¡Atención! este artículo no trata de una de las curiosidades a las que os tenemos acostumbrados, más bien es una «carta» de agradecimiento para todos vosotros que hacéis que Supercurioso tenga sentido. ¿Por qué escribo este articulo hoy y no ayer o mañana? Porque hoy es el primer cumpleaños de Supercurioso. Quiero contaros un poco más sobre esta página y de paso algunas curiosidades sobre su creación y su puesta en marcha.

Quizás este artículo no te resulte tan interesante como otros que hemos publicado, pero si quieres conocernos un poco más, ¡Quédate con nosotros! Nos hace ilusión.

Supercurioso. El origen

Si hoy es el primer cumpleaños de Supercurioso ya habrás deducido que el camino de esta página comenzó el 29 de Septiembre del 2013. Era un Domingo aburrido como otro cualquiera, al día siguiente tocaba trabajar y ya era demasiado tarde cómo para organizar un plan que mereciera la pena. Yo siempre había querido tener un blog, aunque he de reconocer que nunca me había gustado demasiado escribir. Es como querer ser piloto de avión pero tenerle miedo a las alturas…una mala combinación.

La cuestión es que ese día algo pasó…¡Estaba motivado! Quería comenzar el blog, no importaba cuanto tiempo fueran a durar estas ganas, lo importante en ese momento era comenzar. Pero…¿de qué podía escribir un blog? No tenía ni idea, me vinieron muchos temas a la mente y ninguno bueno. Mi plan para crear un blog se estaba frustrando, estaba a punto de olvidarlo cuando me dije: «Josean, siempre estás contando historias y curiosidades ¿Por qué no montar uno de eso?» (Sí, yo también opino que suena raro hablar con uno mismo).

Más o menos 1 hora me llevó montar toda la estructura del blog (los que lleven aquí un tiempo se acordarán de que era bastante cutre) pero llegó el momento de escribir y no tenía nada que contar. Tres horas después y más de 20 borradores de artículos, desistí del intento, mañana sería otro día.

Supercurioso. El lanzamiento

Era día 30, llegué a casa después de trabajar y me acordé de Supercurioso. Tenía que redactar un artículo y lanzarlo. Por suerte, no me costó demasiado, pensé en un tema rápido, lo escribí y lo lancé, ¿Sabes cuál fue el primer artículo de Supercurioso? «Las semillas de manzanas son venenosas». He de reconocer que no es un gran artículo, ni siquiera un buen artículo, pero con sus 170 palabras (en verdad 169) cumplió su cometido: ¡Ya tenía un blog!

¿Sabes cuánta gente leyó el artículo de la manzana el primer día? ¡15 personas! Algo muy deprimente después de haber gastado tanto tiempo en ello y habérselo enviado a todos mis amigos y familiares para que lo compartieran. Parece que no me hicieron mucho caso.

Supercurioso. El despegue

Era ya Octubre, mi hermana se incorporó al equipo de Supercurioso y me echó una mano redactando artículos, (a la velocidad que yo los escribía jamás conseguiría visitas en la web). Volví a enviar un email a todos mis amigos y familiares, les dije que esta vez iba en serio, que estaba decidido a darle continuidad al blog y esta vez…sí me hicieron caso. (por suerte a veces la insistencia tiene su recompensa)

Algo fantástico comenzó a pasar, no sólo llegaban seguidores de España sino que también unos buenos amigos argentinos, mexicanos y chilenos que habían recibido mi email realizaron su trabajo muy bien. Lo pasaron a sus amigos y estos a sus amigos. Supercurioso comenzaba a crecer y lo hacía de manera internacional. Esto me dio un empujón para seguir publicando.

Supercurioso. Las turbulencias

La página había llegado a los 5.000 seguidores, tenía muy buen aspecto pero como todo en esta vida también tenía sus partes malas:

Supercurioso se había quedado estancado, escribía artículos y artículos pero sólo lo leían las mismas personas, crecíamos muy pocos seguidores al día y muchos días perdíamos tantos que nos quedábamos igual que antes. Me llevaba mucho trabajo escribir dos artículos diarios, comencé a recibir las primeras críticas y quejas y además entre el tiempo que dedicaba y el cúmulo de gastos que suponía tener el blog, estaba desperdiciando tiempo y dinero, (dos recursos de los que en esos momentos no andaba muy sobrado). Dejé unas semanas de escribir en Supercurioso, parecía que el proyecto estaba abocado al fracaso.

Por suerte, aunque las turbulencias están llenas de bajadas, también tienen subidas. Cuando dejé de escribir en Supercurioso comenzaron a llegar mensajes a través de Facebook de los seguidores preguntando qué estaba pasando. ¡No me lo podía creer! Había gente que echaba de menos las publicaciones de Supercurioso. Decidí volver a la carga, pero esta vez bien preparado para la batalla. Escribí más artículos que nunca, más completos, más interesantes y más curiosos (O al menos, eso intentaba). Nuevos amigos se unieron al proyecto de Supercurioso, escritores con mucho talento que aportaron grandes dosis de contenido a esta publicación. Había pasado de ser un blog a ser una web y los seguidores comenzaron a llegar.

Supercurioso. El viaje

Después de este repaso a la breve historia de Supercurioso es el momento de recapitular, mirar hacia atrás y agradeceros a todos vosotros que estéis día a día al otro lado de la pantalla, leyendo, comentando y compartiendo nuestros artículos. Sabemos que hemos metido la pata en algunas muchas ocasiones, pero intentamos arreglarlo cuanto antes y agradecemos vuestra comprensión.

El viaje de Supercurioso continúa y esperamos que sigáis en el avión todo el tiempo que sea posible. Volar bien acompañado ayuda a evitar el miedo a volar.

Supercurioso.  4 Curiosidades

Ahora llega lo que a todos nos gusta: Las curiosidades. Te presentamos una selección de 4 curiosidades rápidas sobre Supercurioso. (Nos guardamos más para futuros artículos)

  • El logotipo del Búho: Los grandes ojos de este animal le hacen parecer un animal de naturaleza curiosa, además en muchas culturas está considerado cómo un símbolo de sabiduría y la cultura sin olvidar ese halo de misterio que lo rodea como ave nocturna que es. (Era el animal perfecto para el logotipo de Supercurioso).
  • La extraña propuesta: Unos de los primeros artículos que escribimos fueron «Los disfraces más originales para Halloween I» y «Los disfraces más originales para Halloween II«. Estos artículos llamaron la atención de varias tiendas de disfraces, nos pidieron que habláramos en nuestros artículos de sus productos. Días después otra tienda online de disfraces nos mandó un email con una extraña propuesta: Nos regalaba un disfraz de pollo o de fregona si hablábamos de su tienda en nuestros artículos. Sólo he de decir que ese mismo año me disfracé de pollo. (Soy fácil de sobornar).
  • No apto para menores: Uno de mis primos pequeños leyó el artículo «Parálisis del sueño: Tu peor pesadilla» y pasó una semana con miedo a la hora de irse a dormir. Su madre le prohibió leer Supercurioso hasta que afrontara ese miedo, por supuesto lo hizo y posiblemente hoy esté leyendo estas líneas. ¡Un saludo primo!
  • Supercorioso: Sí, has leído bien, he dicho Supercorioso. El día que compré el dominio de supercurioso, lo hice con tantas prisas que me equivoqué y compré supercorioso.es en lugar de supercurioso.es. Por suerte el proveedor de dominios lo entendió y accedió a hacer el cambio sin coste adicional.