Hemos hablado en más de una ocasión de la vida hace millones de años y de cómo los humanos se enfrentaban a condiciones de vida mucho más difíciles, y a menudo terroríficos, de lo que podemos imaginar hoy en día. Queremos hablarte en el siguiente artículo de la vida de uno de esos humanos, en concreto de un niño neandertal que vivió y murió durante la Edad de Hielo.

Si la vida en la Edad de Hielo era más que dura, imagínate que además te decimos que durante ese período existían, además de otros muchos peligros, unos pájaros gigantes que se comían a los humanos, ¿terrorífico verdad?.

Algunos investigadores polacos han descubierto recientemente los restos de un niño neandertal que, al parecer, pudieron tener esa suerte y llegaron a pasar por el sistema digestivo de alguno de esos animales temibles.

¿Cómo fue el hallazgo del niño neandertal?

niño neandertal

En concreto se hallaron unos diminutos huesos pertenecientes a los dedos de las manos, cuya medida no supera el centímetro de longitud. Fueron hallados en Ciemna, una cueva ubicada en Polonia.

En un principio estos investigadores creyeron que se trataba de huesos de animal, pero al analizarlos se dieron cuenta de que pertenecían a un neandertal que oscilaba entre los 5 y los 7 años de edad y los huesos databan de 115.000 años atrás. Su conservación no era lo suficientemente buena como para poder analizar el ADN, aunque las pistas que arrojaban no dejaban lugar a dudas a los investigadores de su identidad.

«No tenemos dudas de que estos son restos neandertales, porque provienen de una capa muy profunda de la cueva, a pocos metros por debajo de la superficie actual. Esta capa también contiene herramientas de piedra típicas utilizadas por el neandertal» dijo el profesor Pawel Valde-Nowak de la Universidad Jagellónica en Cracovia en un comunicado.

Ya parece suficientemente extraño haber encontrado restos de huesos de un neandertal en Polonia, ya que nunca antes se habían tenido evidencia de que estos humanos estuvieran en ese territorio. Lo que resulta todavía más extraño es saber que, además, esos restos se han conservado a través de las entrañas de un animal desconocido y realmente intrigante: un pájaro gigante.

«Solo fragmentos únicos de huesos fósiles pertenecientes a parientes del homo sapiens han sobrevivido hasta nuestros días en Polonia», señaló Valde-Nowak. «¡Podemos contar los restos neandertales encontrados en Polonia con los dedos de una mano!»

Se encontraron más restos a unos 100 km al norte de los Montes Cárpatos, en concreto en la Cueva Stajnia, pero en esta ocasión se trataba de tres dientes. Con casi total seguridad, los neandertales aparecieron en Polonia hace unos 300.000 años, de la misma manera que aparecieron en el resto de Europa.

niño neandertal

Los otros tres dientes se encuentran en la Cueva Stajnia, ubicado a 100 kilómetros al norte de los Montes Cárpatos. Los neandertales probablemente aparecieron en Polonia hace unos 300.000 años, como lo hicieron en el resto de Europa.

¿Cuáles son las evidencias de la presencia de un ave gigante en los restos del niño neandertal?

Estos pequeños fragmentos de huesos del niño neandertal estaban llenos de unos pequeños agujeros que, según los investigadores que los analizaron, indicaban que habían pasado por el sistema digestivo de un ave bastante grande. El tamaño del ave se supone grande porque de otro modo sería incapaz de engullir a un niño, por menudo que fuera, de unos 5 o 7 años.

«Este es el primer ejemplo conocido de la Edad de Hielo», dijo Valde-Nowak.

De lo que no tienen seguridad los investigadores es de si el niño fue perseguido y salvajemente atacado por ese ave gigante o, si bien, el niño neandertal ya estaba muerto cuando el ave se topó con su cadáver, lo que indicaría además que podría tratarse de alguna especie carroñera.

En realidad, la sola idea de que un pájaro gigante devore a un niño de 5 años parece, a simple vista, inverosímil. Sin embargo, hoy en día también existen aves depredadoras bastantes sorprendentes aunque, para nuestra suerte, no comen niños.

La historia nos ha dado muestras de especies bastante terribles como es el caso del águila Haast, ahora ya extinguida, que vivía en Nueva Zelanda y poseía una feroces garras capaces de atravesar una pelvis humana.

Así que, después de todo, no debe de ser muy difícil imaginar a nuestros parientes de la antigüedad, como el niño neandertal del que se han hallado los restos, protegiéndose de especies depredadoras mucho más terribles. Seguramente no estaban tan indefensos como creemos, ya que sabemos que en esa misma época eran capaces de cazar a grandes osos para aprovechar su carne y sus pieles. El problema, como siempre, está en que ante un grupo de personas los animales suelen atacar a los miembros más débiles, en este caso los niños.

¿Qué te ha parecido nuestro artículo sobre los restos de un niño de neandertal hallados entre los de un pájaro extinto que pudo ser gigante? ¿Qué opinas sobre aquella época? Debía ser difícil sobrevivir allí, ¿no crees? ¡Déjanos tus comentarios!