Las regiones del mundo no solo son ricas en diversidad geográfica, flora y fauna, sino también en cultura. Cada pueblo que se desarrolla en un asentamiento geográfico, va desarrollando sus propias bases de socialización, en las que el entorno puede resultar determinante. Las curiosidades de los Inuit nos presentan justamente a uno de los pueblos recónditos más curiosos. Tanto, que incluso algunas de sus tribus han desaparecido por completo. Hoy en Supercurioso nos hemos puesto a investigar, y te contamos sobre el interesante caso del pueblo Inuit desaparecido. ¿Nos acompañas? Pues, ¡Empecemos!

La historia de los Inuit

historia de los inuit

Antes de hablar del pueblo Inuit desaparecido, es necesario tener una referencia general sobre su historia. Lo primero a tener en cuenta sobre la cultura y la mitología Inuit, es que se trata de un grupo social acostumbrado a las condiciones extremas.

Se trata de un grupo de pueblos indígenas que habitan las regiones árticas de Canadá, Groenlandia, Alaska y partes de Siberia. También se les conoce como esquimales, aunque este término es considerado despectivo y se prefiere el uso del término «inuit». Los inuit son conocidos por su adaptación a los entornos fríos y severos del Ártico.

Tradicionalmente, se han dedicado a la caza, pesca y recolección como medios de subsistencia. Utilizan técnicas especializadas y conocimientos ancestrales para cazar animales marinos, como focas, morsas y ballenas, así como para pescar en lagos y ríos. También tienen una cultura rica y diversa, con una historia ancestral que se remonta miles de años. Su cosmovisión y forma de vida están arraigadas en una estrecha relación con la naturaleza y los recursos naturales del Ártico. Los inuit han desarrollado una profunda comprensión de su entorno, así como habilidades y tecnologías adaptadas para sobrevivir en condiciones extremas.

A pesar de ello, llama la atención la historia del pueblo Inuit desaparecido. Y es que, a pesar de la interacción y dominio de un entorno de enormes complejidades, el pueblo Inuit en la actualidad se ve sometido a diferentes injerencias y amenazas.

En concreto, nos llama la atención el caso de un grupo social que se asentaba en las orillas de un lago canadiense, y que en la actualidad parece que ha desaparecido por completo. Acompáñanos a conocerlo.

El pueblo Inuit desaparecido

pueblo Inuit desaparecido

La historia del pueblo Inuit desaparecido es un enigma aún no resuelto. Y no solo resulta un misterio, sino que también se alza como una especie de metáfora de lo que está a punto de ocurrir en el Ártico.

La desaparición de un pueblo Inuit asentado junto al lago Angikuni, en Nunavut, en Canadá, sucedió en 1930, pero los organismos en defensa del medio ambiente y defensores de los efectos del cambio climático, lo ven como una especie de ejemplo de lo que podría ocurrir en unos años con el resto de pueblos asentados en esta latitud.

Sea como sea, lo ocurrido con este pequeño pueblo es un reto para todos aquellos aficionados a lo extraño y también a lo inexplicable. Pero, ¿Qué fue en concreto lo que les ocurrió a todas estas familias Inuit?

La tormenta que se llevó a un pueblo

La historia del pueblo Inuit desaparecido es, cuando menos, asombrosa. Era un grupo social seminómada, un pueblo que vivía de la caza y la pesca y que vio en aquel lago un refugio más que idóneo para permanecer un tiempo. Las regiones cercanas sabían de su presencia allí y era común tener buenas relaciones con los Inuit. Fue una mañana de verano ártico cuando Joe Labelle, un cazador canadiense, recorría las tierras de los inuit para negociar con ellos. Para venderles unas pieles como siempre había hecho.

Pero cuando llegó al lago Angikuni se dio cuenta de que algo ocurría. Aquel día se había desencadenado una temible tormenta y, por un momento, creyó que se había perdido. No era normal escuchar tanto silencio, ni ver tanta quietud. ¿Dónde estaban los ladridos de esos perros que siempre lo recibían cuando se acercaba algún extraño al poblado? ¿Dónde el humo de los fuegos, o el grito de los niños jugando aquí y allá?

Allí empezó el misterio del pueblo Inuit desaparecido. Joe Labelle pensó que, tal vez, los Inuit habían decidido dejar la zona. Algo extraño, sin duda, pero era una posibilidad. Aunque no podía ser, allí estaban las casas, los trineos, los rifles, los kayak, su ropa, sus indispensables pieles de abrigo, e incluso los restos de comida aún servidos en las mesas… El viejo cazador canadiense tenía la suficiente experiencia para saber que aquello no era normal. ¿Dónde había ido a parar aquellas 1.200 personas?

Tras investigar un poco en los alrededores, se fue de inmediato a una oficina de telégrafos para comunicar a la Policía Montada del Canadá lo ocurrido. No tardaron en llegar y a ponerse manos a la obra para averiguar qué había sucedido. Vinieron los mejores rastreadores, pero no encontraron nada. Absolutamente nada. Solo pudieron ver algo no muy agradable: a los perros aún atados, pero muertos tras haberse devorado entre ellos al no disponer de comida. Una pista más para deducir que su desaparición, no había sido voluntaria.

Un cementerio vacío

Otro hito lleno de misterio en la historia del pueblo Inuit desaparecido, es su cementerio. El camposanto inuit tenía las tumbas vacías. Al parecer habían desenterrado a sus muertos y se los habían llevado. ¿Por qué? Se desconoce. Nadie pudo dar explicaciones lógicas al respecto de lo ocurrido, no hubo hipótesis… solo preguntas y una incógnita: la de una luz verde que bajó del cielo días antes de aquella tormenta. Para muchos solo fue una aurora boreal, para otros, algo que por alguna extraña razón se llevó a 1200 personas del poblado Inuit. Quién sabe…

¿Y tú? ¿Habías escuchado sobre la historia del pueblo Inuit desaparecido en Canadá? ¿Qué opinas al respecto? ¿Qué crees que pueda haberles pasado? Déjanos un comentario más abajo o continúa el debate en nuestras redes sociales. ¡Estaremos encantados de leerte y conocer tu opinión! Y si te interesa seguir conociendo a este interesante pueblo, no te pierdas el artículo en el que te contamos sobre la asombrosa genética de los inuit. ¡Hasta la próxima!