¿Alguna vez te has preguntado cuál es el lugar exacto dónde se almacenan los recuerdos? ¿O quizás te has rebanado los sesos ante el desespero de sentir una laguna mental? Pues en los datos curiosos de la memoria encontramos las respuestas a todas estas singulares preguntas. Nuestra memoria es ese gran cofre repleto de experiencias, rostros y palabras que custodiamos en nuestro cerebro como un preciado tesoro. Todo este cúmulo de recuerdos es lo que nos define e identifica, es un legado personal y único que nos encargamos de alimentar día a día con nuestras actividades y relaciones con todo aquello que nos rodea. Pero el proceso de guardar recuerdos que se vuelven parte de nuestra historia, es bastante menos simple de lo que parece. Acompáñanos en Supercurioso a develar las más interesantes curiosidades de la memoria.
Antes de profundizar en los datos curiosos de la memoria, debemos tener claro su concepto y alcance. La memoria se define como la función del cerebro que se encarga de codificar, guardar y rescatar toda la información que hemos adquirido en el pasado, y que puede clasificarse en el corto, mediano o largo plazo. Recordar sucesos vividos es una de las curiosidades del cerebro más asombrosas, y es posible gracias a los enlaces sinápticos existentes entre las neuronas, que se conectan entre ellas para generar redes neuronales. De igual forma, los recuerdos son gestionados por el hipocampo, la principal estructura cerebral asociada a la memoria. Otros sistemas también pueden influir en ello, incluyendo algunas regiones del córtex temporal, la zona central del hemisferio derecho, el córtex parieto-temporal, los lóbulos frontales y el cerebelo. Ahora, ¿Qué pequeñas cosas ocurren en nuestra cabeza, que determinan los recuerdos? ¡Veamos!
10 curiosidades de la memoria que no podrás creer
1. A veces, olvidar es necesario
Iniciamos este recorrido por los datos curiosos de la memoria, con una bastante particular: hay ocasiones en las que olvidar se hace necesario, aunque pueda parecer extraño. A veces para aprender cosas nuevas tenemos que olvidar las anteriores. No se trata de dar a ese botón donde los recuerdos se van directamente a la papelera de reciclaje para ser eliminados por siempre. Más bien se dejan a un lado, como aparcados, para hacer cosas que en un momento dado son más importantes. Porque… ¿Quién no se ha levantado alguna vez sin recordar dónde ha dejado el móvil? Pues ahora sabes que es tu cerebro delimitando las prioridades de tu memoria.
2. Disponemos de recuerdos automáticos
En algún momento de nuestra infancia o madurez, aprendimos a hacer algo: nadar, ir en bicicleta, manejar los teléfonos móviles y sus programas… Son actividades a las que dedicamos algunos minutos, algunas horas e incluso días. Una de las curiosidades de la memoria es que algunos de nuestros recuerdos están instaurados de modo tan automático en nuestro cerebro, que no nos hace falta recordarlos para realizar esas actividades en nuestra cotidianidad.
3. Recordamos mejor lo que nos emociona
Otro de los datos curiosos de la memoria que nos llama la atención, es el hecho de que parecemos recordar mejor aquellos sucesos que nos generan emoción. En este sentido, un estudio realizado por psicólogos de la Universidad de California, revela que son dos las circunstancias que favorecen que una experiencia sea almacenada en nuestra memoria. En primer lugar, recordamos mejor aquellos hechos que están vinculados con estados emocionales intensos, sean positivos o negativos. En segundo lugar, también destacan los recuerdos asociados a aquellos acontecimientos que despertaron nuestra sorpresa o curiosidad.
4. La memoria puede crear fantasías
Uno de los más interesantes datos curiosos de la memoria es que, por más que nos ufanemos de tener recuerdos precisos, no siempre resulta tan realista. En ocasiones, la memoria puede inventar cosas. Imagina, por ejemplo, que llega a tu mente un recuerdo de infancia, ese día en que lo pasaste tan bien en una excursión con unos amigos. Con el paso de los días, meses, años… nuestro cerebro ha ido introduciendo algunos aspectos de su cosecha, de tal modo que la memoria nunca es perfecta al 100%… A no ser que padezcas hipermnesia, una patología un tanto estresante para el cerebro donde se recuerda cada aspecto, cada rincón, cada color y detalle de todo lo que vivimos hasta el punto de ser demasiado “intenso” para la mente humana.
5. No podemos fiarnos completamente de nuestra memoria
Otra de las curiosidades de la memoria es que está muy asociada a las emociones y a nuestros sentimientos, y ello a veces provoca que experimentemos ciertas distorsiones. ¿A quién no le ha ocurrido alguna vez eso de pensar que no nos vamos a olvidar de algo y, efectivamente, olvidarlo por completo? Cuánto más importante es algo, antes lo olvidamos ¿Por qué? Sencillamente, por el estrés y la ansiedad, emociones que bloquean al cerebro en un momento dado.
