Como sacado de una obra de Arthur Conan Doyle, entre 1912 y 1956 existió un policía cuya habilidad para el disfraz y el camuflaje le ganaron el apodo de «el Sherlock Holmes Italiano». Durante las investigaciones de los casos a su cargo, Giuseppe Dosi se hizo pasar por banquero, sacerdote, médico y hasta por una mujer, para llegar a la verdad.

Descubre quién es el Sherlock Holmes italiano de la vida real

Este 2017 se cumplen 35 años de su muerte y no ha sido sino hasta ahora que la Interpol ha decidido revelar los secretos de este detective, quien además fuera uno de los fundadores del capítulo italiano de esta institución de seguridad internacional.

Giuseppe Dosi nació en la capital italiana, Roma, en el año 1891 y poseyó un gran talento para las artes histriónicas. Tras estudiar teatro por dos años, se convirtió en un maestro del disfraz.

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Precisamente por esta habilidad suya, la policía romana le confió muchas misiones importantes dentro y fuera de Italia. Entre los casos en los que estuvo involucrado destaca su trabajo al infiltrarse en el movimiento anarquista italiano que residía en Suiza y que estaría conspirando para asesinar al rey Víctor Manuel III.

También estuvo a cargo de investigar las sospechosas circunstancias del accidente que sufrió el poeta, novelista y político italiano Gabriele D’Annunzio, quien cayó desde su balcón -y sobrevivió-. En este caso habrían estado implicadas importantes figuras de la época entre políticos, intelectuales y artistas.

Para conservar la memoria del trabajo de este detective, se ha organizado una interesante exposición en el Museo Histórico de la Liberación de Roma, en la que se exhiben documentos referentes a las misiones de Dosi, identificaciones de los alter egos que utilizaba y diversas fotografías.

La curadora y archivista del museo, Alessia Glielmi resaltó a la prensa que Dosi creó identidades extensamente elaboradas con sus documentos y vidas propias.

Para investigar el caso de Gabriele D’Annunzio, se hizo pasar por un exiliado checoslovaco, Karel Kradokwill, invitado en casa del poeta.

«Hablaba italiano con un fuerte acento alemán y caminaba arrastrando una pierna medio paralizada, según decía, a consecuencia de una herida de guerra», detalló.

Gracias a este ardid, Dosi descubrió que el poeta había caído desde el balcón en una escena de celos entre él y su amante, descartando así la hipótesis de un complot político.

Otro de los casos descifrados por Dosi fue el de una serie de asesinatos y agresiones contra niñas. En esta ocasión, el detective siguió su intuición en contra de las instrucciones de sus superiores, que habían presentado al fotógrafo Gino Girolimoni como sospechoso y descubrió que el verdadero culpable había sido un clérigo británico, aunque éste logró escapar de las autoridades.

Sin duda, Dosi fue un personaje interesante. ¿Qué te parece?

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Imágenes: Wikimedia Commons