Las curiosidades de la luna nos presentan algunas de las facetas más interesantes del gran satélite de la Tierra. Por ejemplo, se sabe que su origen puede rastrearse hasta unos 4.500 millones de años atrás, o que resguarda las cenizas de un afamado astrónomo que se dedicó a estudiarla. También es mucho lo que se ha explorado sobre los colores de la luna o sobre la fascinante atmósfera lunar. Pero, en esta ocasión, en Supercurioso nos hemos querido concentrar en la acción que el hombre ha ejecutado en el satélite terrestre, contándote sobre los objetos en la luna que fueron dejados por astronautas.
10 objetos en la luna, dejados por accidente
La realidad es que desde que Neil Armstrong pisó la superficie lunar por primera vez, son muchos los efectos que la acción humana ha generado. Algunos son verdaderamente nocivos, como los más de 180 mil kilos de basura que se acumulan en la superficie de la luna por causa de la acción humana. Pero otros no son más que descuidos curiosos, objetos en la luna que han sido accidentalmente olvidados por astronautas en su viaje lunar. Acompáñanos a descubrirlos.
1. Pelotas de golf en la luna
Iniciamos este recorrido por los objetos en la luna que fueron olvidados por astronautas, con las curiosas pelotas del golf. El responsable de este gracioso olvido fue el comandante del Apolo 14, Alan B. Shepard Jr., un 5 de febrero de 1971. Este hombre es una auténtica leyenda en la historia espacial, el primer americano en volar al espacio y el quinto en pisar la luna. ¿Y cómo llegó este buen hombre a dejar allí una pelota de golf? Porque jugó allí unos instantes con su hierro 6, el más adecuado para dicho terreno. Existen numerosos vídeos sobre el mítico instante por si te interesa. Lo que se cuenta al respecto es que el astronauta golpeó su pelota con tal fuerza que se alejó millas y millas, haciendo imposible su recuperación.
2. Seis banderas de los Estados Unidos en la luna
Esta es de las curiosidades de la luna más populares. Era una tradición, un gesto de conquista por parte de la agencia americana espacial, el acto de clavar la bandera de barras y estrellas de EEUU. Tan es así, que se hizo a lo largo de seis veces en cada una de las misiones Apolo. De hecho, era la mejor forma de asentar el poderío norteamericano por encima del ruso, en la lucha de la carrera espacial. ¿Y siguen ondeando a pesar de no haber atmósfera? Lo desconocemos.
3. Tres Lunar Rover de la NASA en la luna
La carrera espacial implicó, tanto para Estados Unidos como para Rusia, una enorme inversión en equipos, tecnología y preparación de los astronautas. De hecho, entre los aparatos más cotizados están los vehículos lunares. Pues, quizás te parezca curioso saber que entre los objetos en la luna dejados por el hombre, se cuentan tres vehículos itinerantes lunares de altísimo coste, y que permitían a los astronautas moverse con tranquilidad a lo largo de extensas distancias. Pero, ¿Por qué se quedaron allí? Lo desconocemos. Se dice que podrían rondar incluso los 19 millones de dólares. Increíble, sin duda.
4. Seis módulos lunares en la luna
Otros objetos en la luna que fueron dejados allí por los astronautas fueron los módulos lunares, en concreto, seis de ellos. Se trata de partes de un vehículo espacial que se construyó durante el programa Apolo. Se sabe que a día de hoy en la superficie lunar siguen descansando encallados unos seis módulos de descenso, mientras que otros seis construidos para el ascenso, se estrellaron y se perdieron.
5. Un retrato de familia en la luna
Otro de los más curiosos objetos en la luna es el retrato de una familia. Si, aunque no lo creas, en la superficie lunar reposan los rostros sonrientes de un grupo familiar. ¿El culpable de este curioso hecho? Charles Duke, en abril del 1972, en el Apolo 16. Y lo hizo apropósito en una de sus excursiones, dejando una fotografía previamente protegida por una funda de plástico para que estuviera así salvaguardada de los elementos. El reverso de la imagen lleva aún el siguiente mensaje: «Esta es la familia del astronauta Duke del planeta Tierra. Alunizada en abril de 1972» Sin duda un acto cargado de simbolismo.
6. Cinco retrorreflectores en la luna
Pero, ¿qué es realmente un retrorreflector? Se trata de instrumentos encargados para reflejar la luz, sin importar su ángulo de incidencia. No es ingeniería de punta ni nada del otro mundo, son simples utensilios que todos tenemos también en nuestras bicicletas. Pues bien, ahora cada vez que mires la Luna, recuerda que nuestros astronautas dejaron allí cinco de ellos.
7. Dos vehículos robotizados
|Otros objetos en la luna también se asocian con la tecnología en la que fue necesario invertir para llegar a ella. Se trata de dos vehículos robotizados llamados Lunojod 1 y Lunojod 2, ingeniería soviética que se dejó allí entre 1971 y 1973. Fueron en realidad los primeros vehículos lunares de la historia, llegados desde el cosmódromo de Baikonur abordo del cohete Proton-K, momento en que se puso en órbita la sonda Luna 17 con el primero de éstos vehículos, el Lunojod 1. ¿Su misión? Enviarnos imágenes de nuestro bonito satélite.
8. Una insignia de plata
¿Te dejarías tú algo tan personal como una insignia en un planeta desconocido o en la superficie de ese satélite que orbita alrededor del tuyo? lan Bean pensó que sí, que sería un bonito recuerdo y no lo dudó. La dejó caer en un cráter. Se trataba de una insignia de la NASA, la que suelen dar a los astronautas que ya han acabado su formación, pero que todavía no han tenido la oportunidad de ir al espacio. Así que ¿de qué le servía ya? Era el momento perfecto para dejarla ir. Al fin y al cabo no todos los astronautas tiene la oportunidad real de hacer un viaje al espacio, y aún menos a la Luna.
9. Cinco S-IVB
Y entre los objetos en la luna que fueron dejados por astronautas, los de mayor masa fueron cinco S-IVB, enormes cohetes que fueron construidos por la Nasa para lograr que las misiones Apolo 13, 14, 15, 16, y 17 lograran llegar a su destino. El más grande de ellos fue el Saturno V, que medía 110,64 m de altura y fue el más grande construido. Lleno de combustible, pesaba nada menos que 2.700 toneladas.
10. La escultura The Fallen astronaut
Y el último de los objetos en la luna, quizás de los más simbólicos, es la pequeña escultura de un astronauta con traje espacial, hecha de aluminio y reconocida como El Astronauta Caído. Es una encantadora obra del artista belga Paul Van Hoeydonck, que conoció al astronauta David Scott durante una cena. Lo que se cuenta al respecto es que Scott le pidió al artista que creara una pequeña estatuilla que sirviera para honrar a sus compañeros fallecidos en la carrera espacial. Van Hoeydonck así lo hizo. Entonces, en el año 1971, la obra fue colocada en la superficie de la luna por la tripulación del Apolo 15, junto con con una placa que muestra los nombres, ordenados alfabéticamente, de ocho astronautas y seis cosmonautas fallecidos en misiones espaciales o durante entrenamientos.