6. La memoria se asocia al contexto
Sin duda que contamos, entre los más valiosos datos curiosos de la memoria que debes saber, el hecho de que esta se asocia al contexto en el cual atraviesas la vivencia y generas el recuerdo. Sin duda que un recuerdo se asocia mejor si está relacionado con un lugar, o incluso con un olor o una sensación. En ocasiones, por ejemplo, podemos recordar una materia o un tema de estudio si lo relacionamos en el lugar donde estábamos. Destacable es también el hecho de utilizar colores llamativos o fosforescentes cuando preparamos materia de estudio de cara a un examen, pues esas tonalidades logran crean anclajes de memoria en nuestro cerebro.
7. La memoria no está bajo nuestro control
La memoria es compleja como una red de intrincados laberintos. El cerebro nunca olvida, nuestra información está allí siempre instalada y guardada, solo que, en muchas ocasiones, no nos es accesible. En enfermedades como el Alzheimer no se trata simplemente de que hayamos borrado todo nuestro preciado almacén existencial. Más bien implica que los datos son ahora muy complejos de recuperar, carecemos de las conexiones adecuadas para acceder a ellos, para recomponerlos y servirnos de ellos para actividades básicas de la vida diaria.
8. El cerebro crea recuerdos falsos
Si bien parece uno de los más insólitos datos curiosos de la memoria, ¡Es real! Nuestro cerebro tiene la capacidad de generar recuerdos falsos, y esto generalmente ocurre cuando una persona atraviesa una experiencia traumática o muy difícil de afrontar. Su mente puede alterar los patrones de asociación, alterando los recuerdos reales y sustituyéndolos por otros, relativos a cosas que no ocurrieron en realidad. Se trata de un mecanismo de defensa de la mente humana, en contra de situaciones que sobrepasan la emocionalidad de la persona y pueden representar un daño a su salud mental.
9. Mejorar la memoria con técnicas
Y sin duda que de nuestros favoritos entre los datos curiosos de la memoria, se cuenta el hecho de que existen técnicas especiales para mejorarla. El ejercicio y la alimentación influyen mucho en este sentido, pero además puedes incorporar nuevos hábitos que, practicándolos a diario, reportarán grandes beneficios a tu memoria.
Uno de ellos es olvidarte un poco de la comodidad del celular y volver al lápiz y el papel. Sea para anotaciones del día a día o para sacar alguna suma o resta, pon a tu cerebro en marcha y escoge el camino más largo. Ese entrenamiento en las pequeñas cosas generará cambios notables. Otras técnicas para mejorar la memoria muy recomendables son escuchar música clásica, leer un libro o aprender un nuevo idioma.
10. Dieta para la memoria
Seguro alguna vez habrás escuchado la típica frase: Somos lo que comemos. Pues con la capacidad de memoria de nuestro cerebro parece que en efecto es así. Se ha demostrado que existen alimentos buenos para la memoria, y que su consumo continuado puede mantener sólida nuestra capacidad de recordar. ¿Cuáles son? Pues los principales de la lista son el aguacate, las nueces, las espinacas, las moras, fresas, manzanas y el apio. Además de deliciosos, mantendrán tu cerebro sano. ¡Una maravillosa idea!
El cerebro, en situaciones normales y no patológicas, es quien decide qué es necesario y qué no. Para nuestra vida diaria no nos es útil saber qué ríos son los que cruzan Europa o cómo se llama el monte más alto de Rusia… no nos sirve para ir a trabajar, para relacionarnos, para alimentarnos… lo recordaremos sencillamente si para nosotros, es significativo en algún aspecto. El placer del conocimiento está asociado a la memoria, es cierto, pero solo si disfrutamos con ello.
De ahí que podamos decirte con tranquilidad que, en ocasiones, los pequeños olvidos son buenos, que las curiosidades de la memoria nos dejan espacios libres para aprender cosas nuevas que nos serán más útiles. Así que sigue el consejo que rescatamos de una de las mejores frases de Albert Einstein: no guardes en tu cerebro todo aquello que puedas dejar en un papel o en tu bolsillo, ocupa tu memoria para cosas más importantes…
Si te interesa seguir profundizando en las curiosidades de la memoria, disfruta de nuestro artículo sobre los 7 pecados de la memoria. Y si quieres ir más allá de lo netamente científico, no te pierdas de leer sobre la historia de Mnemósine, la diosa griega de la memoria.