¿Quién no ha soñado con acostarse sin haber preparado aquella temática para el examen del día siguiente, y que al despertar lo supiera todo? Seguramente también lo has hecho tú. Lo cierto es que las curiosidades del cerebro no dejan jamás de sorprendernos, es por eso que durante las últimas décadas ha estado rondando el rumor de que es posible aprender mientras duermes. En Supercurioso, hicimos algunas averiguaciones y hoy te contaremos si aquello de aprender dormido es mito o realidad. ¿Quieres conocer la respuesta? ¡Acompáñanos! 😀
¿Es posible aprender mientras duermes?
Pensemos por un momento el por qué no recordamos los sueños. Si hablamos de aprender mientras dormimos, se podría pensar que lo primero que recordaríamos al despertar son los sueños, pero eso, en muchas ocasiones, no pasa. ¿Entonces? ¿Cómo es posible que algunos científicos afirmen que es posible aprender mientras dormimos, si ni siquiera recordamos nuestros sueños?
Bueno, en realidad, la respuesta a este interrogante puede ser ambigua, pues si bien existen investigaciones que afirman que es posible aprender mientras duermes, lo cierto es que nuestro cerebro «aprende» de una manera un tanto diferente. ¡Veámoslo!
1. ¿Qué hace el cerebro mientras dormimos?
Como ya sabrás, dormir es sumamente importante para el cuerpo y la mente, ya que durante este periodo el organismo recupera fuerzas para seguir con su ciclo vital. Es justo en este estado cuando se consolida todo lo que hemos aprendido durante el día. Dormir no solo ayuda a que la información recibida pase del hipocampo a la memoria de corto plazo, al córtex y a la memoria a largo plazo, también mejora las capacidades físicas del cerebro. En este orden de ideas, podríamos pensar, incluso, que dormir poco puede dañar tu cerebro.
No obstante, podemos inferir que, aún estando dormidos, nuestro cuerpo jamás descansa, mucho menos el cerebro. Este órgano, de hecho, tiene un funcionamiento muy específico mientras dormimos. En nuestro sueño, el cerebro pasa por cinco fases: el adormecimiento, el sueño ligero, la etapa de transición, el sueño profundo y el REM. Durante las diferentes fases del sueño, se producen cambios bioquímicos que permiten eliminar la información que no es tan importante para nosotros, para así quedarnos con la que sí lo es.
Pero… ¿Puedes aprender mientras duermes? La respuesta es sí, pero con algunos puntos encontrados. El sueño posibilita nuestra capacidad para adquirir conocimientos, pero la clave está en que no podemos aprender algo totalmente nuevo, pero sí podemos fortalecer y afianzar nuestros conocimientos ya existentes.
2. ¿Cómo aprender mientras duermes?
¿Te has preguntado qué ocurre en nuestro cerebro cuando aprendemos? Bueno, esta misma pregunta se la hicieron los doctores William C. Dement y Nathaniel Kleitman, en 1957, cuando ya habían puesto sobre la mesa la teoría del aprendizaje en el sueño. Para ellos, era posible aprender mientras dormimos y no solamente estando conscientes. Todo gracias a la actividad eléctrica que se produce en el cerebro. Esta crea los denominados «patrones de onda», pieza clave en todo el engranaje. Igualmente, estas permiten que se hagan conexiones entre la información recolectada, los recuerdos y las experiencias: la mezcla perfecta para aprender mientras duermes. La pregunta, entonces, es ¿cómo se hace?
La psicóloga Susanne Diekelmann, del Instituto de Psicología Médica y Neurobiología del Comportamiento de la Universidad de Tuebingen en Alemania, afirma que: «Dormir estabiliza los recuerdos y los integra en una red de memoria a largo plazo, lo que hace que no se estanquen en el pasado, sino que podamos recuperarlos en el momento oportuno y utilizarlos en el futuro». Esto es muy importante para saber qué clase de conocimientos podemos reforzar durante el sueño. Porque lo cierto es que no es lo mismo aprender aritmética mientras se duerme a aprender francés.
3. ¿Qué puedes aprender mientras duermes?
Ya sea que te vayas a descansar sin intentar aprender nada o que lo hagas con la firme intención de interiorizar algo, es posible que estés aprendiendo mientras duermes. Aquí podemos tomar dos caminos. Por un lado, descansar de un día repleto de labores y rutinas, incluso si consideras que es bueno dormir la siesta, pues este descanso te ayudará a mejorar tu memoria, analizar y filtrar la información y despejar tu mente de aquello que solo hace ruido. Mientras que, por el otro lado, puedes elegir la herramienta perfecta para aprender mientras duermes: el sonido.
Así es, lo mejor que podemos hacer para aprender mientras dormimos es escuchar aquello que queremos interiorizar. De esta manera, nuestro cerebro, al escuchar constantemente grabaciones de música, o palabras en otro idioma, iniciará a reconocerlas para luego asociarlas a determinada frase o acción. Recuerda que el cerebro continúa practicando lo aprendido durante el día, y más aún, lo que está en la mente antes de dormir. Aprovecha esto para:
Mejorar tus conocimientos en un idioma extranjero
Un caso de éxito que demuestra que sí es posible aprender mientras duermes, fue un estudio realizado por los psicólogos Thomas Schreiner y Björn Rasch, donde tomaron un grupo de personas alemanas a las que revelaron palabras holandesas y les pidieron que durmieran. A algunos se les expuso al sonido de las palabras y a otros no. Quienes habían escuchado las palabras por la noche, fueron capaces de reconocer las palabras y repetirlas mejor que los que no lo hicieron. ¡Bastante interesante!
Aprende música
Asimismo, a veces nuestro subconsciente arroja canciones a nuestra mente, simplemente llegan y empezamos a cantarlas. ¿Te sucede a menudo? Si estudias música, por ejemplo, esto te será muy útil, ya que escuchar melodías que ya hayas practicado mientras duermes puede hacer que las reproduzcas de forma más acertada. ¡Inténtalo!
Desarrollar tu creatividad
Ya dijimos que aprender mientras duermes significa eliminar automáticamente recuerdos no relevantes. Debido a que los recuerdos conservados son los más importantes, durante el sueño, podemos mejorarlos, ya que se empiezan a asociar unos con otros. Si necesitas crear algo genial, solucionar problemas o mejorar una idea, puedes recurrir al sueño como ayuda. Si durante el día has pensado mucho sobre qué hacer, vete a la cama, descansa y duerme bien, es muy probable que al día siguiente surja la solución que necesitas.
Repasar para un examen
Si repasas para tu prueba la noche anterior, justo antes de dormir, es muy probable que recuerdes bastante al otro día. Esto se debe a que una parte muy importante del contenido de nuestros sueños surge de nuestros recuerdos más inmediatos. Soñar con un examen posiblemente no sea el mejor sueño, pero nos permitirá recordar lo más significativo. No obstante, recuerda que esto no quiere decir que debas trasnochar, debes estudiar antes toda tu lección y, llegada la noche, darle un repaso corto; ¡debes dormir lo suficiente y reponer energía!
Esperamos que con este artículo puedas ser capaz de aprender mientras duermes, interiorizar aquello que tanto deseas. Antes de dar por terminado, nos gustaría recordarte una cosa: las horas de sueño son fundamentales para que el aprendizaje se lleve de mejor manera. Así que duerme bien y aprenderás más. Y si quieres seguir conociendo más sobre el cerebro, te invitamos a descubrir todo sobre la memoria olfativa.