Tanto Halloween como el Día de los Muertos se han vuelto fechas reconocidas a lo largo del mundo y cada vez tienen mayor acogida. Aunque a primera vista pueden parecer similares, cuentan con diferencias importantes en cuanto a su origen, costumbres y creencias que valen la pena aclarar. A continuación, te contamos cuáles son las diferencias más relevantes entre Halloween y el Día de los Muertos.
4 Diferencias entre Halloween y el Día de los Muertos
1. ¿Cómo se originaron?
Por su parte, el Día de los Muertos tiene su origen antes de la Colonización, en la época pre-hispánica. En aquellos tiempos, no existía propiamente un dios de los muertos, por lo que los cultos y tributos funerarios eran directamente para los fallecidos. Además, los indígenas creían en la existencia del Mictlán (el equivalente al inframundo griego pero en la cultura mexicana). Para preparar el alma del difunto para su viaje al otro mundo, hacían celebraciones en las que llenaban las tumbas con ofrendas. Estas podían ser comida, ropa, dinero y cualquier otra cosa que podrían necesitar u ofrecer para acceder al nuevo reino.
Este ritual era común en las culturas indígenas antiguas, como la Azteca, la Maya y los Toltecas, por lo que se dice que cuenta con más de 3 mil años de antigüedad. Sin embargo, fue con la llegada de los españoles que, oficialmente, nació el Día de los Muertos.
Durante la Inquisición, y por la imposición de la religión, se dieron grandes matanzas en contra de los indígenas, con la intención de borrar aquellas tradiciones. Pero el culto hacia los muertos siempre estuvo vigente, e incluso tomó mayor fuerza. Así, poco a poco, fueron mezclándose las celebraciones indígenas y las fiestas católicas como el Día de Todos los Santos, que se celebra el 1 noviembre y tiene como objetivo rendir homenaje a los santos y a las almas que se consideran santas al estar en presencia de Dios. Esta particular mezcla dio paso al Día de los Muertos, que dejó de ser celebrado en agosto y se pasó al 1 de noviembre.
Por su parte, Halloween tiene su origen en países anglosajones como Irlanda, Inglaterra y Canadá, pero deriva de un ritual de la cultura celta llamado el Samhain, que conmemoraba el fin del verano y de la época de cosechas, lo que a su vez significaba el inicio de un nuevo periodo: el año nuevo celta. Puedes conocer mucho más en nuestro post sobre la verdadera historia de Halloween.
Se creía que en este día los espíritus, fueran buenos o malos, podían regresar a la tierra. Era el momento indicado para reencontrarse con los seres queridos, a quienes recibían e invitaban con grandes celebraciones. Pero, para ahuyentar a los espíritus malignos, se portaban máscaras y trajes tenebrosos.
El Halloween moderno que conocemos hoy comenzó a desarrollarse después de la Guerra Civil americana, en 1840, cuando los inmigrantes irlandeses exiliados en América empezaron a celebrarlo en esta región. Así, progresivamente, comenzó a propagarse y se estableció a nivel global.
2. Diferencias entre las costumbres de Halloween y el Día de los Muertos
La mayor costumbre del Día de los Muertos es poner los altares o las ofrendas, que son adornadas con flores, veladoras y fotografías de las personas fallecidas. Todos estos elementos celebran y guían al alma de los muertos para que logren llegar al hogar que tuvieron en vida, junto con sus familiares y amigos. También se destacan los grandes festines llenos de música, color y comida. En general, es una fiesta alegre que festeja la muerte como el paso a una nueva vida.
En cambio, Halloween se recuerda por el lado macabro. En lugar de colores vivos y festivos, principalmente se usan el naranja y el negro. Además, se busca que las decoraciones y los disfraces provoquen miedo, en lugar de alegría. Y la costumbre principal es hacer el “Dulce o Truco”, donde los niños salen a las calles pidiendo dulces. Actualmente, Halloween ha dejado de relacionarse con el recuerdo de los espíritus para pasar a ser una fiesta millennial donde se busca asustar a los vivos y no recordar a los muertos. Eso sí, ha derivado en tradiciones de Halloween muy variadas en todo el mundo.
3. Diferencias en la simbología de Halloween y el Día de los Muertos
Otra diferencia entre Halloween y el Día de los Muertos es la simbología con la que se han caracterizado. Para Halloween el símbolo más común es la calabaza o jack-o’-lantern, que hace alusión a la antigua leyenda celta de «La lámpara de Jack».
Esta cuenta la historia del ebrio Jack, que con mañas logró engañar al diablo para que no le cobrara su alma jamás. Cuando Jack muere, su entrada al cielo es negada pues había tenido una vida pecaminosa. Por esta razón, acude al infierno. Pero allí tampoco fue aceptado, pues el diablo no podía reclamar su alma. Así fue como Jack estuvo condenado a caminar entre los vivos a pesar de estar muerto. Y, como el camino era oscuro, el diablo le lanzó un carbón encendido y Jack lo puso en una calabaza para que no se apagara con el viento.
De esta manera, la calabaza se convirtió en el símbolo de Halloween y las personas comenzaron a colocar calabazas en sus puertas y calles para mantener alejado al demonio. Tanto la leyenda como este símbolo conservan una connotación tenebrosa.
A diferencia de Halloween, para el Día de los Muertos el símbolo más característico es la Catrina mexicana, que ha dejado de ser exclusiva de este país para ser un referente global. En 1910, José Guadalupe Posada, dibujó a esta calavera garbancera, que estaba bien vestida y que pretendía pertenecer al mundo de los vivos.
Al principio fue usada para criticar a los garbanceros mexicanos que pretendían parecerse a los Europeos. Pero, actualmente, se utiliza la Catrina como disfraz y símbolo durante el Día de los Muertos para representar lo bello y elegante de la muerte. De esta manera, a diferencia de Halloween, la simbología del Día de los Muertos tiene una connotación bella de la muerte, pues la ven como un acto elegante y digno de reconocimiento.
4. Similitudes entre Halloween y el Día de los Muertos
La mayor similitud entre estas dos fechas es su relación con la muerte y con la alusión al mundo de los muertos. Es decir, ambas celebraciones mantienen una connotación sobrenatural y creen en la posible unión entre estos dos mundos. Pero, aún así, como se mencionó previamente, cada festividad toma un enfoque diferente para comprender y acercarse al significado de la muerte.
Otra similitud que podemos encontrar entre estas dos fechas es el uso de los disfraces. Aunque están más relacionados con la celebración de Halloween, en el Día de Muertos es común que la gente se disfrace de catrinas y catrines. En último lugar, a pesar de ser fechas asociadas a la oscuridad, el elemento de la luz es algo que comparten. Pues en los orígenes de ambas festividades, se acostumbraba a encender velas para iluminar e intercalar el camino de los vivos con el de los muertos.
En todo caso, son dos festividades muy distintas. Aunque cada una vale la pena ser celebrada, es necesario mantenerlas separadas, pues su significado y razón de ser es muy diferente. Ya que conoces las diferencias entre Halloween y el Día de los Muertos, cuéntanos si celebras ambas fiestas o qué costumbres tienes para hacerlo.