Los carbohidratos suelen tener mala fama por «hacernos» engordar, pero puede que realmente no sea malo comer carbohidratos. En Supercurioso te queremos explicar todo lo que debes conocer sobre el consumo de carbohidratos, los beneficios y consecuencias de comerlos, cuáles son los carbohidratos buenos, malos y para qué sirven. ¡Acompáñanos a descubrir qué dice la ciencia!
¿Hay que dejar de comer carbohidratos?
Los carbohidratos son la fuente de energía de tu cuerpo, lo que te permite llevar a cabo con completa normalidad tus actividades diarias: hacer ejercicio, digerir los alimentos, pensar y, en definitiva, funcionar. Sin embargo, muchas personas argumentan que se sienten mejor cuando controlan conscientemente la ingesta de carbohidratos, ¿es esto verdad? ¿cómo algo que nos da energía puede ser malo? Ha llegado el momento de descubrir qué dice la ciencia.
Para qué sirven los carbohidratos
Existen numerosos mitos sobre la alimentación que sin duda alguna deberían ser desmentidos, tal es el caso de que comer carbohidratos es malo. Según los expertos, los carbohidratos son necesarios para el funcionamiento ideal de nuestro cuerpo. Cuando se ingieren carbohidratos, el sistema digestivo lo digiere en moléculas mucho más simple para que estas a su vez, puedan entrar al torrente sanguíneo. Cuando ya se encuentran viajando por nuestro cuerpo, los carbohidratos hacen que la glucosa se eleve, cuando esto pasa, el páncreas se estimula para generar la secreción de una hormona llamada insulina.
Esta hormona es la que permite que las células tengan el aporte necesario de alimento «glucosa» y de esa forma obtener la energía necesaria para funcionar en forma de ATP. Cuando esto ha sucedido, el páncreas nuevamente secreta una hormona llamada glucagón, que tiene la función de liberar toda la glucosa almacenada en las células. La interacción entre la insulina y el glucagón, garantizan que las células de nuestro cuerpo, especialmente las de nuestro cerebro, tengan constantemente energía para funcionar. Como ves, al contrario de ser malo comer carbohidratos, es ante todo, una necesidad fisiológica.
¿Qué pasa cuando se dejan de comer carbohidratos?
Según los expertos, dejar de comer carbohidratos puede derivar en ciertos cambios negativos para tu cuerpo que afectaran tu vida diaria, por ejemplo: pérdida de músculo, cambios de humor, deshidratación, y otros, como daño en los riñones o falta de energía. Si crees que reducir los carbohidratos puede ser adecuado para ti sin consultar la opinión de un nutricionista, esto es lo que puede suceder:
1. Pérdida de músculo
Después de que tu cuerpo haya trabajado con carbohidratos almacenados y queme algo de grasa corporal, buscará otra fuente de energía. De acuerdo con el Centro Médico de la Universidad Rush, cuando se han acabado las reservas de glucógeno en sus músculos, tu cuerpo comienza a usar la proteína de tus músculos como energía. Esto se traduce en una pérdida de masa muscular acelerada.
2. Cansancio excesivo
Reducir el azúcar en la sangre puede hacer que te sientas cansado, que es lo que puede suceder cuando tu energía se desploma por la tarde. Comer carbohidratos buenos, como frutas y avena, hace que el cuerpo los asimile de la mejor manera, y sean la mejor fuente de energía para el cuerpo durante todo el día.
3. Deshidratación
Los patrones alimenticios que son altos en proteínas y bajos en carbohidratos pueden hacer que te den sed. Cuando los carbohidratos se almacenan en el cuerpo, también almacenan agua. Eso significa que cuando reduces los carbohidratos y tu cuerpo consume esas reservas de energía, esa agua almacenada también desaparece, por tanto puedes comenzar a sufrir de deshidratación.
4. Cambios de humor
Una investigación publicada en Archives of Internal Medicine en 2009 señalaba que, aquellos que restringen severamente su consumo de carbohidratos, muestran más mal humor que aquellos que no lo hacen. ¿Será por eso que al comer pasta o galletas nos sentimos felices? ¡No es malo comer carbohidratos después de todo!
