Estos días esta siendo noticia el trabajo del fotógrafo Tang Yuhong, un creativo que se ha propuesto documentar el proceso de abandono de las pequeñas ciudades y aldeas chinas despobladas como resultado de la marcha de la población hacia las grandes metrópolis del país. Este proceso ha tenido lugar en tan sólo unas pocas décadas,  convirtiéndose Pekín o Shanghai en dos de las ciudades más urbanizadas y sobrepobladas del mundo.

El archipiélago de Shengsi: un lugar de ensueño

Shengsi es un archipiélago situado en la desembocadura del río Yangtze y está compuesto por al menos unas 400 islas. Se ubica dentro de la provincia de Zhejiang y tiene frontera marítima con Shangai al oeste, con el Océano Pacífico al este, el Mar Amarillo al norte y Putuoshan al sur.

CHINA2

No todas las islas están habitadas y las que lo están constituyen una de las zonas turísticas de China, especialmente visitadas por la calidad de sus pescados y mariscos, así como por sus playas de suave arena que invita a pasear a caballo por la orilla del mar, hacer surf, pasear en moto acuática, hacer ejercicio o contemplar las espectaculares vistas panorámicas desde los acantilados. Un lugar idílico al que habitantes de Shanghai realizan escapadas de relax y vacaciones.

Las islas de Shengsi: la Naturaleza vuelve a reinar en las calles

Pero el abandono de alguno de estos pueblos pesqueros de las islas ha dejado paisajes inquietantes y fantasmales en los que la vegetación ha ido ocupando calles y plazas. Los edificios cubiertos por los verdes mantos de la hojarasca llenan los silencios en los espacios que antes se llenaban de voces, risas y música, siendo escenarios de la vida cotidiana de las familias de pescadores.

CHINA

Un paisaje en el que el hombre ha dejado de ser el protagonista para dejar paso a la Naturaleza y un casi surrealista horizonte de líneas rectas, tejados, ventanas y puertas recubiertas de verdor que forman ya un todo con la montaña. Sin duda, las islas Shengsi de China son uno de esos lugares curiosos y llenos de belleza que nos llevan a pensar en la fuerza de la Naturaleza y su silenciosa y armoniosa manera de reclamar lo que un día fue suyo.

Imagen: Obra de 唐 宇宏