Hablar de las curiosidades de Egipto es sumergirnos en las profundidades de una de las civilizaciones más extraordinarias dela historia. Faraones, pirámides, tumbas alucinantes, gatos dioses, reencarnaciones… son miles los aspectos interesantes que podemos encontrar al estudiar la cultura egipcia. Ya en Supercurioso nos hemos apasionado bastante con este tema, y te hemos presentado artículos muy interesantes, como el de los animales en el Antiguo Egipto. Pero en esta ocasión queremos dar un paso más allá, para contarte en concreto sobre los animales momificados. ¿Nos acompañas? Pues, ¡Empecemos!
El significado de los animales momificados en el Antiguo Egipto
En el antiguo Egipto, los animales momificados eran un asunto común. Tan es así, que muchísimos animales eran momificados con diferentes propósitos simbólicos y religiosos. Uno de los sometidos a esta práctica con mayor recurrencia eran los gatos. Recordemos que los gatos en el Antiguo Egipto se asociaban con la diosa Bastet, protectora de los hogares y la fertilidad. Los felinos momificados se ofrecían a la diosa como ofrendas, y se cree que su presencia en las casas y templos tenía propiedades protectoras y atraía la buena suerte.
Pero en las técnicas de embalsamiento egipcio también se daba lugar a otros animales momificados. Uno de ellos era el escarabajo sagrado, que se asociaba con el dios Khepri y se creía que simbolizaba la resurrección y el renacimiento. Los escarabajos momificados se usaban como amuletos funerarios, a menudo colocados en la boca o en el pecho del difunto para protegerlos en su viaje al más allá.
Los ibis, que se asociaban con el dios Thoth, dios de la sabiduría y la escritura, también eran momificados y se usaban como ofrendas votivas en los templos de Thoth. Se creía que el ibis momificado otorgaba sabiduría y conocimiento a quien lo ofrecía. Otros animales momificados con frecuencia en el antiguo Egipto eran las serpientes, los cocodrilos, los babuinos y los halcones, cada uno de ellos con sus propios significados simbólicos y asociaciones divinas.
Por ejemplo, los cocodrilos momificados se asociaban con el dios Sobek y se usaban como ofrendas votivas en los templos de Sobek. Se han encontrado cocodrilos momificados en varios templos de Sobek en Egipto. Por su parte, las tenebrosas serpientes momificadas se asociaban con la diosa Wadjet y se usaban como ofrendas votivas en los templos de Wadjet.
En general, la momificación de animales en el antiguo Egipto tenía un propósito simbólico y religioso, y se creía que otorgaba poderes protectores y propiedades mágicas a quienes los ofrecían y los poseían.
La diferencia entre las momias humanas y animales
Las momias de animales en el Antiguo Egipto tenían un significado diferente a las momias de humanos. Mientras estas se realizaban para preservar el cuerpo del difunto para el más allá, los animales momificados se presentaban como ofrenda religiosa. Se estima que en el Antiguo Egipto unos 70 millones de animales fueron momificados, luego se vendían a las puertas de los templos para que los fieles pudieran entregarlas como ofrenda a los dioses.
Ahora bien, hay otra polémica que se teje en torno a los animales momificados. Muchos estudios hechos a partir del año 2015 (como el que te presentamos en el video a continuación), revelan que muchas de las momias de animales que fueron halladas a través de los siglos, no contenían realmente a un animal. Al menos no a un animal completo. En efecto, lo que contenían muchas de estas momias eran una parte de materia animal, y otra de relleno, como el barro, palos, plumas, cáscaras de huevo y otros materiales asociados. En el video lo verás con mayor detalle:
El ritual de los animales momificados era un negocio que llegó a ser muy lucrativo. Cada ejemplar se vendía a cifras muy altas. Tanto así, que se piensa que incluso hubo granjas en las que se criaban de manera intensiva a los animales para tal uso y que, ante tanta demanda, a los egipcios no les daba tiempo a momificar a los animales, tal y como exigía la tradición, con lo cual para aligerar el trabajo la rellenaban con todo tipo de desechos.
Algunos interesantes animales momificados hallados
1. La momia de gacela
Entre los animales momificados, llama la atención esta rara y peculiar gacela. El espécimen fue criado con esmero por una reina egipcia. Ella quería que la acompañara en su viaje al «Más Allá». Así que fue momificada con el mismo esmero que la propia reina: con vendajes ribeteados en azul… Incluso se enterró en una caja con la misma forma de su cuerpo. Data del 945 a.C.
2. Las piezas de carne del Museo Egipcio de El Cairo
Te contamos que los animales momificados, aunque eran sometidos a este proceso por motivos religiosos en su mayoría, a veces rozaban otra clase de motivaciones. Por ejemplo, se sabe que los egipcios preparaban todo tipo de piezas momificadas de patos, buey, costillas, solomillos, rabo de toro… para que el difunto gozara de un banquete en el más allá.
3. La casa de embalsamamiento de los bueyes de Apis
En la gran ciudad de Menfis estos animales eran sagrados, se encuentra aún la casa de embalsamamiento de los bueyes de Apis, eso sí en ruinas cerca de Mit Raina. El proceso de embalsamamiento de este portentoso animal se extendía a lo largo de cuarenta largos días. Durante este tiempo, los bueyes muertos se dejaban reposar en natrón sobre un lecho de piedra en el patio.
En definitiva, la costumbre de los animales momificados formó parte importante de la cultura en el Antiguo Egipto. Por motivos simbólicos, religiosos, de protección e incluso para preparar un banquete después de la muerte, estos animales quedaron como referencia histórica de una época cargada de los más poderosos simbolismos.
Y tú, ¿Conocías la historia de los animales momificados en Egipto? ¿Qué piensas de esta peculiar forma de conservación? Anímate a dejarnos todas tus opiniones en un comentario. Y si, como a nosotros, te fascina este país con toda su magia histórica y cultural, no te pierdas esta selección de los mejores lugares qué ver en Egipto. ¡Hasta la próxima!