Nieve, géiseres, potentes volcanes, termales de agua y barro y la Aurora Boreal son algunas de las cosas que pueden llegar a tu mente al hablar de Islandia. En efecto, esta remota tierra nórdica es un verdadero descubrimiento de naturaleza y paisajes. Pero más allá de eso, en la antigüedad sirvió de hogar a los temibles pueblos vikingos. Estos guerreros germánicos eran conocidos por su violencia. Construyeron impactantes barcos y se convirtieron en grandes navegantes. Surcando el océano se detenían a saquear y cometer actos de pillaje en diferentes puntos de Europa. Pero dentro de sus puntos bases de descanso y origen estaban Escandinavia, Noruega, Dinamarca, Suecia, Finlandia y también Islandia. Justo en estos terrenos vírgenes y áridos para la vida humana, los vikingos se dispusieron a la creación de un particular formato de vivienda que les resguardara de las inclemencias del tiempo. Se trata de la aldea de Keldur, la de las casas de césped en Islandia. ¿Te animas a conocerla? Hoy en Supercurioso te las presentamos.
Keldur, un encantador pueblo de película
Si alguna vez has visto alguna película de la saga de El Señor de Los Anillos, seguro recordarás la imagen de la aldea donde Bilbo y Frodo Bolsón vivían. Aquellas pequeñas casitas que parecía que emergían de la misma tierra y que se veían tan cálidas y acogedoras. Pues, un formato muy similar existe aún en Islandia. Se trata del pueblo de Keldur, repleto de las típicas casas vikingas. Los detalles sobre cómo vivían los vikingos nos muestran a un pueblo organizado, que aunque se hizo popular por su fiereza en los combates y su costumbre de piratear en las costas europeas, también destacaba por su pulcritud y organización social, por sus habilidades para las actividades del agro y su afición por los deportes.
Los vikingos eran recios, cuidaban en extremo su aspecto físico, sus mujeres cultivaban sus alimentos y su contextura corporal solía ser fuerte. Sin embargo, la realidad que nos dibujan el cine y la televisión, en la que todos iban tapados con gruesas pieles, no era tan cierta. El uso de estos ropajes estaba destinado sólo a la realeza. Y fue justo por esto, por la necesidad de generar hábitats que les protegieran de las durezas del medio ambiente, que los vikingos crearon estas particulares casas de césped en Islandia que aun se mantienen en pie en el pueblo de Keldur.
En efecto, Keldur es uno de los más impresionantes rincones nórdicos, y un descubrimiento asombroso para quien llega a él. En esta pequeña aldea sobreviven una hilera de casas de césped en Islandia, una iglesia, un pequeño cementerio y un túnel muy curioso, que los visitantes descuidados pasan sin advertir, y que los vikingos usaban para sorprender a sus enemigos o escapar de ataques inesperados. Si en algún momento te has entretenido con las populares series de vikingos, encontrarás que muchas de ellas fueron inspiradas e incluso grabadas en esta pequeña aldea en la que se consiguen las más antiguas casas de césped en Islandia.
Todo el pueblo vikingo resulta encantador. En la entrada nos topamos con un riachuelo y una casa muy pequeña, cuya puerta da directamente al río. Lo curioso es que tras de ella está en túnel que te comentamos, a través del cual se lograba comunicación directa con una de las casas de la granja de Keldur. Se cree que era el as bajo la mangan que tenían los vikingos que habitaron estas tierras en la Edad Media, pues podían usar este túnel para escapar, en caso de sufrir un ataque o invasión enemigos. En todo caso, la aldea era un emplazamiento de clima helado y ventiscas, y las casas vikingas representaron con su modelo de construcción, la mejor solución.
Cómo era la construcción de las casas de césped en Islandia
Pero sin duda que lo más enigmático de Keldur es la forma en las que están construidas las curiosas casas de césped en Islandia. Estas viviendas están literalmente semienterradas. Esto les permitía a sus habitantes protegerse de los vientos huracanados, las lluvias e incluso los terremotos. Aunque en el exterior el aire estuviese gélido, dentro de las casas vikingas puede estarse sin sufrir el frío. Quienes han estudiado la construcción de estas casas típicas, comentan que se trataba del estilo tradicional de la construcción en el país nórdico durante generaciones. Con la modernidad y la tecnología fueron desapareciendo, y en la actualidad las de Keldur son las más antiguas que se mantienen en pie.
La arquitectura del césped islandés tiene sus raíces en las técnicas de construcción que se remontan a la Edad del Hierro. De hecho, los romanos usaron ladrillos de césped para construir fortalezas y muros defensivos. En toda Noruega, las Islas Feroe y partes de Escocia, las casas de césped también eran populares, con la diferencia de que en esos países, los edificios de césped eran para las clases más bajas. En Islandia en cambio era una forma de casa vikinga que se adaptaba a todas las clases sociales. Incluso, se cuenta que los ricos residían en castillos de césped.
Una granja típica de césped islandés era en realidad un grupo de entre dos y treinta edificios conectados por pasillos de barro. Para apoyo y protección, la parte posterior de un edificio de este tipo se excavaba en la ladera, mientras que el frente sobresalía y tenía un techo puntiagudo y cubierto de musgo. Las robustas paredes estaban compuestas de piedra intercalada entre ladrillos de césped, mientras que un marco de madera se añadía para soporte adicional. En cuanto al calor, las habitaciones generalmente estaban situadas debajo de la línea de escarcha, aproximadamente a medio metro por debajo del nivel del suelo, donde la tierra no se congela.
Lamentablemente este encantador estilo no sobrevivió, al menos masivamente. Los historiadores y arquitectos que han profundizado en la construcción de las casas vikingas, revelan que para inicios del siglo XX, existían en Islandia más de cien mil estructuras de césped. La ola de modernización junto a la masificación de los sistemas de calefacción central, terminaría con la demolición de casi todas estas casas típicas vikingas. Por suerte, aún nos queda la magia del pueblo de Keldur, que nos permite viajar a un pasado de piratas, fuerza, batallas y glorias.
Y tu, ¿Conocías la historia sobre la aldea de Keldur y las casas de césped en Islandia? ¿Sabías que son realmente muy parecidas a las que vemos en La Comarca de los Hobbits en la famosa obra de J. R. R. Tolkien? ¿Te gustaría visitar y ver con tus propios ojos estas fantásticas construcciones? Si te ha llamado la atención este artículo, no te pierdas nuestra selección sobre las más interesantes curiosidades de los vikingos y su estilo de vida.