En el planeta tierra existen infinidad de animales curiosos, muchos extraños y poco vistos, otros, en cambio, los tenemos cerca todo el tiempo; las aves son un ejemplo claro de esto. En Supercurioso hemos tenido la oportunidad de hablar sobre los animales que viven en condiciones extremas o los animales que viven en la ciudad, no obstante, hoy quisimos profundizar en la morfología de las aves. ¿Por qué son como son?, y ¿para qué sirven las plumas de las aves? Interrogantes a las que queremos dar respuesta. ¿Quieres saber más sobre esto? Continúa leyendo, te sorprenderás. 🙂

¿Para qué sirven las plumas de las aves?para que sirven las plumas de las aves

Pensemos por un momento la respuesta a esta pregunta… ¡Déjanos adivinar! ¿Acaso se te pasó por la mente que las plumas de las aves les sirven para volar o tal vez para protegerse del calor? Bueno, estás en lo correcto, pero tu respuesta se queda corta. Si bien las plumas de las aves tienen estas funciones básicas, también poseen muchas más, tantas que la lista podría hacerse larguísima.

Aunque es difícil imaginarse un ave sin plumas, debes saber que las plumas para ellas son como una mano para nosotros; las manos a nosotros nos sirven para comer, escribir, tomar objetos, abrir puertas, etc., pero por más que continuemos la lista, nunca acabaríamos de mencionar todo lo que podemos hacer con ellas. Tal cual, así mismo son las plumas de las aves.

Entonces, responder a la pregunta: para qué sirven las plumas de las aves no es tarea fácil. Aun así haremos una pequeña aproximación de sus continuas y múltiples funciones, hablaremos de algunas básicas y otras que ni siquiera te imaginas. ¡Acompáñanos!

1. Vuelo y calor

Como te mencionamos anteriormente, las plumas de las aves sirven especialmente para planear cuando estas están en vuelo y direccionar sus movimientos en el aire. Las plumas de las alas y la cola son las que tienen esa función, por tal motivo es que allí son más rígidas y cortas. Asimismo, existe otro tipo de plumas que parecen más «pelusas» o bellos gruesos que salen de la piel en mayor cantidad, estas son extremadamente cortas y crespas, este tipo de plumas son especiales para mantener el calor en el cuerpo del ave.

La cantidad de calor corporal que ellas mantienen puede ser ajustado por las plumas, ya que cuando hay un cambio de temperatura drástico ellas se encargan de regular cuanto aire toca la piel. Si quieres saber más sobre su vuelo, te invitamos a conocer cómo se orientan las aves migratorias.

2. Protección frente a las condiciones climáticas

Otra de las respuestas al para qué sirven las plumas de las aves se da cuando observamos que estas protegen la piel del ave, especialmente del sol y del viento. Cuando las plumas son rígidas en sus puntas sabremos que estas son ideales para cortar y desviar las corrientes de aire fuertes. Asimismo, de acuerdo con algunas investigaciones sobre el color de las plumas de las aves, se ha determinado que aquellas que tienden a ser más oscuras protegen hasta un 50% más contra los rayos solares que aquellas que son blancas o de colores claros.

3. Construcción

Así es, esta es otra de las funciones de las plumas de las aves. Cuando se aproximan los días de empollar los huevos, muchas de las aves, juntan lodo, paja, ramas de árboles y plumas de ellas mismas u otras aves para construir los nidos donde nacerán sus polluelos. El nido requiere de las alas de las aves porque son estas las que aportan estructura al nido, además hacen de la base más acogedora para los recién nacidos.

4. Cortejar

No podíamos dejar de lado el cortejo, el caso más común es el de los pavos reales, uno de los animales más bonitos del mundo. Y es que son precisamente sus plumas las que los hacen resaltar por encima de sus candidatos.

Las plumas también cumplen la función de hacer más atractivas a las aves para el sexo opuesto. Por ejemplo, entre los pájaros es muy común observar al macho engalanado con colores resplandecientes. Esto es debido a que el sentido de la vista es uno de los más desarrollados en las aves y el estímulo visual es fundamental durante el cortejo. Una situación clásica es la del pavo real, que durante la conquista extiende su ostentoso plumaje.

Cuando inician a cortejar mueven sus plumas en una danza casi hipnotizante, quien tenga las plumas más llamativas es el que tendrá la oportunidad de aparearse con la hembra. ¿Para qué sirven las plumas de las aves? ¡Nada más y nada menos que para dar comienzo a su reproducción!

Datos curiosos sobre las plumas de las avespara que sirven las plumas de las aves

Si aún con las razones expuestas anteriormente no te queda claro para qué sirven las plumas de las aves, queremos contarte algunos datos curiosos sobre estas. El vocablo «queratina» proviene del idioma griego y significa córneo y se puede definir como una estructura muy fibrosa que, no solo se encuentra en las plumas de las aves, sino también aparece en otros animales en forma de cuernos y pezuñas. Las plumas están compuestas de esta sustancia córnea, que es la misma que podemos encontrar en nuestras uñas y cabellos, pero con diferente estructura.

Las distintas formas que presentan las plumas son complejas y se disponen sobre el ala de una manera muy particular: las más extensas se ubican en la parte exterior y las más cortas en la región interior. Extendidos a ambas zonas del cañón hueco de cada pluma, existen filamentos muy finos, que reciben el nombre de «barbas» (muy semejantes a las nervaduras de una hoja). Cada una de estas está rodeada de filamentos, aún más pequeños llamados barbillas, que se entrelazan formando una suave y continua superficie que puede atravesar el aire.

Gracias a su forma aerodinámica, al igual que la del cuerpo, el vuelo de las aves se torna más sencillo. Sin embargo, esta característica de las plumas en las aves resulta de una importancia relativa con relación al aislamiento del calor corporal y el vuelo.

Cuéntanos, ¿conoces otras funciones de las plumas de las aves? No olvides contárnoslas. Y por si quieres conocer cosas impresionantes del mundo, te invitamos a descubrir la naturaleza rosada, te encantará.