCO demostraron que la nave databa de una época más actual.
¿Será esta barra de plata una parte del legendario tesoro del Capitán Kidd?