Beneficios de comer carbohidratos
Conociendo para qué sirven los carbohidratos, podremos entender mucho más cuáles son sus beneficios, porque -debemos decírtelo- los carbohidratos son excelentes para nuestro funcionamiento. Sabemos también que, en la vida todo es cuestión de equilibrio, por eso es importante mantener una dieta estable y continua para que nuestro cuerpo esté siempre bien.
Antes de enumerar cuáles son los beneficios de comer carbohidratos, debemos decirte que existen diferentes tipos. Y, cabe resaltar que no todos son igualmente saludables. Estos se clasifican en carbohidratos simples o complejos en función del número de moléculas con las que estén compuestos. Por un lado, los carbohidratos simples son descompuestos rápidamente por el cuerpo para ser usados como energía, pero carecen (en su gran mayoría) de vitaminas, minerales y fibra. Los carbohidratos complejos por su parte, tienen una estructura química diferente, lo que hace que sea más difícil su absorción. Estos contienen fibra, vitaminas y minerales muy importantes para nuestro cuerpo, los carbohidratos complejos aseguran que el sistema digestivo esté funcionando plenamente.
Ahora bien, ¿cuáles son los beneficios? De acuerdo con los nutricionistas, el tener una ingesta adecuada de carbohidratos ayuda a mantener el correcto funcionamiento de nuestro sistema nervioso central, así como también ayuda a mantener los riñones y el corazón en excelentes condiciones. Así que ya sabes, comer los carbohidratos adecuados en su justa medida resulta muy bueno para tu salud física y mental.
Consecuencias de comer carbohidratos
Uno de los grandes problemas que se nos presenta con los carbohidratos, es el consumo desmesurado de ellos; porque tenemos antojos de comida generalmente con los carbohidratos simples y esto puede inducir en un aumento de peso poco saludable para nuestro cuerpo. Pero dejar de ingerirlos drásticamente puede resultar en uno de los errores comunes cuando se inicia una dieta.
Almacenar grasa no es la única consecuencia de comer carbohidratos en exceso, estos pueden llegar a generar ansiedad por los antojos, problemas intestinales, reducir la rapidez del metabolismo, producir apneas del sueño y cansancio físico. Según la doctora María José Ubillos, cuando diseñas una dieta saludable para casa, se busca ser equilibrado con los alimentos; en especial con los carbohidratos. Permitiendo la ingesta de aquellos que aumenten los niveles de azúcar en nuestra sangre de manera gradual (carbohidratos complejos) podremos tener una mejor condición física.
Carbohidratos buenos 
Como hemos visto, los carbohidratos sirven para que nuestro cuerpo funcione de manera correcta, por eso los expertos recomiendan la ingesta de los hidratos de carbono complejos, ya que contienen almidón y fibra. Por ejemplo: cereales integrales como el arroz, la pasta, la avena, la cebada y el trigo. Así mismo algunas legumbres como las lentejas, judías, frijoles y guisantes. A su vez recomiendan la ingesta de frutas como la piña o el aguacate.
¡Lo mejor es comenzar tu día con una muy buena alimentación!, se recomienda ingerir carbohidratos con alto contenido de fibra junto con guineos, bananos o plátanos. También puedes optar por frutas secar como las nueces o almendras.
Carbohidratos malos
Para tener una dieta estable, la clave es escoger bien qué debes comer. De acuerdo a las guías de nutrición de la Sociedad Americana Contra el Cáncer, se recomienda evitar los carbohidratos procesado y refinados. Estos se encuentran llenos de calorías, careciendo de cualquier valor nutricional. Los carbohidratos malos tienden a ser en su gran mayoría los carbohidratos simples, que se descomponen rápidamente. Estos generalmente incluyen azúcar, miel, pan, bebidas gaseosas, pasteles, galletas y por supuesto, alimentos procesados como las papas fritas.
Ya sabes para qué sirven los carbohidratos y por qué son necesarios. Una vez más, todo es cuestión de balance. No debes dejar de comer carbohidratos porque ellos son la fuente de energía, pero tampoco puedes consumir aquellos que no te aportan valor nutricional. Si quieres seguir leyendo te recomendamos leer cuáles son los alimentos anticancerígenos, indispensables en tu dieta.