Las arcas o cofres siempre han estado envueltas en ese alo de misterio quizás debido a que a menudo se utilizaban para guardar joyas preciosas y objetos de valor que a su vez se debían proteger no sólo con cerraduras sino también con maldiciones, lo que ha contribuido a aumentar aún más la intriga.  Si a todo esto le sumas un contexto único como es el antiguo Egipto no tienes únicamente una caja de 4000 años de antigüedad sino un verdadero enigma por resolver. ¿Nos ayudas?

Una caja de 4000 años con nombre de mujer. ¿Qué había en ella?

Una caja con nombre de mujer… ¡La verdad es que un titular así, suena casi a novela romántica! ¡Y quién sabe si no lo es en realidad! Se trata del nuevo hallazgo descubierto en interior del Complejo Funerario de Dehshur, al sur del Cairo, durante unas excavaciones dirigidas por Adel Okasha con las que se pretende sacar a la luz una pirámide que fue descubierta por Charles Arthur Musès en una campaña de excavaciones americana realizada, según refieren Rinaldi y Maragioglio ya que no existen registros, sobre el año 1957. La pirámide forma parte de un conjunto mayor compuesto por otras mastabas y se encuentra incompleta debido, probablemente, al breve tiempo de reinado que tuvo el faraón para la que fue erigida.

Una caja de 4000 años y un nombre de mujer en jeroglífico. ¿Qué había en ella?

De la construcción tan sólo se conserva la parte inferior con su intrincado de túneles, rampas y un par de salones, uno en la parte occidental y otro en el  extremo oriental, así como un total de diez columnas donde se se hace mención sea al faraón Ameny Qemau, Amenemhat V, y a una misteriosa mujer de la familia real de la que no se sabe con seguridad la relación parental. Pero ésto no ha sido lo más llamativo de esta campaña, en el interior de una de las cámaras han encontrado una caja decorada por columnas de jeroglíficos en los que se puede leer el nombre de una mujer, que se hipotiza podría ser la hija del farón.

Una caja de 4000 años y un nombre de mujer en jeroglífico. ¿Qué había en ella?

En el interior de la caja, nada de joyas preciosas o cartas de amor… los arqueólogos encontraron unos siniestros envoltorios, que contenían los restos de la misteriosa mujer, divididos en 4 vasos canopos. Se sospecha que junto a ellos pudo haber algún tipo de ajuar, ya que el cofre muestra señales de una antigua manipulación. ¡Por desgracia nada de romanticismo!

Ahora serán los arqueólogos los que tratarán de averiguar la historia de esta mujer, que apenas sepamos como siempre compartiremos con todos vosotros.

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Imágenes:  Ministry of Antiquities, Egypt.